T & O es porque te odio || Percabeth

Capítulo 23: Pijamada en la mansión Di Angelo.

Capítulo 23: Pijamada en la mansión Di Angelo.

Dos días.

Dos días eran los faltantes para la tan esperada boda. Las vacaciones de invierno ya habían llegado, y las semanas se habían pasado volando. Como era de rápido que pasaban las cosas, o de así el modo en que Annabeth lo sentía.

Se encontraba haciendo su maleta, mañana era la boda y Hazel quería que las damas se quedarán la en la mansión de su padre. La mamá de la chica, Marie, le dio la idea, y el señor Di Angelo aceptó con gusto.

Pero no sólo eran las chicas las que se quedarían, sino que también los chicos; como ellos también participarían, Nico tuvo que invitarlos.

Hoy todos ellos pasarían la noche, y la próxima, en la mansión de los Di Angelo.

***

—Ser la primera en llegar no es lindo —comentó la rubia, incómoda cuando hubo llegado a la mansión del que sería el padre de Hazel.

—En realidad, Piper llegó antes, está arriba, así que no te preocupes. Además, ninguno de los chicos ha llegado, por suerte —dijo Hazel, lo último en un murmullo.

—Si, que bien —respondió Annabeth con sarcasmo y alzando los puños, fingiendo emoción.

—Ay relájate, ni que fuéramos a dormir en la misma habitación —comentó Hazel, mientras ambas chicas subían las escaleras, hacia la habitación de la castaña.

—Cierto, aunque ni lo digas —mencionó ella, preocupada.

Al llegar a la habitación se encuentran con una Piper acostada, al parecer perdida en sus pensamientos pues ni noto cuando ellas entraron.

—¡Hey, Piper! —saludó Annabeth, alegre de verla.

La morocha se sobresaltó e incorporó inmediatamente en cuanto la escuchó. Al percatarse que se trataba de Annabeth, soltó un suspiro.

—Oh, hola —saludó algo desanimada.

—¿Hola? —dijeron Hazel y Annabeth a la vez, extrañadas de su comportamiento.

—¿Qué tienes Piper? —pregunto preocupada Hazel sentándose junto a ella.

—¿Qué pasa para que estés así? —inquirió la rubia, preocupada, uniéndose a las chicas.

—Creo... Creo que yo no soy la única que gusta de Jason —comentó ella, viendo con tristeza a sus amigas. Ambas la miraron impactadas.

—¿¡Qué!? —gritaron ambas chicas, sus ojos se ancharon de la sorpresa.

—Lo sé —dijo Piper exasperante.

—¿Por qué lo dices? —preguntó Hazel, curiosa.

—Pues ya casi no me habla por mensajes, ahora habla más con... Reyna —agregó, haciendo una mueca al tener que mencionar el nombre de la azabache.

—¿¡Qué!? —volvieron a gritar sus amigas, patidifusas.

—¿Qué no ella y Nico tenían una "conexión"? —preguntó Annabeth, pues, segura estaba, de que así eran las cosas.

—¡Si! Yo también creía eso, pero al parecer comenzaron a conocerse mejor en el baile de Halloween, y desde ahí comenzaron a hablar más y más. ¿A caso no han notado que se la pasa ella en el celular o que casi no está con Nico y que ahora yo estoy mucho más cerca con ustedes y los demás menos con él? —puntualizó ella.

—Algo —contestó Annabeth, dándole la razón. Hazel asintió de acuerdo con ella.

—¿Lo ven? Creo que debo olvidar a Jason —finalizó con tristeza.