Ataque

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¿Que voy hacer? me puede acercar a la reina pero tratar de anestesiarla no lo creo, el no estar en mi cuerpo me lo impide.

-No se te hará difícil, deja de pensar que no vas a poder.- Victoria me saco de mis pensamientos.- La ventaja de ser tu en estos momentos es que puedes ir y venir cuando quieras.

-Si, la cosa es que tengo miedo de fallar, que no pueda hacerlo y todo se vuelva un desastre.

-Las vida no es fácil y las guerras menos, si lo fueran todos ganarían.

-Si.

Algo de esto me dice que no será fácil, así que voy a tener que pensar en algo para prevenir.



Alexa

Desde que la reina invadió el cuerpo de mi madre han pasado tantas cosa además creo que mi madre sabe lo que paso entre Víctor y yo, por lo que dijo y por como nos miro creo que lo sabe.

-¿En que piensas?

-Mi madre lo sabe, sabe lo que paso entre tu y yo.

-Eso fue por tus instintos, estas recién convertida.

-Por mis instintos o no pasó.

-Tu madre es muy.

-Lo que paso entre ustedes es su problema ya sabrán como vivir con eso.- Mi madre apareció detrás.- Yo no voy pelear en algo que no me corresponde, lo único que espero es que esto no traiga problemas.- Víctor y yo nos miramos. -Tenemos que irnos, tenemos poco tiempo para que yo vuelva a mi cuerpo.- Y sin más mi madre desapareció.

Luego de que mi madre desapareciera Víctor fue con mi padre para hablar de su plan, me dirigí a la habitación para pensar mejor. Ese comportamiento que tuve con Víctor estaba fuera de lugar, no importa si fue causado por mi transformación. Pero no voy a negar que me gusto.

¡Ay por dios! ¿en que estoy pensando?. Debí de quedarme dormida un rato ya que el sonido de la puerta me despierta.

-Hija.- Mi padre entro a paso lento.

-¿Si?

-Vamos a la sala, tenemos que hablar sobre lo que haremos con la reina.- Sin pensarlo dos veces me levante y seguí a mi padre hacia la sala, allí estaba mi madre, Victoria y Víctor. Me quede junto a la ventana mientras ellos decían que el que puede entrar sin ningún problema era mi padre mientras que a Víctor apenas coloque un pie en la casa la reina sentirá su presencia de inmediato.

Un pito comenzó a sonar muy cerca de mi oído, gire la cabeza hacia la derecha pero no había nada que lo produjera.

-¿También escuchan eso?.- Todos me miraron extrañados, comenzó a dolerme la cabeza, a cada segundo el dolor aumentaba, lleve mis manos a la cabeza sentía que me iba a estallar.- Mamá.

-Alexa ¿que te pasa?

-¡Haz que se detenga!

-¿Que cosa?

-¡Ese pito!.- Caí de rodilla hacia la ventana, vi mi reflejo en el cristal, mis ojos cambiaban de verdes a amarillos o rojos.

-No escucho ningún pito.- Escuche decir a Víctor.

-Tu no pero ella si.- Dijo mi madre.- Están obligando a salir el lobo.

-¡Rayos An, los cazadores!

-Encontraron tu casa Víctor, Alex y tu vayan y deténganlos mientras ese sonido no se detenga ella sufrirá.

Anastasia.

Víctor y Alex salieron en busca de los cazadores, ¿como pudieron encontrar la casa? no lo se. Alexa estaba de rodillas con las manos en los oídos, sus ojos cerrados y las lágrimas corriendo por sus mejillas me destrozaba el corazón. Me acerque a ella.

-Lexa, mi niña.- Sus ojos cambiaban de color, de verdes a amarillos luego a rojos.- Tranquila cariño ya se están ocupando del sonido.

-No se detiene, mi cabeza duele mucho.- No termino de hablar cayo de espaldas, escuche como cada hueso de su cuerpo se partía y volvía a su lugar.- Victoria que hago.

-Nada.- La lágrimas corrían por mi rostro.- No la puedes ayudar se esta transformando, tu mas que nadie sabe como se siente.- Alexa no paraba de gritar, sus huesos no paraban de romperse. La ira me recorrió y sin dame cuenta estaba frente a los cazadores con un Alex y un Víctor heridos, habían muchos cazadores.

-Ustedes.- Señale a los cazadores.- No podré estar en mi cuerpo pero los haré sufrir como mi hija esta sufriendo en este momento.- Los cazadores se llevaron a la cabeza las manos al parecer los estaba afectando mi mirada no lo se.- Así se siente ella en este momento.

-An, detente, es suficiente.- Dijo Alex.

-Con eso tendrán suficiente, dormirán un buen rato.- Regrese a la casa, aún no sabia como le hice eso a los cazadores. Alexa ya no estaba en la sala, Víctor y Alex estaban en la puerta frente a un lobo negro que les gruñía.

-Yo no tengo una mascota.- Dijo Víctor.

-Déjate de chistes.- Me puse frente al lobo negro, al verme dejo de gruñir e hizo una reverencia, los ojos de ese lobo eran de un extraño color, cambiaban constante mente.- Lexa.

-Igual que tu amor pero más pequeña.- Alex se refería a que la transformación en lobo de Lexa era igual a la mía solo que yo era mas grande. Ella comenzó a gruñir hacia Alex.

-Lexa alto.- No escuchaba, se acercaba poco a poco a Alex.- Cariño tranquila.- No me escuchaba.

-Calma.- Víctor se fue acercando a ella.- No te hará daño, es tu padre, tranquila.- Al parecer la voz de Víctor la estaba calmando, se acerco más a ella hasta que la pudo tocar.- Eso, mucho mejor, tranquila.- Alexa se acerco a Víctor hasta que escondió su cara en su pecho, vimos como poco a poco volvía a su forma original.

-Voy por algo para cubrirla.-

-¿Que me paso?.- Dijo Alexa cuando recupero la consciencia.

-Los cazadores fue lo que paso.







Nocturnos y la guerra de los cazadoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora