"Destino Entrelazado." (JiKook)

XXIII - "Día Gris."

Era un día gris, hacía frío, estaba nublado y pequeñas gotas comenzaban a caer.
Había despertado de mal humor a causa de la falta de sueño, a eso sumándole el estrés de la universidad y el cansancio físico y psicológico. Quería pasar todo el día en cama si me era posible, pero no fue así. Recibí una llamada de Kook para que lo fuera a ver. Di un largo suspiro y con pereza me levanté. Me abrigué y salí.
Al llegar mi novio me recibió con una sonrisa. Saludé a su madre que estaba de salida y subimos a su cuarto. Me tumbé en su cama boca abajo y el menor se acostó al lado mío.

-Te ves cansando.- dijo con preocupación.

-¿Será porque lo estoy?.- respondí sarcástico.

-¿Sabes que es bueno para el cansancio?.- me preguntó besando mi nuca y colando sus manos por debajo de mi chaqueta. De inmediato supe que era lo que quería pero me encontraba sin ánimos.

-Ahora no JungKook, solo quiero dormir, de no ser por tu llamada aún seguiría en cama.

-Perdón por creer que tal vez querrías verme queree hacerte sentir mejor.- respondió incorporándose en la cama.

-Sabes que no es eso. Siempre quiero verte pero estoy exhausto.

-Sé nota que querías verme....- susurró exasperado.

-¿Me dejarás dormir o no?.- pregunté algo cabreado.

-Pues no, no te dejo. Te invité para que pasáramos tiempo juntos no para que me ignoraras. No es mi puta culpa que andes con un humor de perros.

-¡Joder!. No sabes lo cansando que estoy, la universidad me colapsa, con suerte duermo y ni siquiera me he alimentado bien y ¿tú vienes a reclamarme que te ignoro?. Estamos pasando tiempo juntos ahora, ambos estamos en la misma habitación respirando el mismo aire. Confórmate con eso y deja de hincharme las pelotas.- le solté alzando la voz. El pelinegro se sorprendió un poco ya que le había gritado y pude ver como se aguaban sus ojos.

-Vete a la mierda, no tengo por qué aguantar esto.- me gritó con su ceño fruncido.

-¡Bien!. Me voy a la mierda pero después no me busques.- me levanté lo más rápido que pude y salí dando un portazo que se escuchó por toda la casa.
No me sentía bien como para volver a la mía así que di unas vueltas por el parque.
Me senté en una banca a ver cómo pasaba la gente, una linda chica se encontraba viendo libros en una tienda. Iba vestida con unos jeans ajustados y un suéter ancho y blanco. Me miró desde la ventana y se me acercó.

-Hola.- me sonrió. Yo miré a todos lados para verificar si realmente me estaba hablando a mí.

-Amh, hola.

-¿Cómo te llamas?

-Jimin.- estiró su mano y la tomé, era cálida.

-Soy SoHee, un gusto. ¿Puedo sentarme contigo?.

-Claro.- se sentó algo cerca, la banca era bastante grande y su cercanía comenzaba a incomodarme. Conversamos un rato de cosas triviales hasta que comenzó a hablarme de libros. Era una gran lectora aficionada a las páginas. Sus escritores favoritos eran Edgar Allan Poe y Stephen King. Dos grandes exponentes del género del terror para libros. Algo raro, pensé que por ser chica tal vez le gustara Jhon Green pero me equivoqué.
Mientras hablábamos me olvidé por un momento de la pelea con Kook pero de inmediato la recordé al ver a una pareja que se sentó al frente. Me sentí culpable y callé al instante, ella lo notó.

-¿Qué ocurre?. ¿Por qué esa mirada tan triste?.

-Nada, no es nada.- le sonreí falsamente.- ya es algo tarde, debería irme.- comenté viendo la hora en mi iphone.