Capítulo 21.

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Después de unos 20 minutos la puerta fue abierta, me levanté de porrazo del piso donde me había sentado por propio cansancio y sujete mi bolso con más fuerza.
Salieron un par de chicos, incluyendo al de hace rato, que hablaban entre sí hasta que me vieron ahí parada, mantuve mi mirada fija en la pared de alfrente rogando infinitamente que Louis saliera de una buena vez.
Para mi suerte, Louis fue el siguiente en salir, me vio y luego vio a los chicos que se encontraban cerca, les hizo una seña que no pude entender y se devolvió hacia mi.

-Vamos-. Su mirada era seria, no me había hechado una mirada en todo el camino hasta otra puerta mas lejana del pasadizo al cual habíamos entrado.
Saco una llave de sul bolsillo y abrió la puerta dejando ver una cálida sala; dos muebles decoraban los dos costados de la sala y un gran escritorio en la parte central era el centro de atención, miles de pinturas adornaban las paredes y un rico aroma a vainilla inundó mis fosas nasales al entrar. Louis cerró la puerta sin siquiera voltearse para hacerlo.

Caminó hacia mí y me ofreció sentarme en una de las sillas que estaban ahí, acepte pues mis piernas no daban más, arrimé unos papeles que se encontraban sobre el escritorio y agarre territorio esparciendo por todo el escritorio los papeles de mi investigación.
Louis se sento en la silla principal, podría jurar que más parecía una entrevista de trabajo que una simple reunión para hacer una tarea.

Creo que él se había dado cuenta de esto pues se miró incómodo cuando trataba de leer los documentos, se paró de su lugar y atrajo una silla a mi costado, después de unos segundos se sentó. Ahora con él mas serca mío se veía mucho más concentrado, movía los papeles de un lado a otro, y aveces se reía al descubrir cosas que no sabía antes.

Me descubrí concentrada ante sus movimientos,y hasta le seguí las risas que se le escapaban al leer los testimonios de la gente.
Después de unas cuantas horas Louis salió y trajo consigo unas bolsas de comida rápida, se me hacia agua la boca con solo ver como sacaba la comida de las cajas descartables, cuando recibí mi ración ataqué con fuerza, tenía mucha hambre.

-Si pudiera comer esto todos los días de mi vida, lo haría- musite entre risas, Louis me miró concentrado u al vez extrañado.

-Pense que eras de esas que se cuidan hasta el pelo de la ceja

-Las apariencias aveces engañan Louis.

Louis sonrió de costado y no dijo más, cuando terminamos de comer Louis se hizo cargo de botar todo mientras que yo terminaba de ordenar el trabajo.
Unos brazos se posicionaron sobre la mesa por encima mio, los tauajes me hicieron reconocerlo, me tense rápidamente, sus manos venosas me ayudaban a mover los papeles, mi corazón latía mucho más rápido, y mi respiración era mucho más agitada, no tenía escapatoria él estaba encarcelandome.

-Louis- musité. Con miedo.

Esperé unos segundos a que me respondiera, él se aserco más haciendome sentir su pecho en mi espalda.

-¿Mmm?- emitió, me giré quedando cara a cara con él, estaba demasiado cerca, sus ojos azules me observaban oscuros y su respiración era lenta, muy lenta.

-¿Que haces?- masculle algo asustada, su mirada se dirigió hacia mis labios, quería esconderme, volverme pequeñita y con suerte desaparecer, pero no podía él estaba ahí acorralandome, y de ahí no podía salir.

-Solo te estoy ayudando, Jane- dijo con descaro, claramente no me estaba ayudando.

-No te aserques más- le ordene, él sonrió e hizo caso omiso; se acercó, obligándome a quedar pegada al escritorio para mantener distancia.

-¿Quién me lo prohíbe?- susurró, posicione mis manos contra su pecho y traté de alejarlo pero parecía más duro que una estatua, creo que no lo había movido ni un centímetro de donde estaba.

-Louis, ya- dije con fastidio, él se atrevió a acariciar una de mis mejillas pero al instante le baje la mano cosa que le dio oportunidad para sujetarme de ahí, ahora si sin ninguna salida.

Vi sus ojos azules por ultima vez antes de que una sus labios a los mios y se adueñe de ellos, mi cuerpo se enfrió, mi mano se aflojó y la mano de Louis se sujeto más fuerte contra la mía.
Me resistí unos segundos pero no pude hacerlo más, mis labios terminaron por seguirle el juego, su cuerpo se aserco más hacia el mío, y una de sus manos me sujeto del cuello.
Abrí los ojos para ver el rostro de Louis y él los tenía abiertos, nos miramos fijamente unos segundos antes de volver a concentrarnos en el beso.
Mordió mi labio inferior y eso hizo que emitiera un pequeño quejido.
Cuando el beso termino los ojos azules de Louis volvieron a observarme, mi mirada bajo, no querían verlo, yo no quería. El leve picor de sus labios aún se encontraba en los mios, y me sentía de alguna forma rara.

-...¿Podemos terminar el trabajo?- suspire tratando de obviar lo que había pasado, Louis solo se limitó a mirarme quizás esperanzado de que le dijera algo más que sólo eso.

Me arregle en la silla y termine de ordenar toda la información, Louis estaba del otro lado ayudando también, agregando y descartando cosas que no deberían entrar en el proyecto. Era el momento más silencioso e incómodo del día. Nos dividimos el trabajo en dos partes, yo me iba a encargar de exponer la primera parte y Louis la sobrante, así que sí lo haciamos bien, la nota iba a ser buena y lo mejor que para los dos. Cuando terminamos me sentí realmente aliviada, quería botar todos los papeles al aire y que cayeran como lluvia, ese proyecto había sido un verdadero problema. Me recoste sobre mi asiento y cerre los ojos exhausta pero lo que dijo Louis hizo que los abriera de nuevo.

-¿El beso no significó nada para ti?- me pregunto con un tono de voz bajo.
Me giré a verlo y estaba a céntimetros de mi, viéndome desde arriba, con sus brazos cruzados y el cabello algo mas arreglado.

Suspire.

-No te conozco Louis. No podría sentir algo en especial por alguien a quien no conozco.- sus ojos me miraron dolidos, pero solo asintió.

-Además, yo tengo un novio, al cuál conoces muy bien y no tengo porque describirtelo, y finalmente tú me caes mal, por no decirte que te tengo un leve odio desde la primera vez que nos vimos, fue tan espectacular tu bienvenida que hasta ahora no me la saco de la cabeza y no creo que me la olvide muy fácilmente.

Sus ojos se apagaron cuando mencione lo de la "bienvenida" su boca se entre abrió para hablar pero se arrepintió finalmente.

-Para mi tampoco significó nada- dijo con desinterés.

Yo solo asentí sin esperar otro tipo de respuesta.

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⏰ Última actualización: Jul 31, 2016 ⏰

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Disaster - Louis T.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora