No Todo Es Lo Que Parece {Harry Styles} TERMINADA

Capitulo 11

Pasó una semana, consideraba a Nath como una amiga, pero me molestaba que Harry le dirija la palabra, ya que no solo pasaba tiempo conmigo si no, que también con Harry y él seguía con sus típicas burlas por supuesto.
Ella me aseguraba que él era una buena persona, pero yo lo negaba rotundamente.
Los rumores corrían, y decían que ella ya se había acostado con él y otras cosas, pero yo odiaba los rumores, así que no me preocupaba.
Raramente a Zayn no le caía bien Nath y en cualquier oportunidad que tenían peleaban, la verdad algo molesto e incómodo. En cambio a Liam sí le había caído bien.
No sucedía nada fuera de lo común, llegar con Liam y Zayn, encontrarnos con Nath, las burlas de Harry y tareas, pruebas, etc.
La verdad nada interesante y así pasó otra semana.
Un martes iba por los pasillos a mi próxima clase, sin mis amigos, cuando veo pasar a Nath y Harry tomados de la mano, escabulléndose por los pasillos. Que extraño e inoportuno.
Se me ocurrió seguirlos, ya que la duda despertó en mi y la siguiente clase no era tan importante además de ser muy aburrida. Vale aclarar que nunca me saltee de clases.
Los seguí y los seguí, Nath tenía muchas cosas que contarme... o tal vez, no.
Llegaron hasta el campus, donde los futbolistas americanos practicaban y se escabulleron por donde están los vestidores, en el de mujeres. A esta hora no debía haber nadie, los seguí y entre, colocándome atrás de unos lockers. Me detuve a pensar, era fácil saber para que estaban allí, y bueno, soy tan curiosa y masoquista que tenía que confirmar lo que temía con mis propios ojos, probar si los rumores eran verdad.
Cerré los ojos con fuerza y miré, diferente a lo que imaginaba, estaban hablando. La desconfianza picaba.
Decidí acercarme para escuchar lo que decían, poniéndome en la fila de lockers delanteros.
-¿Está funcionando?-Preguntó Harry
-Por supuesto, ¿quién no le cree a la encantadora Nathalie?- Dijo ella, de un modo que desconocía totalmente, había sonado a
tan soberbia.
-¿Segura? Mira que no quiero estar perdiendo tiempo en algo que no funciona-Amenazó él.
-¡Tranquilo! Ella ya confía en mi, lo único que me preocupa es su amigo, ¿cómo es qué se llama? Zayn. Él si no me quiere ni ver, supongo que desconfía y me mira con desagrado, ni que fuera fea como Ema-Gritó histérica y se echó a reír y yo no podía asimilar lo que decía, estaba sorprendida, ella no era así, era una persona dulce y amable, no arrogante y engreída tal como lo estaba demostrando.
-Bueno, sigue el plan en pie, hazte su amiga y descubre los secretos y debilidades. Tengo que dejarla humillada completamente, hasta el punto de que ni ella misma se quiera ver- sonrió coquetamente.
-Eres muy malo Harold-seguido de una risa- la tonta ni se imagina lo que le espera, ahora quiero mi recompensa-Poniendo voz de seductora "profesional". Ahora su apariencia concordaba.
Para dar paso a una serie de besos desesperados, y bueno, lo que seguía ya se lo imaginan, destruyéndome completamente. Como siempre.
Rompí en llanto silenciosamente, me sentía totalmente destrozada, traicionada, una verdadera basura. Salí de allí corriendo como pude y me fui a mi casa. No podía seguir así, le mande un mensaje rápido a Liam con dos simples palabras: "Te necesito".
Él sabía perfectamente en donde encontrarme cuando lo necesitaba, en mi habitación acostada como un ovillo, donde me encontraba ahora. La amiga en la que había creído era una completa zorra. Que hipócrita la vida.

No dejaba ni podía dejar de llorar, cada vez que me volvían las imágenes y palabras que había escuchado, salía un sollozo.

Ahora podía gritar y descargarme, estaba sola en mi casa y usaba la almohada para gritar en ella, mi madre estaba trabajando y todavía era bastante temprano para que llegara. Escuché la puerta abrirse y unos pasos apresurados que se dirigían a mi habitación: Liam había llegado y yo estaba decidida a contarle todo desde el principio, pero claro, luego de calmarme.

Entro apresurado hacía mi cama, directamente a abrazarme muy fuerte, justo lo que necesitaba, un abrazo reconfortante de mi mejor amigo.

Solté en sollozos, en su pecho, mientras lo agarraba de la camisa y él acariciaba mi pelo.
Me encantaba la forma paciente de ser de Liam, otra persona entraría directamente preguntando y exigiendo que cuente lo que me había pasado, en cambio él solo me daba su apoyo, por que me conocía y sabía que le contaría todo en cuanto termine de llorar.
Ugh, confiaba demasiado en las personas, que ilusa.
-Ya vengo Ema, te traeré algo de comer- Me dijo mientras dejaba un beso en mi frente, y yo le asentía lentamente. Me volví a acostar y seguía llorando, pronto me quedaría seca como un desierto, me calmé un poco y me quedé mirando el techo, tenía la mente en blanco y mejor mantenerla así.

A los 20 minutos llegó Liam con una sopa caliente y encendió la tele buscando algo cómico para "tratar de levantarme el ánimo" cosa que yo sabía perfectamente que era imposible en el estado que me encontraba.

Mi celular sonó, era mi madre, aclaré mi voz para que no sonara tan mal y atendí.
-Ema, cariño, hoy no llegaré a casa porque tengo que ir hasta la ciudad de las afueras de Londres y pasaré la noche allí- me dijo.
-Está bien ma, Liam se quedará conmigo- lo miré y asintió.
-Hija, ¿estas bien? Suenas algo extraña..- Yo quedé callada un momento.
-Sí, solo con un poco de frío, nada más-.
-Bueno, nos vemos mañana, te amo.-
-Adiós, yo también.-Le dije y corté.

Liam se recostó en mi cama y yo me recosté en su pecho, comenzando a comer la sopa y mirar tele.
Ya tranquila, le conté lo que había escuchado mientras algunas lágrimas salían, el solo acariciaba mi pelo.
Pero lo que más lo sorprendería, no era lo que había escuchado hasta ahora.
-Liam, lo peor de todo, no es lo que te conté. Nunca lo mencioné a nadie, solo yo lo se y vos vas a ser el primero en saberlo...
-Está bien Ema-dijo mientras seguía con sus caricias.
-Bueno, yo..... no se como pasó pe.. pero meenamoredeharry.- Lo dije muy rápido pero Liam entendió perfectamente.

Se paró, pasándose la mano sobre su poco pelo estrepitosamente, mientras comenzaba a dar vueltas a la habitación.
-Liam, ¡dime algo por favor! o tranquilízate al menos-Le supliqué, mis sollozos habían vuelto y Liam seguía sin responderme.
-Lo suponía, ¡LO SUPONÍA! ¿Ema como lo permitiste?-Me gritó, y yo me sobresalte cada vez rompía más fuerte en llanto.
-Oh, lo siento Ema, a veces no me controlo y no entiendo todavía como te puede llegar a gustar un tipo de persona así...- Vino y me abrazó nuevamente, lo más fuerte que pudo mientras besaba mi mejilla mojada.
-Ven, acostémonos, mañana faltaremos al instituto.

Me acomodé al lado de él, me rodeo su brazo en mi cintura y reposé mi cabeza sobre su pecho así hasta quedar dormida, triste y desanimada como muchas veces.