Algo Inesperado

Capítulo 2. "Mi pesadilla vive enfrente"

Narra Ezequiel

No, no y no. Mis ojos tienen que estar imaginando lo que estoy viendo, tengo que estar soñando. Por favor, por favor que alguien me despierte de este maldito sueño. ¿El destino puede ser que alguna vez no esté en mi contra? Claro que no, siempre está empeñado en hacerme la contra en todo. 

¿Ustedes se preguntaran por qué digo esto? Es simple, Mi pesadilla vive enfrente de mi casa. Ese castaño, cuyo nombre no se todavía, está parado a unos metros delante de mí, con su campera de cuero negra  y su jean oscuro. Me mira con su sonrisa arrogante y en sus ojos se puede percibir la diversión. Miro por detrás de su hombro, su casa es de dos pisos, de un color crema pastel, muy grande y hermosa. Sigo tieso mirándolo, quiero escapar, pero mis piernas no funcionan, mi cerebro esta en shock. Cuando logro salir de mi embobamiento, es tarde... Lo tengo a centímetros mío, mirándome fijo. Su mirada me hace perder.  Maldita sea, maldigo en mi mente y sacudo la cabeza para despejarme.

- Que coincidencia ¿no? – Dice el ojimiel-

Mis piernas por fin reaccionan, giro sobre mis talones y pretendo caminar hacia la escuela. Pero una fuerte mano agarra mi camiseta y tira de ella, haciéndome caer al piso.

- Auch – me quejo, dolorido-

- No me gusta que me dejen hablando solo, idiota – me mira con desprecio. Me agarra otra vez, haciéndome parar, arruga mi camiseta con su puño.-

- Déjame –le pido, suplicando-

- Te voy a dejar cuando se me dé la gana –aprieta más fuerte mi camiseta-

- ¿Qué es lo que te hago? –le pregunto-

- Vivir, eso haces –me mira arrogante. Sigue con su puño agarrando mi camiseta-

-Por favor, déjame –le pido en susurro-

-Está bien –dice el rubio, Me empuja haciéndome caer al piso con su mano que antes estaba agarrando mi camiseta. – Chau, imbécil.

Me quedo tirado en el piso dolorido por la caída, veo como dobla en la esquina,  sonriendo. Maldito estúpido. Que se cree que es, no tiene derecho de tratarme así. Me levanto a duras penas, y empiezo a caminar hacia la escuela. 

 **

Entro a mi salón y para mi suerte no había entrado el profesor. Recorro el lugar con la mirada y encuentro un asiento disponible, lejos de donde se sienta mi pesadilla. Me ubico y me quedo mirando la nada, mi cabeza navega sin lugar alguno.

- Hola  -dice sonriendo-

Miro a la persona que me ha hablado. Es una chica de estatura baja, delgada. Su cabello es de color colorado* fuerte, ojos azules y una sonrisa amplia.

- Hola – sonrío, tímido-

- Soy Nicolasa, Nikky – vuelve a sonreír-

- E-em E-ezequiel –Tartamudeo, nervioso-

- Un placer ¿Me puedo sentar?

- Sí – contesto y agacho la mirada a la mesa-

-¿Sos nuevo en la ciudad? –Me pregunta, Nikky-

- Si – digo –

- No seas tímido – sonríe  y me pega en el brazo. La miro sorprendido-  Lo siento, soy impulsiva.

-No hay problema –sonrío-

- ¿Tienes problemas con Valentín?

- ¿Con quién? – pregunto desconcertado-