Narra Valentín
Me desperté por los rayos de sol que entraban por mi ventana. Me senté, medio dormido, mire el celular y marcaban las 11 de la mañana. Me levanté de la cama y me asomé a mi ventana que daba a la calle, el día se mostraba algo caluroso, mucho sol y el cielo sin nubes, era un sábado estupendo. Miré hacia la casa de enfrente, su casa. Algo dentro de mí surgió. Unas ganas terribles de querer verlo, quería verlo en este preciso instante. No sé si soy gay, pero él es adictivo, lo necesito como el aire, a pesar de que hace 2 meses lo conozco.
Fui al baño, me pegué una ducha rápida y me vestí con lo primero que agarré. Estaba ansioso por verlo, nervioso. No me importaba qué excusa iba a darle, solo necesitaba estar cerca suyo. Bajé las escaleras corriendo y me dirigí a la cocina, estaba vacía. Agarré una manzana y salí para la casa de Ezequiel.
-Hola –le sonreí cuando me atendió. Él me miraba con asombro ¿Puedo pasar?
-Este... sí – murmuró y se hizo a un lado para que yo pueda pasar-
-¿Tu mama? -le pregunté. Ambos estábamos parados en el medio del living-
-Se fue con unas amigas – nos quedamos en silencio- ¿Necesitabas algo?
-Si – lo miré fijo-
-¿Qué? – Me devolvió la mirada-
- A vos –me acerqué a Ezequiel, lo agarré de la cintura y lo apreté a mí, me acerqué a su cuello y aspiré su olor masculino. Él estaba estático como una piedra – Relájate – susurré-
-Dudo que pueda hacerlo con vos así – me habló entrecortadamente-
- ¿Te pongo nervioso? –le pregunté sonriendo en su cuello, no sé de donde yo había sacado tanta seguridad –
- Demasiado – susurró-
- Tu olor me mata –le volví a susurrar en la oreja-
-¿Por qué haces esto? – Murmuró algo tímido-
-¿Qué hago? –me separé apenas para poder mirarlo. Sus mejillas estaban rojas, sonreí –
-¿De que te reis? – Soltó bruscamente, se quiso separar pero lo agarré más fuerte-
- Tranquilo- pasé mi nariz por su mejilla sonrojada,-Me encanta cuando te sonrojas
- Lo siento – dijo mirándome-
-Por q...
No me dejó terminar que sus labios estamparon los mío, Ezequiel me besaba pero yo no podía corresponderle, estaba en shock. Era la primera vez que besaba un hombre y se sentía bien, aunque era muy superficial el beso ya que yo no correspondía. Se separó de mí al ver que yo no contestaba el beso. Se apartó varios pasos para atrás y me miraba nervioso y con miedo.
- Perdón, es q-que yo p-pensé – me hablaba tartamudeando- Perdón –agachó su mirada sonrojado. Me acerqué a él dando grandes pasos- ¿Que? – Levantó la mirada y sus mejillas seguían rojas-
No le contesté, ahora fui yo el que estampó mis labios a los suyos, el demoró en reaccionar hasta que empezó a corresponderme. Entre abrí mi boca así el beso era más placentero, era lento y dulce, nuestras cabezas se movían al compás. Sus labios eran suaves y tibios, su sabor era simplemente suyo, nuestras lenguas danzaban por sí solas, mis manos se encontraban en su cintura apretándolo hacia mí, las suyas acariciaban mi corto pelo. Nos separamos por causa del aire, sus mejillas estaban acaloradas e igual que los mías, nuestra respiración era entrecortada. Nos quedamos mirando sin decir nada, sin separarnos. Las palabras sobraban, un nuevo sentimiento creció en mí.
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Algo Inesperado
RomanceAlgo inesperado pasó ¿algo del destino? Nadie lo sabe, pero lo que sí se sabe es que dos chicos totalmente opuestos se enamoran. ¿Podrá llevarse a cabo su amor sin ningún problema? ¿Podrán permanecer juntos a pesar de todo? Eso lo veremos a lo largo...