¿Mi objetivo?

Capitulo 22. Regreso a casa.

- ¡Hermanita! ¡Oh Dios mio! No puedo creer que estes aquí. Dan se pondrá tan feliz de verte.

- Amy no puedo respirar..

- Oh, lo siento. ¡Es que sigo sin creerlo! Me alegra tanto tenerte aqui de vuelta. ¿Te quedarás?

- Si, solo por dos o tres días. Evan se volveria loco si duro mas de ese tiempo.

- Aww, son tan lindos. ¿Donde está? ¿No lo trajiste?

- No, se tuvo que quedar por el trabajo.

- Ah... bueno, ¿Y como va todo? No me dijiste nada mas desde la ultima vez que hablamos por teléfono.

- Lo se y fue porque tenia pensado venir y podíamos hablar en persona. Todo va de maravilla, empezamos de cero.

- Ya lo creo. Creo mentiras. Cero desconfianza. Cero peleas.

Río.

- Creo que ya entendiste.

- Perfectamente - Sonríe - Me alegra tanto tenerte aquí. Es una muy linda sorpresa - Dice abranzandome o mejor dicho, asfixiandome nuevamente.

- ¡Hey! Ya para, necesito vivir para poder ver a mi sobrino y mis padres.

- Tienes razón. Y para hacer cositas con Evan...

- ¡Amy! - Replicó alejándola un poco ya me esta pellizcando por todos lados.

- ¿Que? Es la verdad.

- Si pero no quiero que entres en detalle, te conozco muy bien.

Ambas reímos muy fuerte.

- Tienes razón. Pero sabes que es verdad.

- ¡Si! Ya ¿Contenta?

- ¡Siii!

Continúa pellizcandome por todos lados y asi comienza una pelea típica entre nosotras.

Caemos rendidas sobre el sofá. No podemos parar de reír ninguna de las dos.

- Estoy totalmente cansada.

- ¿En serio? Si solo peleamos como lo hemos hecho toda la vida.

- Lo se. Pero ahora mismo es diferente. Mi condición hace que me canse muy rapido últimamente.

- ¿Tu condición?

- Si, me alegra tanto que estemos juntas ya que te lo podré decir en persona y no me telefono o video llamada. Ah mama y papa se los pensaba decir esta noche igual.

- ¿¡Que!? Dios, ya habla...

- Estoy embarazada.

Nunca habia soltado un grito tan alto como este. Bueno si, quizás cuando me enteré que Dan venía en camino. Y ahora me entero de que voy a ser tía nuevamente.
La felicidad que me invade es tan grande que siento que voy a explotar.

- Hermana, felicidades - Digo abrazandola - Gracias por mi bello sobrino y por el que viene en camino. Me hace tan feliz esta noticia.

- Pues ni te imaginas como estoy yo.

- ¿El lo sabe?

- Claro, fuimos juntos a hacerme el examen.

- No lo puedo creer. Y.. ¿Ya le dijiste a tu hijo que tendrá un hermanito?

- No, total no creo que lo entienda.

- Quizás si.

- Bueno, se lo diremos esta noche junto a papa y mama.

- Esos dos si que van a estar contentos.

- Y mas cuando te vean. Será una doble sorpresa para ellos tres.

- Así es. Solo espero que no le de un infarto a ninguno de los dos por tanta alegría.

- ¿Como no les va a dar? Que su bebe este aqui y que su "niña mayor" va a tener otro bebe es suficiente para que les de un infarto.

- Bueno, ya, mejor vamos a rezar para que nada así suceda.

Reímos.

Tiene razón. Es lo menos que necesitamos. Nada podrá arruinar esta noche. Será perfecta. Cenaré con mi familia como hace tanto no lo hago y mi hermana junto a su esposo anunciarán que están esperando un bebe. No podría estar mas feliz.

Gracias a l@s que han llegado hasta aquí.
Solo paso para avisar que solo queda un capítulo mas.

Espero que les guste. Byeee.