comida

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día 11

-Clara- la llame. Ella me miro-no has sabido si la presidenta ha pagado? -pregunté con esperanza. Ella me miro como "estas estúpida o qué?"

-acaso tengo cara de saber que pasa afuera de este Salón? -me dijo. Vale.

Todos se habían puesto más neutros e idiotas este último tiempo. ¿Acaso se creían que vi vida se iba a acabar por no estar dos semanas con su mami?. Es sólo un secuestro. Sólo llevamos menos de dos semanas y se creen que son las personas con menos suerte en el mundo.

El tal Connor entró rápidamente por la puerta y le susurró algo al tipo que nos cuidaba. Y el miro. Volvían a mirarme. ¡¿ Que necesidad de hacerlo?! Sabia que el tenia el placido conocimiento de que yo odiaba su jodida sonrisa.

Luego divise a uno de ellos entrando al aula, lo reconocí de inmediato. Jace.

Pero no fue hasta que note que el dirigía su mirada hacia mi que los nervios se me pusieron de punta. Jace se acercaba a mi a paso firme y confiado. Quería tener la obvia reacción de alejarme mas cuan el se acercaba a mi. Pero por alguna razón mi cuerpo no se movía.

Estaba sentada en una esquina al lado de Clara quien dormía plácidamente sobre mi hombro. Llegó caminando a mi frente y con voz gruesa y penetrante me ordenó.

-levántate- me dijo. lo mire y luego mire a Clara.

Me levante como pude y el comenzó a caminar hacia la entrada. Rápidamente lo seguí por detrás, sintiendo la mirada de toda la población estudiantil de mi curso.

¿Que querría el ahora? ¿Porque siento que siempre soy yo la que sale perjudicada en esto?

Salimos del aula y bajamos de piso e inmediatamente reconocí el aula en la que se detuvo. La dirección. Abrió la puerta y me miro.

-entra- ordenó y no negué. Dentro había dos tipos más. Tras pasar cerró la puerta. Me quede automáticamente estática, la piel se me puso de gallina. Estos tíos me daban miedo, y mucho. Pues, entiendan me. Estaba sola en una sala con tres de los tíos que están locos, tiene armas y estamos dentro de una escuela que fue cautiva por ellos.

Pero al margen de todo lo que estaba pasando por mi mente, Jace se dirigió hacia la puerta que abrió la última ves que estuve aquí y me miro.

-vamos tía. Entra- dijo ansioso pero serio. Rápidamente entre con las miradas de las otros dos hombres allí y Jace cerró la puerta tras de si. Luego se volteó y me do una de sus miradas tan sinicas y de soslayo.

-te tengo noticias- me dijo dirigiéndose tras un escritorio- tu presidenta se a negado a pagar lo que debe- dijo mirando unos papeles arriba de el escritorio.

-así que tendrás que hacer otro vídeo- me dijo sin mirarme y caminando atrás de la cámara. Y volvió a hablar-esta vez : hablaras un rato de ti, y luego comenzarán que la presidente debe al jefe de la mafia Jace Brown una suma bastante elevada se dinero y que si no me lo paga dentro de una semana más mataré a 20 niños aquí- mi cuerpo de congelo y creí haberme puesto pálida al escuchar sus palabras.

"jefe de mafia" repetía mi cabeza una y otra vez.

-diles que investigare a las familias con más poder social en esta escuela. Policías, abogados, políticos. Diles que mataré a sus hijos si la puta de la presidente se niega a darme lo que es mío.

Trague saliva y baje la mirada para no observarle a la cara.

Jace se puso totalmente atrás de la cámara para gravar. Yo mire a mi alrededor y vi la misma silla de antes. Me senté en esta y mire al suelo pensando que iba a ser mi discurso.

Stockholm syndromeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora