Cap 34

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Tapé mis oídos con mis manos, más fuerte de lo que era necesario, para no escuchar ningún otro sonido asqueroso y salí del departamento a trompicones, era lo mejor y lo único que podía hacer en ese momento, porque definitivamente no iba a entrar ahí para que dejaran de hacerlo y tampoco iba a tocar la puerta y decir: "hola, chicos, ¿cómo están? ya estoy aquí. Sólo quería avisarles, ahora me voy. Pueden seguir con su asunto. Disfruten."

Cerré la puerta principal y me senté recargada en ella, por lo menos ahí no me perdería ni se escuchaban los aullidos de la asquerosa esa. Y aunque no quería, las lágrimas salieron de mis ojos una tras otra sin poderlas controlar. Nunca creí que Harry fuera así. Claro, él no era un santo ni nada parecido, ya sabía eso, y por supuesto que también sabía que todos los hombres necesitan sexo y todas esas mierdas, pero ¿utilizarme a mí, sólo porque tenía ganas? Vamos, se supone que somos mejores amigos y que me quiere, no puede llegar y besarme de esa manera sólo porque se le antojó.

¿Y qué es eso de acostarse con Adaime en la cama donde dormimos juntos? Sé que es su casa y que puede hacer lo que quiera con quien quiera, pero hay que tener un poco de respeto. Esa cama quedaría prohibida para mí, jamás podría volver a dormir tranquila pensando en lo que paso ahí. Tenía ganas de golpear a Harry de lleno en las bolas, en serio, y me gustaría también ser un hombre para darle lo que se merece... Sé que jamás podría hacerle daño pero pensarlo en esos momentos me hacía sentir mejor. ¿En serio no se pudo aguantar las ganas? ¡Tendría todo el tiempo del mundo en unos meses!

Me limpié las lágrimas con las manos bruscamente y escondí mi cara entre mis rodillas, contando los segundos en mi cabeza.

...9, 10, 11, 12, oh, demonios ¿cuánto tiempo van a tardar en su asunto?

-¿Linda? -preguntó alguien. Levanté la cabeza y miré a Niall viéndome con preocupación-. ¿Te sientes mal otra vez? ¿Por qué lloras? ¿Qué pasó?

-No pasó nada. Es sólo que Harry está ahí adentro haciéndolo con Adaime.

-¿Haciéndolo? ¿Te refieres a... -asentí antes de que lo dijera. Me estaba comportando como una chiquilla berrinchuda-, ¡¿en serio?! Es un cabrón, el mayor de los estúpidos -se quejó realmente enojado paseándose en el pasillo de un lado a otro. Luego suspiró mientras se sentaba a mi lado-. ¿Qué pasó? ¿Él te dijo lo que estaba haciendo?

-No, ni siquiera tiene idea de que yo estoy aquí. Entré y escuché a la zorra gimiendo, y preferí salir para no escuchar nada más.

-Por Dios, Linda. Lo siento... La odio tanto -se quejó de repente. Yo lo miré confundida-. Nunca me había sentido así con una mujer, pero ella es una fácil y no quiero que se meta con mi mejor amigo. Se acuesta con Harry, con Brean y con Joel al mismo tiempo, lo peor de todo es que ellos lo saben y no les importa una mierda.

-¿Qué? -Parpadeé para procesar la información-, ¿En serio?

-Claro que sí, y Harry se va a contagiar de algo si sigue con ella.

-Es su vida -me encogí de hombros-, que haga lo que quiera.

-No, claro que no, ese estúpido no va a hacer lo que quiera si yo estoy aquí para salvarlo de nuevo -sacó su celular de su bolsillo y marcó el número de Harry.

-Está ocupado, ¿recuerdas? No te va a contestar.

-Siempre me contesta -aseguró-. Lo pondré en altavoz.

-¿Qué demonios quieres? -resonó la voz ronca de Harry por todo el pasillo.

-Necesito de dejes de coger con la puta de Adaime y vengas a abrirnos.

-¿Abrirles? ¿A ti y a quién?

-A mí y a Linda -hizo énfasis en mi nombre. Hubo un pequeño jadeo a través del celular.

-¿Linda? ¿Ella está ahí contigo? -Preguntó, ahora con voz preocupada-, ehm... Ella trae las llaves.

-Sí, ya entró y escuchó cosas desagradables. Por eso estamos afuera -contestó Niall, exactamente lo que yo estaba pensando en gritarle a Harry-. No queremos escuchar nada así otra vez, así que ven ya.

-Demonios... ¡Eres un estúpido! -le gritó Harry a Niall. Yo miré al celular enfadada. Como si tuviera derecho a llamarlo así.

-El estúpido eres tú y lo sabes -respondió Niall con el ceño fruncido.

-Ya voy -colgó.

Yo limpié mis ojos rápidamente para que no hubiera ni rastro de lágrimas que ellos pudieran ver, ya demasiada humillación sería ver a Adaime caminando hacia mí con una sonrisa triunfante. Niall puso una mano en mi mejilla, de una manera que no era muy romántica sino algo más fraternal, y secó mis ojos con más delicadeza que yo misma.

-No llores por tonterías. Ella es sólo una cualquiera -susurró. Yo sonreí y sentí como daba leves soplidos a mis ojos.

The perfect bucket list » Harry Styles (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora