Just Live [MAGCON]

Vine XXI.

Nash.

-¿Qué os hace tanta gracia? -pregunté frotándome la cabeza con una toalla para secarla.

Ambos Jacks estaban en mi cama del hotel, mirando el móvil y hablándose entre susurros divertidos.

-Nada -dijeron al unísono poniendo la pantalla del móvil boca abajo cuando me asomé a ver.

Dos pares de ojos me miraban inocentes.

-Déjame ver.

-Mejor que no. Ya lo verás por ti mismo.

-¿Qué más da? -dije frunciendo el ceño molesto.

Ambos intercambiaron una mirada cómplice antes de que Johnson me tendiese el móvil desde la cama.

Lo cogí y vi que se trataba de un tweet de Rebecca.

"Relationship Goals" Debajo de las dos palabras que ya de primeras me dejaron sorprendido había adjuntado una foto de las que nos sacaron en la puerta del hotel.

Mi mandíbula cayó abierta.

-¿Qué decías de definir vuestra relación? -se burló Gilinsky.

Observé bien la foto. Se me veía completamente feliz con las fans de la puerta, hablando con ellas mientras Becca  sonreía de oreja a oreja cogiendo mi cintura. Ni siquiera recuerdo que su brazo estuviera ahí.

-Yo...No he hablado con ella aún -balbuceé.

-Ya claro -Johnson me arrebató el móvil de las manos. Yo seguí mirando al mismo sitio, aunque esta vez lo único que viera fuera la moqueta.

-Si no querías decírnoslo está bien, Nash -arremetió el otro.

-¡Pero que yo no sabía si estábamos saliendo o no!

-Ella lo tiene bastante claro -rieron.

Los eché de habitación para poder pensar.

En el instituto siempre quise que Becca se fijara en mi. Ahora que lo ha hecho me siento inseguro.

"¿Y ese Tweet?" le mandé.

Respondió al segundo.

"¿Qué pasa con él?"

"¿Es oficial entonces?"

"¿No lo era ya antes?"

Sonreí ante nuestra conversación a base de preguntas a pesar de que estaba quedando como un completo gilipollas y nuevo oficial peor novio.

"Solo quería asegurarme :)"

Guardé el móvil.

Conversación estúpida = Nash feliz.

Si, no se necesitaba mucho para hacerme feliz.

Cam entró en ese momento en la habitación. Se detuvo en cuanto me vio, retrocediendo lentamente.

-No. Dime que esa sonrisa no es de enamorado. Dime que no, o esta noche duermo con la cocinera del hotel. Y debo decir que huele como si viviera en las cloacas.

Me lancé a darle un abrazo y saltar, obviamente sin contar con su cooperación.

-Joder, Cameron, para eso agarro un poste, que por lo menos no tengo que preocuparme de si le ahogo.

-De hecho, -habló a través de mis brazos envueltos en su cabeza.- No puedo respirar.

Se deshizo de mi agarre despeinado. Me encantaba ser más alto que él.