Special Girl

Capítulo 21 [Olvidar no es tan fácil]

-Narrando Anne-

Después de todo lo que pasó con Derek, Brandon y yo estabamos bien. Le perdoné el fallo que tuvo, tampoco era rencorosa y quise empezar de cero. Realmente nos gustabamos pero no sabía si el estaría dispuesto a empezar una relación, además tenía miedo de no estarlo yo.

Entramé a la fiesta con Brittany.

-Que gusto poder abrazarte -corrimos ambas a abrazar a Stephanie-.

-Es una sensación genial -sonrió feliz-. Por cierto Brittany, Cameron llegó antes y me ha dicho que te espera en la azotea.

Ella corrió hacia arriba como las locas y en ese momento vino Brandon hacia mí. Stephanie se marchó dejandonos solos.

-¿Puedo hablar contigo?.

-Claro.

-Quiero estar contigo Anne.

Guau eso no me lo esperaba y menos así de lanzado, me hizo feliz esa petición.

-Podemos intentarlo, a ver que tal.

Él sonrió feliz y me cogió en alto sin dejar de besarme. Parecía que me tocaba y ser feliz.

-Narrando Brittany-

Subí corriendo a la azotea y cuando entré ví a Cameron apoyado en el balcón. Sonreí para mi misma, estaba tan guapo.

-Hola precioso -sonreí susurrandole en su oreja-.

-Hola mi vida -me dió un tierno beso-.

-¿Para qué querías verme aquí?.

Ví que sacó una cajita negra y mis piernas comenzaron a temblar, no podía ser lo que yo estaba pensando. Miré a Cameron con los ojos iluminados de la ilusión, se arrodilló ante mí y dijo la pregunta que me esperaba.

-Brittany, ¿quieres casarte conmigo?.

-Si si y un millón de veces sí -comencé a darle besos por toda la cara-.

Estaba eufórica, bueno más que eso. Estaba feliz, me quedaría con Cameron para siempre, lo amaba y esto era el principio de una bonita historia.

-Narrando Stephanie-

Estaba en la terraza sola, realmente no tenía ganas de fiesta. Comencé a recordar los buenos momentos que tuve con Justin, me acuerdo cuando mi mama nos puso a limpiar toda la casa y Justin y yo nos la pasamos haciendo el vago toda la tarde. Ese día fue muy divertido. Hemos pasado tantos momentos juntos, no soliamos discutir mucho y nos apoyabamos siempre.

Escuché a Austin entrar, me limpié las lágrimas y me giré sonriendo mirandole.

-Hola amor.

Notó que me mira sonriendo y me tapa los ojos con una venda blanca.

-Que misterioso eres -sonreí-.

Andamos durante un buen rato y yo estaba intrigada, este chico era una caja de sorpresas. Escuché que abría una puerta y subimos las escaleras con cuidado. Noto que nos paramos y me quita la venda.

Madre mía, esto era precioso. Estabamos en una casa que no conocía, había un camino de petalos hacia una cama blanca preciosa con un corazón. Me giré mirando sonriendo a Austin.

-¿Qué es esta casa?.

-Nuestro nuevo hogar.

Estaba feliz de tenerlo a mi lado, al final tanto sufrimiento había merecido la pena. Me agarró las manos y me miro a los ojos.

-Yo seré el primero solo si tu quieres...

-Quiero que seas el primero y el único durante el resto de mi vida.

Sonreí besandolo y nos acercamos a la cama. Fue la mejor noche de mi vida y no la cambiaría nunca, dije adiós a mi virginidad con el chico que amaba y de la mejor manera.

Sabía que no todo me había salido bien y que había perdido un pilar muy fuerte en mi vida pero en aquel momento sentía que nada podría conmigo, me sentía fuerte y con ganas de seguir adelante junto con mis amigos y sobretodo junto a Austin.