The Six Bitches.

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P.O.V Matthew.

Veo como la maltratan mientras yo estoy inmóvil en mi lugar, inmobilitado y sin poder hacer nada para salvarla. No es la única que esta encerrada en este cuarto, están todas sus amigas, menos April por alguna extraña razón. Sarahí fue una de las primeras en despertar  y la he visto llorar como nunca pensé llegar a verla antes de morir, vio, al igual que yo, como despertaron a la las chicas que no estaban despiertas cuando esos hijos de puta llegaron, las golpearon hasta que empezaron a sangre por la boca y despertaron.

Aidee voltea había mi y puedo ver sus múltiples moretones y sus varias cortadas; me mira a los ojos y puedo ver el amor en ellos a pesar de la situación. Comienza a llorar desconsoladamente de un momento a otro.

-Matt, Matthew, por favor salvala, es enserio. Salvala por favor, despierta y salvala, ¡Despierta Matthew!.-Dice entre gritos que poco a poco hacen que empize a ver todo negro y de pronto....

Abro los ojos y me encuentro a mi novia con su celular en la mano llorando justo como en mi pesadilla, tiene el rímel corrido y los ojos horriblemente inchados.

-¡Matthew despierta!.-Grita moviéndome de un lado a otro sobre mi cama. Me limpio los ojos con las manos y trato de tranquilizarla tomándola de los brazos y abrazándola para que deje de moverse.

-¿Que pasa?.-Le pregunto ya totalmente despierto con ella entre mis brazos.

-La..a...ella..la... secuestraron.-Me dice con la voz cortada y llorando.

-A ver, Aidee, hermosa, calmate ¿ok?.-Ella asiente con la cabeza.-Ahora Dime a quien secuestraron.

-A Mei.-Dice y vuelve a llorar pero ahora con toda su fuerza interior.

La abrazo mas fuerte hasta que se calma. Me levanto de la cama y la dejó a ella ahí para que acomode sus ideas; entro al baño para hacer mis necesidades y lavarme la cara y los dientes, cuando salgo ella esta mandando mensajes desde su celular. Abro mi armario y tomo una camisa de manga corta, unos jeans negros y unos tenis cómodos. Comienzo a vestirme frente a ella y justo cuando me estoy poniendo el segundo tenis, mi celular comienza a sonar. Leo el nombre de Shawn en la pantalla y decido contestar.