45- La función

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Todos miraban al escenario, esperando a que la obra diera comienzo. Emmy aún sentía calor en su interior tras la discusión con Michael, y éste tan solo pensaba una y otra vez en quién se creía esa friki para hablarle así a él. En cambio, los pensamientos de la chica volvieron a llenarse de Nil en cuanto el primer actor apareció en el escenario. ¿Sería capaz de hacerlo? Todos pensaban lo mismo, excepto Jamie, que tan solo esperaba ver a Nil, y Michael, que solo quería que esa parida acabara pronto.

Los cuatro amigos pasaron un buen rato en completa tensión, rogándoles a todos los dioses que todo saliera bien. Hasta que, por fin, Nil apareció en escena con el pelo negro y la ropa de cuero repleta de cadenas y roturas. Aunque no causó tanta impresión como la primera vez. Tal vez porque ya lo habían visto con esas pintas o... tal vez porque no tenía la misma actitud. Estaba como cohibido, no tenía la potencia necesaria para interpretar ese papel.

Emmy y Jake se mordían las uñas sin parar y Mary jugaba con sus manos con nerviosismo. Nil no lo estaba haciendo todo lo bien que podía... y todo por culpa de Alan y Michael. Bueno, ellos no tenían la culpa de nada, pero...

Pasados unos diez minutos desde que Nil subió a escena, miró de repente hacia el público en un periodo de tiempo en el que no tenía dialogo. Alguien estaba con el teléfono móvil. Y eso no lo soportaba. Pensaba quedarse con su cara y echarle la bronca después de la actuación, sí señor.

"A ver... tiene el pelo negro que le cae por encima de las gafas y..." justo cuando estaba observándolo fijamente, el chico apartó los ojos del aparato y le devolvió la mirada. Nil sintió que se le cortaba la respiración al darse cuenta de quién era "¿¡M-Michael!? ¡Creía que Jamie vendría con su madre...!" Dejó de mirar sus ojos de color miel, agachando la cabeza. "Mierda, he estado haciendo el idiota delante de él... ¡Tengo que causarle buena impresión!" Apretó sus puños y esperó el momento en el que le tocaba volver a hablar.

-¡Tú no sabes de lo que estás hablando! ¡Si me entendieras, sabrías por qué soy así! ¡No intentarías cambiarme!- dijo, finalmente, con muchísima más potencia que al principio.

La cara de los cuatro amigos y la de Jamie se iluminaron al escuchar la fuerza con la que volvió a hablar Nil. Suspiraron, aliviados, y siguieron viendo como volvía a dar el máximo en cada palabra, en cada gesto...

-¿Has visto qué bien lo hace Nil?- el pequeño tironeaba de la camisa de su hermano mientras le hablaba en susurros. Michael no despegaba los ojos del escenario, hasta que miró a Jamie, sorprendido.

-¿¡Ese es Nil!?

Su hermano asintió, orgulloso, y siguió mirando la obra mientras Michael intentaba buscar algún parecido entre ese chico de cabellos oscuros y expresión vacía y el tipo infantil que cuidaba de su hermano. Definitivamente no había ninguna. Era admirable... y él no admiraba a nadie fácilmente.

De nuevo, como la otra vez que aquella obra fue interpretada por ellos, al cabo de un rato apareció el hombre amable y sonriente interpretado por Alan. En cuanto apareció en escena, Mary se llevo una mano a la boca, intentando evitar reírse a carcajadas. Emmy la miró seriamente.

-La última vez no te reíste.

-Pero es que... ahora que lo conozco más... verlo sonriendo tranquilamente y... encima así vestido...- habló como pudo para no explotar en risas. Emmy, en cambio, no movió ni un milímetro su expresión. La miró fijamente y luego miró a Alan.

-Voy al baño.

Se levantó de golpe, arrastrando un poco la silla. Pasó en frente de Mary, Jamie y Michael. Su amiga la miraba con expresión preocupada, pero cuando salió de su campo de visión, volvió a sumergirse en la obra, sintiendo de nuevo ganas de reírse sin parar.

