Capitulo 11 (Parte I)

869 58 3
                                    

Esto era el paraíso, el completo paraíso. ¿Cómo podía besar tan bien?

Me siento mareada, y no me importa. No esperen, ahora si estoy muy mareada.

- ¿Risitas?-Se separó un poco de mi, y aseguró mi rostro entre sus manos.

- Estoy bien, sólo necesito aire-Ambos nos sentamos en el frío suelo.

- ¿Quien lo diría?-Lo miré con confusión-Todas se desmayan con mis besos.

Y acaba de cagar el momento, en grande.

- ¿Quien lo diría?-Dijo irónica-Eres un caga momentos.

Antes de decir otra cosa, volví a sentir un fuerte mareo. Dylan se levantó, y me observó detenidamente.

- ¿Te encuentras bien risitas?-Extendió su mano hacia mi, y me levantó.

- Si, estoy bien.

En realidad no, estaba comenzando a sentirme completamente mal.

-¿Risitas?-Todo daba vueltas-¡Te sangra la nariz!-Dylan se acercó, levantando mi rostro-Tenemos qué ir al hospital.

- ¡No!-Grité, jalé su hombro hacia mi-No iremos a ningún hospital.

- Risitas, llevas día sintiendote mal, primero en la fiesta de los Cullens, ahora esto-Comenzó a limpiar la sangre con su dedo-Te pasa algo, y yo...

- ¿Tú qué?-Inquirí con una ceja levantada.

- No sé qué sería de mi, sin ti.

-¿Ahora eres romántico?-Solté una risita.

- Vamos a ir al hospital-Me retó.

- Ya te dije, qué no.

No sé cuantos minutos, duramos mirándonos mutuamente, sólo sé qué yo gané.

-Cómo sea, pero no habrá una próxima vez-Dijo enojado-Comienzas a sentirte mal otra vez, y te juro qué te llevaré al hospital aunque sea amarrada al capo.

- ¡Si mi capitán!-Le hice un saludo militar y le sonreí, se resistió pero terminó por devolverme la sonrisa-Espero qué nuestra no cita, no terminé así.

- Acabas de llamarlo cita.

-Dije NO cita.

-Da igual, dijiste cita-Tomó mi mano, y me arrastró hasta la salida del establecimiento-Esto apenas empieza risitas.

POV Bella:

En estos momentos sería bueno tener a Nessie, sus consejos de moda me hacían falta. No tenía ni idea de que usar.

Mi celular comenzó a vibrar en la mesa de noche de mi habitación, rezando por qué fuera Nessie corrí hacia el.

- ¿Hola?

- Hey, soy Alice, llamo para ver si estás lista-Maldición-Déjame adivinar, no sabes que ponerte y Nessie no está.

-¿Acaso eres bruja?-Inquirí sonriendo.

- No, estoy afuera de tu casa y te veo por la ventana aún en pijama-Miré por la ventana y una divertida Alice me saludó.

- De acuerdo, tienes un punto-Suspiré derrotada-¿Puedes ayudarme?

- ¡Esperé toda mi vida para este momento!-Entró en la parte trasera de su auto, saliendo con un bolso gigante.

Con amigas así, nunca te aburrirás.

Bajé para abrirle a Alice, entró cual diva, tomó mi mano y subimos las escaleras corriendo. Al llegar al cuarto, me observó con su mirada maliciosa.

Esposa por convenienciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora