El pasado...

¿Amigos?

Ser amable con los demás no es característico en mí, suelo ser MUY grosera, suelo ser directa y sin vueltas pero a veces, con Marta, la ama de casa, me gustaba hacer bromas, charlar sobre mis compañeras de la escuela y contarle cosas que debería contarle a mis amigos... Si los tuviera.

Es lamentable que con 17 años siga sin un amigo verdadero, amigos falsos son lo que sobran en un mundo lleno de trampas e hipocresías.

Sé que si no tengo amigos no es solo culpa de los demás, digo, tendría que intentar adaptarme a ellos, tratar de... No sé, acercarme, tratar de ser amigable ¿O no?

Pero es que me cuesta mucho, no porque sea una maldita asocial que se muestra distante a todos los estúpidos de sus compañeros. No, claro que no, lo que sucede es un poco más estresante y más que nada porque vienen con vergonzosos rumores de la primaria.

Creo que el primer rumor que se les ocurrió inventar al grupito de retardadas ,el cual dirigía mi prima, era que yo, siendo una niña de 10 años miraba porno todas las noches antes de irme a dormir y que por ello observaba las entre piernas de los chicos del salón.

Esa "broma" fue algo que me hizo quedar como la pervertida del salón... Si lo pensamos era solo del salón... Pero claro, era un maldito salón constituido por niños idiotas que solo le iban a creer a las lindas y estúpidas que solo lograban divertirse y llamar la atención a base de bromas de mal gusto sobre los menos afortunados, dónde casualmente me incluía a mí.

El rumor llegó a saberse en toda la escuela y yo realmente no sabía qué hacer o cómo defenderme.

Y para serles sincera no sabía si quiera lo que era el porno, solo sabía que era malo por la manera en que los demás me miraban.

No sabía en dónde quedaba la entre pierna de los chicos, es decir tenía 10 años y lo único que hacía al llegar a casa era ver los dibujos animados, leer algún cuento que solía pedir en la biblioteca y terminar mis tareas. Pero eso no me iba a librar de nada, yo era la pervertida que hacía eso y todos le iban a creer a Camila, no a la inadaptada de Angela.

Paso un tiempo y aunque las maestras llamaron a mamá y ella tuvo que revisar la computadora de casa, la cual cuando ella presiono "P" en el historial solo aparecieron imágenes de perritos tiernos, cosa que admito que buscaba para poner de fondo de pantalla pero nada más entonces mi madre comenzó a reír y se dio cuenta que solo era una broma, de mal gusto pero al fin y al cabo una broma.

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Actualmente mis mejores amigos son escritores, el que encabeza la lista es Paulo Cohelo, luego está John Green, luego Cayla Kluver, Jamie Macguire,Liliana Bodoc, Oscar Wilde y Alberto Ferreras; ellos son los que acompañan mis tardes, mis mañanas, mis noches, mis días y a veces son ellos los que me provocan esos pensamientos alocados donde soy yo la que debe empujar la verdad.

Pero a la mierda la verdad, nadie desea escuchar la verdad, todos en el fondo aman las mentiras porque te hacen creer que sigues siéndoles importantes cuando en realidad no lo eres... Y nunca más lo serás.

Aquella tarde que terminé hamacándome con ese chico completamente desconocido, entendí que no se trata de conocer o no a la persona, solo se trata de como mostrarte frente a las personas.

Mierda, escribí todo esto solo para comentarte qué... El chico, ese de las hamacas, el del perro enorme que me aplasto, ¿Lo captas? Bueno ese chico me envió la solicitud en facebook.

Por un momento mientras veía sus fotos decía "a este lo conozco" pero en realidad no lo conozco, solo lo he visto una puta tarde de un martes y quién sabe si nos volveríamos a ver, decidí dejarlo ahí, no lo acepte pero tampoco eliminé su solicitud, era como que primero debía pensar en si quiero o no tenerlo como un amigo, o mejor dicho, si quiero volver hablar con él.