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"Saber que el mundo avanza sin que tú puedas hacer nada. Que las cosas fluyen, sin importar tu existencia ni como te sientes. Todo sigue su paso, continúa el camino hacia su destino. Y tú solo estas ahí, esperando que alguien oiga tus gritos silenciosos, rezando por que algún día dejes de sentir que se te desgarra el interior. Incluso sientes que eres un estorbo, una molestia para que las cosas sigan su ciclo. Tu existencia no importa, solo puedes sonreír y esperar a que llegue. Nada más. Porque tú no eres nada. Nunca lo has sido, ¿por qué iba a cambiar eso? Solo debes seguir tu función, seguir mostrándoles a todos lo feliz que eres cuando en realidad te estás muriendo lentamente. Y no puedes hacer nada. Alguna vez pensaste que podrías tener la oportunidad de cambiarlo, pero, como siempre, son simples esperanzas vacías. No vas a hacer nada, no puedes hacer nada. Cualquier esfuerzo será inútil. ¿Vale la pena intentarlo? No, no puedes cambiar la dirección del viento. Tan solo puedes esperar, sentir como la brisa te esquiva, acariciando tu piel y haciéndote creer que estará siempre contigo. Pero no. Se marchará y llegará al lugar en el que debe estar. Y no podrás hacer nada."

Emmy suspiró, sentada sobre la taza del váter, metida en ese cubo llamado servicio situado en la segunda planta del edificio en el que su rubio amigo hacía teatro. Mucho tiempo había pasado desde que se desahogaba así. Definitivamente lo necesitada. Guardó la nota del móvil en el que había reflejado sus sentimientos y se levantó con la intención de salir, pero su mano sintió la vibración del teléfono. Lo desbloqueó, creyendo que sería otro mensaje de Nicole. Pero no era así.

"¡Emmy! ¿Conseguiste el trabajo? ¡No pude preguntarte antes, lo siento!"

Se quedó mirando el mensaje de Matt. Desde que le pasó su número hablaba bastante con él. Le había contado lo del trabajo, pero no le contó el resultado. Así que decidió contestarle.

"¡Tranquilo, no pasa nada! Al menos me has preguntado, jeje. Y... ¡Sí! ¡Me dieron el trabajo! Por suerte la que me hizo la entrevista era una chica :P aun que la recomendación de Sean influyó bastante también..."

"¿Lo habéis celebrado ya?"

"Que va. Todos estaban ahí cuando salí pero cada uno fue a su casa, no creo que sea motivo suficiente para celebrar nada -_-" "

"¿El sábado estáis libres tus amigos y tú?"

"Ni idea, es un poco pronto para decirlo :P"

"Pues cuando lo sepas me das un toque, iremos a cenar por ahí."

"Mmmmmm.... Vale, pero yo invito."

"Ni hablar."

"¡Oye!"

"Shhhh ni una queja, ¿eh? Por cierto...¿Vendrá Jake?"

"Supongo"

"Yay ^O^"

"Oye, me tengo que ir, Matt. Luego te hablo ^^"

"Vale, hasta luego~"

Emmy guardó el móvil en el bolsillo de su sudadera y salió del baño para volver a bajar al teatro. Entró haciendo el mínimo ruido posible y se dirigió a su fila.

-¿Estás bien? Te he visto un poco... alteradita- Michael la sorprendió con eso, aunque el tono que empleó... la estaba intentando atacar. ¿Pero quién se creía?

-Sí, gracias- le respondió bruscamente mientras pasaba por enfrente suyo. Llegó a su asiento y se dejó caer en él.

-¿Qué te ha pasado?- el tono de Mary parecía preocupado. Ella sonrió, haciéndole ver que estaba perfectamente.

-Nada, tranquila- contestó con una sonrisa. Mary arqueó una ceja y se encogió de hombros, para luego devolver su mirada al escenario.

"Y tú no puedes hacer nada..."

Whatever (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora