Capítulo 27
¡Entonces yo os desafío, estrellas! June.
Para el martes, se había corrido el rumor que había estado en una situación muy emocionante. No sé cómo la gente se enteró, pero lo hicieron, y me pasé la mayor parte de la mañana del martes explicándole a la gente de que sí, que era aterrador, y no, nadie murió, y que sí, que Blake estaba totalmente engañando a Mariah, y que no, no podía ir por café a darle los gloriosos detalles porque estaba castigada y casi me iban a encerrar en una torre por el resto de mi vida adolescente.
—Dos meses —había dicho mi mamá—. Nada de teléfono, ni computadora al menos que sea para la escuela, nada de correos, nada de chat, nada de iPod, nada de comprar —mi mamá pensó por un minuto—. ¿Qué más? ¿Quité toda la tecnología? ¡Oh, espera! Tampoco mensajes de texto. Creo que es todo.
Los padres podían ser tan tiernos a veces.
Otra cosa era nueva: Realmente podía escuchar a April y May ahora, incluso a través de los pasillos o los salones de clase. Era como si estuviéramos sincronizadas en la misma frecuencia, y podía prenderlo y apagarlo cuando quisiera. (Se supone que no debo, y es como, totalmente fuera de toda ética. Pero quería seguir metiéndome en sus pensamientos todo el martes. Supongo que solo quería asegurarme que ellas estaban allí.) Podía escuchar a todo el mundo también, por supuesto, pero podía bajar el volumen hasta que solo fuese un silencioso sonido. Y entonces era agradable. Me di cuenta que controlar mi poder era en cierta medida fácil, solo tenía que enfocarme en mis propios pensamientos, y todo el mundo se bajaba de decibeles, como una música de fondo cuando están en el dentista.
Avery no regreso a la escuela ese día tampoco. Circulaban rumores acerca de donde estaba, y se volvió ridículo en todo el cuarto período, cuando alguien lanzó la idea de que había sido secuestrada por extraterrestres. Quiero decir, no inventes. ¿Muy original? Tampoco volvió el miércoles, y para el viernes, estaba segura que había abandonado permanentemente la escuela o había sido enviada a un internado. Traté un par de veces encontrar sus pensamientos, pero ella se había ido para siempre. No podía escuchar nada.
Hablé con mis hermanas acerca de ello una noche. Hablábamos mucho más, mayormente porque estaba encerrada y no tenia con quien más hablar.
Todavía éramos unas frikis, no puedo mentir, pero era agradable. May incluso me dejó pintar sus uñas, y cuando se las arregló para elegir el peor de los colores (un negro metálico llamado "Telaraña", iuu) no dije nada. Es bueno que ella no sea una lectora de mentes.
—Entonces —le dije a April una noche cuando May estaba tendida en su cama leyendo "El Hombre Invisible" y April estaba inclinada sobre un proyecto de matemática en su escritorio—. ¿Sabes que es extraño?
—¿Las dos semanas pasadas? —ofreció ella.
—No —dije—. Bueno, si, eso. Ha sido loco. Pero ahora estaba pensando acerca de ayer, ¿Cuándo mamá estaba llevándome al ortodontista? ¿Qué si May nunca hubiese casi-atropellado a Avery con su carro?
May bajó su libro lo suficiente para mirarme.
—¿No acordamos que nadie se burlaría nunca más de mis destrezas para conducir?
—No me estoy burlando —le dije—. ¿Pero qué pasa si nunca la hubiésemos visto? ¿Crees que hubiésemos sido todo un desastre?
April se rio.
—Probablemente.
—Pero no lo sabemos —dije—. ¿Qué pasa si no la hubiésemos visto y todo hubiese sido normal? Ni siquiera puedo recordar como lucia.
—Esa es tu mente siendo gentil —dijo May sin bajar el libro esta vez—. Ella era un bestia psicópata. Déjalo ir.
—Creo que ya lo hice —murmuré, pero nadie me escuchó.
