Capitulo 15: Visita a Hagrid

465 30 3
                                    

Abby corría con el viento helado dándole en la cara, sentía un tiovivo de sentimientos negativos en sus entrañas. Tristeza, odio, dolor (tanto físico como psíquico), furia sobre todo... no se detuvo hasta llegar a la Casa de los Gritos, se sentó en el banco que había cerca de allí. No sabría decir cuanto tiempo había estado allí, llorando, pensando en sus padres, que habían muerto junto a otro gran amigo por el mejor amigo de su padre. Ese individuo era el culpable de haber estado once años en un orfanato, que hubiesen asesinado a sus padres, y que no pudiese haber vivido con ellos y su hermano felizmente, sintió la rabia y el dolor nacer otra vez de dentro, y lanzó una gran bola de fuego hacia la nieve, que se derritió en seguida, pero a la vez este paró el elemento ígneo.

-Tenía la corazonada de que estarías por aquí; es un lugar muy apartado-dijo una voz tras ella.

Abby se giró para ver a Remus, su padrino que se sentó junto a ella.

-Hagrid me contó lo que había pasado, estaba muy preocupado...-informó el.

-Pues aquí estoy-respondió ella con rabia limpiandose las lágrimas.

-...Temiamos que hubieses hecho alguna locura...

-Pues estoy aquí-gruñó mas que dijo.

-... Dice que lo siente muchisimo....

-Eso no me devolverá a mis padres-volvió a decir en el mismo tono.

Remus suspiró.

-¿Crees que no he sufrido yo por ti, por Harry, por James y por Lily?

-¡Si tanto sufriste! ¿Por qué no me sacaste del orfanato?-preguntó ella encolerizada.

Remus acusó el golpe.

-Porque soy pobre, y no hubieses estado bien en mi casa, por órdenes de Dumbledore y porque...-se interrumpió-... el caso, es que ahora que nos hemos encontrado, y que Voldemort sabe de tu existencia, no tengo intenciones de separarte de mi... ¡Por Merlín! ¡Tu mano!

Abby alzó su mano herida, no había reparado en ella.

-Tengo algo por aquí para curarte la mano-su padrino empezó a mirar por sus bolsillos.

-No hace falta-Abby colocó su mano un poco mas arriba que la otra, y dejó que la magia curativa funcionase, los cristales saltaron y las heridas se curaron.

-Asombroso-susurró el.

-¿Por qué no me lo contaste?-preguntó apoyando su cabeza en el hombro de su padrino.

-Porque no quería que ni tu ni tu hermano fuerais a por Black, prométeme que no irás a por el ¿vale? Tus padres dieron la vida para salvarte, arriesgando la vida para enfrentarte a Sirius, no es una manera de agradecérselo. Y no le digas nada a nadie, por favor.

-Vale.

-¡Abby!-exclamó alguien a lo lejos-George y yo te hemos buscado por todo Hogsmeade.

-Nos vemos luego-se despidió Lupin.

-Adios.

Fred llegó hasta ella, y se sentó junto a ella cuando Lupin ya estaba lejos.

-¿Estas bien?-preguntó con suavidad.

-Si... no es lo que esperaba de una excursión.

-No lo sabía-se disculpó el-no teníamos que habernos quedado ahí, lo siento...

-No tienes que disculparte-dijo Abby-tu no sabías nada, además era yo la que he decidido escuchar,... y ahora se toda la historia.

-¿No irás a buscar a Black?-preguntó preocupado.

La hermana de Harry Potter y el prisionero de AzkabanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora