The Six Bitches.

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P.O.V Mirelle.

Los besos cada vez van subiendo más su intensidad; mi blusa con estampado de caritas de aliens esta en algún lugar de mi habitación al igual que la camisa de Shawn. Su boca y la mía están mas unidas que nunca y la musica describe el momento perfectamente, bueno, tal vez no describe todo completamente pero si.  Poison de Rita Ora suena desde el estéreo de mi cuarto. Y pues lo que dice la canción es cierto: yo elijo mi veneno y es el. El chico que me quita el aliento con la mirada y las palabras con un beso es el. Solo el. El que se gano mi corazón desde el primer día en la secundaria, por mas cursi que suene.

Siento que la música va cada vez mas lento y los besos también, Shawn esta encima de mi y le estoy clavando mis uñas en su espalda. Comienza a besar mi cuello y yo bajo mi mano hasta sus pantalones para comenzar a desabrocharlos, pero un ruido me interrumpe.

Se escucha como alguien patea la puerta de entrada de mi casa para después empezar a decir un chingo de groserías.

-¿¡Que no me vas a pagar hijo de la verga!?.-Grita la voz masculina que hizo que Shawn y yo saltaramos de mi cana y comenzáramos a vestirnos.

Corremos por el pasillo de el segundo piso de mi casa para luego bajar las escaleras tomados de la mano.

Nos detenemos y me puedo imaginar lo que ve Shawn delante de mi. Bajo completamente y confirmo todas mis sospechas.

Y como lo sospeche, mi hermano Ethan esta tirado al final de el pasillo en el que se reciben las visitas con demasiada sangre en el torso y varios golpes en la cara. Un recuerdo pasa por mi mente y se va al instante, pero la imagen squedada ahí, grabada en mi subconsciente torturándome lentamente. En la imagen se ven las caras de los hombres que matamos cuando estábamos secuestradas. Sus caras no han salido de mi mente desde ese día. Y tal vez nunca lo hagan.

-¡Mirelle!, ¡Vete de aquí!.-Me grita mi hermano.

Volteo hacia la puerta y veo a un chico como de la edad de mi hermano con una pistola en la mano y en el momento en el que nos ve le dispara a Ethan. Me quedo en shock en mi lugar y Shawn salta hacia el chico de la pistola; pero lo único que recibe a cambio es un fuerte golpe con la parte baja de la pistola en la cabeza que hace que quede inconsciente al instante provocando un horroroso ruido al caer al suelo que hace que me estremezca en mi lugar.

El chico se acerca lenta y peligrosamente a mi con una sonrisa maliciosa la cual me da miedo. Trato de retroceder para escapar de el pero me doy un zape mental al recordar que lo que tengo atrás son las escaleras. Veo hacia su mano y observo el arma con la que le disparo a  Ethan, pero ahora tine el seguro puesto. Me tranquilizó instantáneamente pero me sobresalto al segundo ya que pasan por mi mente todas las cosas que me podría hacer, como violarme o matarme, o cualquier bajeza de ese tipo.

No abandono mi intento de escapar pero lo único que consigo es un gran golpe en la cabeza que hace que caiga al suelo y comienza a ver borroso, hasta que todo es negro....

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Ya había dos hombre muertos entre los pasillos que ibamos dejando atrás. No sabiamos cuantos mas teniamos que matar, o si podiamos escapar. Ni siquiera sabiamos si ibamos a salir vivas de esa prisión convertida en cabaña. Todas estabamos llorando en silencio, sabiamos que no podiamos hacer ruido así que no comunicabamos con señas y limpiabamos nuestras lágrimas cada cierta cantidad de pasos.