No fue mucho tiempo el que pasó para que se fuera, y mucho menos para que volviera a golpear la puerta con comida en la mano, pero lo suficiente como para que me bañara y cambiara mi pijama por un pantalón de algodón y un polerón ancho. Vida.
Pasamos la tarde tirados en el sillón comiendo y viendo Harry Potter por decisión mía. Es genial que alguien no critique mi extraña obsesión hacia la saga, aunque cada vez que lo miro él me está mirando a mi o comiendo, es algo incómodo, demasiado. Parece que no le gusta mucho.
-¿Quieres ver otra cosa?- miro de reojo hacia él para verlo, nuevamente, tirando un osito de goma a su boca.
-¿Ah?
-No pareces interesado.- me acomodo en el sillón y tiro mi pelo hacia un lado.
-No es cierto.- frunce el ceño, pero está mintiendo.
-No mientas, siempre que te miro haces otra cosa.- suelto una carcajada.
-¿Me has estado observando?- alza las cejas con diversión.- No te sonrojes.- suelta con voz chillona, como si esto siquiera fuese algo agradable.
-Callate.- frunzo el ceño, golpeando su mano antes de que logre apretar mi mejilla. Me mira mal y luego vuelve su vista al frente.
No puedo evitar disfrutar de su perfil, es bastante agradable visualmente. ¿Por qué está conmigo y no pasando el tiempo con su novia? Es obvio que debe tener una.
Él se terminará aburriendo de mi, es obvio, todos lo hacen.
Vuelvo a mirar a la televisión algo incomoda, de pronto él me hizo sentir así.
He estado bastante tiempo sola, no puedo acostumbrarme a tener a alguien revoloteando por mi entorno. Menos alguien como él.
Antes de que la película termine, él mira su teléfono y luego se levanta del sillón, diciendo que debe ir a hacer algo. Sólo pincha mi sien con su dedo y se va, dejándome en la misma posición que un par de semanas atrás: sola y teniendo un maratón de Harry Potter frente a mis ojos.
Algo dentro de mi molesta con que volverá pronto. Pero eso no sucede.
Incluso ya pasada otra semana mas, él no aparece.
Y en el fondo debí suponer bastante bien todo esto. Es obvio. No tiene razón para permanecer con alguien como yo. ¿Por qué?
Hay personas mucho mejores que. Él era demasiado sueño para mi.
Se había aburrido antes de lo esperado.
Quizás.
Lo merecía. Como todo lo malo que me sucedía.
-¿Por qué llamas?- pregunto hacia el teléfono.
-Sentí que debía hacerlo.
Mando un suspiro y me dejo caer de cara a la cama.
-Entonces.- tararea.- ¿Qué sucede?
-Nada fuera de lo normal. Todo siendo una mierda.
-Haz conocido a alguien.
Quiero darme un tiro porque ella me conoce demasiado bien.
-No.- doy vuelta en la cama, quedando de espaldas.
-Li...
-Demasiado efímero.- murmuro.- Él se aburrió de mi antes de darme cuenta.
-¿No te ha llamado?
-Quizás fui demasiado desagradable, siempre lo soy.- deduzco.
-¿Hace cuanto?
-Él se fue con su novia seguramente.
-¡Liah!
-No tiene mi número.- resoplo.
-¿Por qué eres tan idiota?
-Él casi me ha secuestrado, no voy a darle mi número a alguien así.
-No puedes quedarte tirada en la cama esperando a que llegue por ti.
-No quiero buscarlo, me hace sentir patética. A penas estuvimos una semana de conocernos, y realmente sólo fueron dos días y medio.
-¿Tuvieron sexo?
Que sutil.
-Ya quisieras.- rodo los ojos.
-¿Es lindo?
-No sé.- suelto apenas, sabiendo que mi piel a agarrado el rojo intenso casi natural. Me hundo en el colchón como si alguien pudiera notar lo nerviosa que me he puesto.
Suelta una carcajada y luego empieza a molestarme.
La llamada no dura mucho mas que eso.
Merecía que le cortara.
Miro el tatuaje en mi muñeca mientras pienso en lo apestoso que es todo.
¿Y si...?
Había hecho el ridículo muchas veces en mi vida, la mayoría frente a mis locos amoríos no correspondidos. Que vergüenza.
Tengo un terrible miedo de que eso vuelva a suceder, cago todo siempre. Y él me hace sentir eso inexplicable, lo cual me causa miedo y seguridad.
Quizás porque mi corazón se rompe con la misma facilidad de un papel.
Creo que arriesgarse es la mejor opción ante todo, siempre lo pienso, siempre lo aconsejo, pero no siempre lo llevo a cabo. Error.
¿Tendría que hacerlo ahora?
O simplemente podría hacer mi rutina normal y, casualmente, llegar a la tienda de CDs con la esperanza de encontrarlo ahi y no sonrojarme cuando se de cuenta que he ido por él.
*******
No sé que hago con mi vida.
No tengo escusa por no haber actualizado :/
Gracias por leer:)
Me dicen que tal va?
Los comentarios nunca están de mas hehe
Voten, comenten, compartan.
Bai.
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Cheeks || m.c
Fanfiction«Donde una chica se sonroja mucho y a él le encanta.» •Julio 2015; Diciembre 2015
