No Todo Es Lo Que Parece {Harry Styles} TERMINADA

Capitulo 25

Hoy era el día temible, en el que iba a salir con Alba en busca de ropa y más cosas.
Me pasó a buscar a eso de las ocho de la mañana, muy temprano para mí. Pasaríamos todo el día de compras, dedicadas cuidadosa y especialmente para mí y mi cambio, que de hecho, me daba miedo.
-Ema, la señorita Alba espera en la puerta-me avisó Alfred.
-Gracias- le dije, pase a saludar a Liam y bajé.
-Holaaaa!- me dijo emocionada- vamos, hoy manejo yo- dijo, luego de un abrazo y la seguí hasta un auto deportivo muy bien cuidado.
Mientras íbamos en el camino, me iba diciendo sus planificación para el día de hoy, y en ella se encontraban mínimo cuarenta tiendas, zapaterías, peluquerías, joyerías y más. Aclaro que ella no va a pagar por mí, mi padre me insistió en que aceptara dinero para comprar lo que quisiera, y luego de varios intentos, acepté, por eso aquí estamos, camino al centro comercial.
-Y, ¿qué te pareció Lou?- me preguntó, sorprendiéndome.
-Si te refieres a Louis, prefiero no recordarlo- le contesté, algo triste.
-Oh, ya hablaré con él, ¿te trató mal, o te dijo alguna grosería?- me dijo algo preocupada.
-No, no, nada de eso- dije mirando hacía la ventanilla.
-¿Sabes?, no se que te habrá dicho. Lo que te puedo decir es que él es un muy buen amigo, no nos conocemos desde pequeños, pero no es necesario. De hecho es mi mejor amigo.- me dijo, sonriendo con nostalgia. ¿Alba y Louis, amigos?, nunca lo habría imaginado, él es tan... antipático y ella tan simpática.
-También tiene novia, es muy simpática, su nombre es Kim-
-Oh- fue lo único que dije, demostrando el mínimo interés, sin faltar el respeto, por supuesto, ¿también tenía novia?, entonces, ¿porqué le había caído tan mal?

Llegamos al cabo de una media hora, mis nervios ya se hacían notar. Nunca me había gustado ir de compras.
-Bueno, comenzaremos por la tienda de allí- me dijo señalándola, se veía moderna y lujosa.
Era prácticamente pasadas las doce del medio día, y nos habíamos comprado todo, por cada tienda que pasábamos, literalmente. Cada vez que me veía al espejo, me sentía diferente, sigo insistiendo, no me gustaba. No había más que ropa cara y ajustada, solo vi una tienda de mí gusto, pero no entramos en ella, ya que a mi querida Mimi, no le gustaba.
Así pasamos toda la tarde, y por último, fuimos a una peluquería, "reconocida" según Alba, pero no me interesaba en lo más mínimo si era popular o no, lo único que quería era ¡volver a mi casa!
En ella, me cortaron las puntas, y aplicaron un producto para mejorar mi cabello, no hicieron más, porque no se los permití.
Ya era la hora de volver a casa, por suerte. No dábamos más, nuestras manos cargadas completamente de bolsas con ropa, zapatos, maquillaje y demás.
-¿La pasaste bien?- me dijo Alba, de regreso a casa.
-Sí, aunque tengo hambre- le dije riendo.
Llegamos, dejé las bolsas en el dormitorio y volví abajo para comer, ¡moría de hambre, sinceramente!
-Hola, ¿como estuvo tu día?- me preguntó Liam, que se encontraba en la cocina.
-Tú sabes mi respuesta- le dije rodando mis ojos y tomando algo para comer.
-Luego de que comas, quiero ver lo que te compraste, debo supervisar, como deber de mejor amigo- me dijo y ambos reímos.
Tal como dijo Liam, luego de comer, subimos a mi habitación y le mostré las cosas.
-Me imagino, que ese vestido tan corto no te lo pondrás- me dijo con tono celoso.
-¡Por supuesto que no!, tú me conoces Liam, lo compré casi obligada por Mimi-
-Por cierto, ¿cómo vas con tu plan?- me preguntó.
-Bueno, sinceramente, me había olvidado de él, pero de eso no te preocupes, le pediré ayuda a Alba- le dije guiñando.
Luego del largo día, me acosté y caí en un profundo sueño.