En el momento en que llegué a clase de Inglés el siguiente martes por la tarde, estaba devastada. También estaba algo triste porque Mariah no estaba allí, ya que había sido mi amiga. Y ahora me sentía como una isla solitaria sentada sola en el medio del salón de clases. April había jurado que Mariah estaría de vuelta la próxima semana, pero eso no era de mucho consuelo un martes.
—Muy bien cuerpos —dijo la Sra. Ames. (Ella siempre nos llama "cuerpos", lo cual pienso que es extraño y probablemente demuestra que tiene problemas y necesita trabajar en ellos en terapia.) ¿Todos tienen su copia de Romeo y Julieta asumo?. —Ella ondeó su copia del libro—. ¿Y todos han hecho sus tareas de lectura?
Lo había hecho en realidad. Ahora que estaba prácticamente encerrada en mi cuarto excepto para ir a la escuela, tenia un montón de tiempo para ir a la escuela. Un montón. Romey y Julieta es genial, pero ayuda que haya visto la película, la genial donde Mercucio tiene un vestido de travesti. En realidad, creo que Julieta debió salir con él porque Romeo era un absoluto idiota por no comprobar si ella estaba muerta antes de matarse. Mi novio ideal al menos trataría de buscar el pulso. (¡Pon un espejo debajo de su nariz! —había gritado en esa parte del libro.)
Estaba sacando mi cuaderno de espiral con la cubierta brillante color púrpura (no se pongan celosas) cuando Caitlin, la chica sentada a mi lado, susurró a través del pasillo.
—¡Psst! —dijo—. ¡Hey! ¿Eres June, ¿verdad?
Alcé una ceja, esperando lucir como una de esas estrellas misteriosas del cine mudo en esas películas aburridas que mi papá solía ver en el cable.
—Si —dije—. Soy yo.
Ni siquiera tuve el chance de poder leer su mentes antes de que Caitlin continuara hablando.
—Bien —dijo ella—. ¿Mira, puedo preguntarte algo?
Estaba totalmente preparada para decirle donde compré mi libreta, o mis zapatos, o mi bolso, cuando ella agarró su copia de Romeo y Julieta y preguntó—: ¿Entendiste algo de esto?
Pasé por su mente rápidamente, sólo para asegurarse de que no estaba actuando como tonta a propósito. Pero no, ella estaba completamente confundida. Casi me confunde mirar sus pensamientos.
—Mmm, sí — dije—. Me gustó. Es bueno. Especialmente la parte donde Mercucio muere porque...
—¿El muere? —Caitlin hojeó el libro—. ¡Ni siquiera entendí la parte donde se muere!
Dudé por un segundo y luego dije—: Bueno, si quieres podemos ponernos juntas , estudiar, compartir o algo...
—¡June! —chilló la Sra. Ames desde el frente de la clase—. ¡Quizás quieras responder mi pregunta! —Cas-pitas.
—¿Mmm, podría repetirme la pregunta, por favor? —pregunté. La Sra. Ames suspiró pesadamente. —Dije, ¿Qué dijo Romeo cuando escuchó que Julieta había muerto?
¡June quiere estudiar conmigo! Los pensamientos de Caitlin eran tan felices que era como ser atacada por escarcha, pero eso no importaba porque mis pensamientos eran bastante entusiastas también. ¡Ella pensaba que yo era lista! ¡Ella quería estudiar! ¡Conmigo! April se iba a morir completamente cuando le dijera acerca de esto, y me pregunté si ya lo había visto venir. —¿June? —pidió la Sra. Ames—. Estamos esperando. ¿Qué dijo Romeo? Sonreí a mi misma y me senté derecha en mi silla. —El dijo ""Entonces yo os desafío, estrellas!" ¡Ya lo creo!
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Los extraordinarios secretos de april, may & june
Teen FictionApril tiene premoniciones. May puede hacerse invisible. June lee los pensamientos. Son tres hermanas que han de ajustarse tanto a sus recién adquiridos poderes como a su vida en el instituto. Por si eso fuera poco, April tiene una premonición: ve a...