día 268
-¿que pasaría si al salir de aquí conozco otro tipo y me la piro de ti?-pregunto ella. Levante una ceja pero ni siquiera me vi imputado.
-no conocerás otro tío como yo, niña-dije en tono burlón.
-gracias al cielo-susurro.
-te he escuchado-me queje
-esa era la idea-le mire mal y ella en respuesta se rio de mi-ya enserio, ¿que pasaría?
-supongo que no aceptaria el hecho de que no estes conmigo-dije de mala gana.
-¿de veras lo harias?-levanto una ceja y revolee los ojos.
-¿que esperabas? Tuviste tu oportunidad de ser una de las demas chicas, pero entraste en mi mente y no te puedo sacar de ella. Estoy obsesionado contigo y todo lo que tenga que ver contigo. Pero ya no lo puedo controlar
-estas loco-me dijo sonriendo y frunciendo el ceño a la vez.
-si alguien te llegara a tocar-dije entre dientes.
-nadie lo hará salvo tu-me interrumpió para sacarme esa morbosa idea de la cabeza. ¿nadie lo haría? Lo dudaba. Yo no iba a estar para ella por siempre, eso era obvio.
-¿de veras quieres estar conmigo cuando no estés prácticamente obligada a hacerlo?-ella paro de reír y me miro.
-ahora no estoy siendo obligada a nada-se encogió de hombros-tu estarías solo, sin no-su inocencia era lo que me mataba. Frente a esa mirada ¿quien podría resistirse? Esa chica me sorprende.
-es verdad que últimamente acaricio la soledad-dije sin mirarle-eres como quien a domesticado al monstruo-suspire-nadie quiere vivir junto a un demonio, Carolina.
-quizá yo quiera descubrir que hay mas allá de ese demonio, Jace.
-¿y si no hay nada mas allá?-ella frunció el ceño.
-no lo creo. Tu no tienes idea de la realidad Jace, Hay mucho, mucho mas allá de tu monstruo Jace-me dijo con una mirada de ¿ternura? ¿compasión? ¿pe...na? A mi nadie me tendría que tener pena.
-si yo te necesito para no sentirme solo, ¿para que necesitas tu a alguien como yo?-ella me miro por unos segundos.
-a veces lo único que necesito es alguien de quien aferrarme, porque siento que el suelo se parte debajo de mis pies...-bajo la mirada-¿tu me dejaras caer, Jace?-esa pregunta me tomo desprevenido. Su inocente y embriagante voz corrió por todo mi cuerpo.
¿la dejaría caer? No podía ser su sostén para siempre, no porque no quisiera, sino porque cada vez que hago algo bine en la vida, lo termino arruinando.
Y Carolina ha sido lo mejor que he tenido hasta ahora, y continuamente siento que lo mandare al carajo mas fuertemente.
-por ahora... no te dejare caer-fruncí el ceño-pero sera mejor que tengas algo de que sostenerte cuando lo haga.
-¿por que tienes tan poca confianza en ti mismo, Jace?-frunció el ceño.
-no es confianza lo que me falta. Me falta esperanza en creer que hay algo mejor aguardando el próximo día. Últimamente no puedes esperar nada de nadie, hacia que prefiero que no esperes nada de mi. No soportaría el hecho de lastimarte no solo físicamente, sino también sentimentalmente-baje la mirada.
-pero...-comenzó a hablar buscando las palabras correctas-pero tu tienes una vida de lujos, tienes dinero, obtienes lo que quieras todos te respetan. ¿eso no es tener demasiado de la realidad, para ti?-levanto una ceja.
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Stockholm syndrome
Teen Fictiontras el vidrio ella sueña con regresar. mirarse en frente del espejo y saber, que la primera señal al abrir la puerta será ver la cara inerte de quienes ella ama. pero ella sabe que eso nunca pasará. todos miran sus juguetes abandonados en la si...