La espera..

97 4 7
                                    

Estuve sentada durante tantas horas que ya no sentía mi trasero, esperaba que todo saliera bien y que él se recuperara pronto.

Me fui a comprar un café para poder distraerme y estirar mis piernas, sinceramente me encanta este hospital, te dan una muy buena atención y aunque algunas enfermeras son unas hijas de puta los doctores tienen una habilidad para reconfortar a los pacientes  aparte de administrar  y proporcionar un  buen tratamiento.

Espero que puedan ayudarlo, él no merece tanto castigo y a tal edad... Él como todos ha cometidos errores pero es una buena persona...Aunque voy viendo que en la sociedad dónde vivimos las buenas personas son las  que más sufren.

Qué triste ¿O no?

Mientras reflexionaba y tomaba mi café salió de su habitación el doctor Lujan, era un hombre mayor, de unos 50 años, parecía estar siempre con preocupación, parecía que siempre intentaba de tratarte con dulzura como si te fueras a quebrar.

-Doctor.... Doctor- Le llamé algo desesperada de que haya pasado por mi lado y simplemente me haya ignorado.

-Doctor- Volví a llamarle y él se dio la vuelta.

-Ay, nena, ¿Qué pasa?- Me dijo acomodándose los lentes.

-Yo... Quiero saber cómo está él ¿Está mejorando?

-Angela, no puedo decirte si está o no mejorando, solo te diré que al sacarle el tratamiento le ha costado tanto respirar que debimos traerle el respirador artificial, él estaba mejor con el tratamiento.... - Dijo el hombre bajando la cabeza y luego levantando la vista y  detrás de esos lentes parecían sus ojos parecían más grandes, más amplios y daba la sensación de que en esos ojos verdosos cargará toda la sabiduría de este hospital.

-Lo sé, he tratado de convencer a mi padre de que volviera a pagarle el tratamiento o quizás pueda pagarlo yo, sí, ¿Puedo hacer eso no?

-Nena, estuviste  acá desde la tarde que lo trajeron de urgencia, sabes que está en lo último, deja que se vaya, no podes detenerlo, no por siempre.

Yo solo me quedé callada y pensé en por qué mierda no podía tener un padre con más humanidad, un hombre que tuviera compasión no dejaría a su padre morir ¿O sí?

*-*-*-*

Han pasado dos semanas y yo no he parado de rezar porque mi abuelo se encuentre en mejores condiciones aunque el Dr. Lujan me ha dicho que es posible que hoy sea su última noche con nosotros.

Mi padre se ha enfadado tanto de que yo desobedezca y siga yendo a verlo pero es que ese pobre hombre, nunca ha recibido el amor de todos sus nietos, ese hombre nunca ha podido pasar tiempo con nosotros... No como es debido.

Pero aunque sea tarde estoy tratando de compensarle porque él siempre estuvo, siempre fue una persona comprensiva, siempre me apoyo... Él fue, es y será un gran abuelo, uno al cual muy pocos de mis primos apreciaron pero yo siempre lo tuve presente.

Cuando entré a su habitación pude verlo acostado en su camilla, estaba pálido, las finas líneas violáceas que se traslucían debajo de su piel me daban una impresión pero yo quería abrazarlo y sin importar como estaba lo hice.

Las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas y cuando traté de decirle que lo amaba el nudo en la garganta no me permitía hablar, no me dejaba decirle algo que debí haberle dicho hace tanto tiempo, pero eso siempre ocurre ¿O no?

Siempre sucede que dices "te amo" demasiado tarde ya que esa persona no puede o ya no quiere compartir ese sentimiento contigo.

*-*-*-*

Esa noche perdí a un ser querido...
Esa misma noche perdí a mi abuelo.

Esa noche preferí quedarme en el hospital y dormir ahí en el sofá tomándole la mano, a veces me despertaba porque su cuerpo comenzaba a temblar y tenía una tos tan seca y desgarradora, creí que esos eran buenos signos de vida pero él estaba agonizando, cuando me voltee para llamar a la enfermera escuché un gemido, un gemido de dolor, y al voltear para verlo sus sábanas estaban manchadas de sangre...

Me lancé a sus brazos pero él ya no estaba ahí, él había sufrido tanto y ahora había acabado todo su sufrimiento, mis lagrimas cayeron sobre su arrugado y pálido rostro.

Y sé que jamás lo olvidaré, y ese rostro, ese momento quedará en mi memoria por siempre.







El pasado...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora