Intente decir palabra alguna pero ninguno de mis sentidos estaba en funcionamiento, ¿por que arruinaba todo?
-Ma... ¿Mark? -dije algo aturdida, confundida y mortificada.
Justin me miro confundido por la situación, el simplemente me miraba y miraba a Mirna intentando que alguna de las dos le explicara que estaba sucediendo o al menos quien era Mark.
-¿Quieres que vaya yo? -dijo Justin intentando defenderme.
-No, esta bien, iré yo. -dije en un intento fallido de arreglar la situación.
Me levante de la cama tomando mi blusa entre mis manos y colocandola sobre mi torso. Tome la mano de Mirna nerviosa y comenze a caminar con ella hacia las escaleras donde ella me daba ánimos para poder entablar una conversación con Mark, y dejarle en claro que el y yo no somos nada de nada.Baje hasta el living y pude ver a Mark recargado en el borde de la puerta principal. Escuchó mis pasos y me fulmino con esos hermoso ojos verdes que hace unos años me enamoraron. Sonreí falsamente al encontrarse mis ojos con los suyos.
-Bien, estare en la cocina. -susurro Mirna en mi oído mientras pasaba su mano por todo mi hombro.
Asentí sonriendole mientras la veía alejarse de mi. Me acerque a Mark y le dí un buen saludo depositando un beso en su mejilla.
-Hablemos afuera. -dije haciendo una seña para salir de ahí mientras que el asentía y yo cerraba la puerta detrás de mi.
-¿Que haces aquí? -dije cruzando mis brazos bajo mi pecho y recargandome sobre el cofre de su auto.
-Quiero recuperarte. -dije imitando mi acción y colocandose a mi lado.
-Ya no puedes hacer nada, no se si recuerdas lo que me hiciste. Yo confie en ti. -dije con desilucion.
-Lo se, lo se. Y quiero arreglarlo, quiero estar contigo. Quiero que todo vuelva a hacer como antes. -dijo acariciando mi mejilla como si quisiera besarme.
Se acerco tanto a mi que pude sentir su respiración chocar en mi rostro. Observe sus labios acercandose sensualmente a los míos y colocó sus manos en mi cintura haciendo que mi pecho chocara contra el suyo.
Miraba fijamente sus labios mientras los míos temblaban, estaba asustada y confundida, si quería besarme o iba a hacer algo raro o extraño que lo hiciera de una vez por todas, me estaba carcomiendo por dentro la tentación de sentir de nuevo sus labios sobre los míos.-No, no hagaz esto... -dije cerca de sus labios. Recapacite de lo anterior, estoy hablando de besar al chico que le mostró fotos intimas los que decían ser sus amigos, que patán.
-Será el último, lo prometo. -dijo.
Se acerco aún mas que nuestros labios estaban apunto de encontrarse en un beso.
-Dijo que no. -se escucho una voz detrás de nosotros.
Mark se movió de donde estaba frente a mi y pude ver la figura de Justin sin su camisa mientras tenia sus brazos cruzados bajo su pecho y miraba a Mark con decepción.
-¿Quien eres tu para decirme que hacer? -dijo señalando a Justin con superficialidad.
-Yo hago lo que quiera con ella, ella es mi chica. -dijo intentando tomar mi mano, a lo cual me negue.Justin bajo la mirada y apreto sus puños que estaban a cada lado de su cuerpo. Dio un gran suspiro y alzó su mirada hacía Mark. Solo me quedaba viendo, hasta que en un abrir y cerrar de ojos Justin estaba sobre Mark casi matandolo a golpes.
-¡Justin! -grite intentando captar su atención. Lo cual no funcionó.
En menos de unos segundos Jason y Noah salieron por la puerta separando a los dos chicos que estaban golpeandose en el pavimento.
-¡¿Cual es tu problema?! -dijo Mark quien era sostenido por Noah y Jason mientras tocaba su labio de el que brotaba sangre.
Mire el rostro de Justin aún con un gesto de enfado y con un pequeño golpe en su labio a comparación de Mark que estaba repleto de moretes, sangre y rasguños por todo su rostro.
-¡¿Que pasa contigo?! -dije empujando el pecho de Justin aún molesta.
Intentaba evitar mi mirada solo girando su cabeza de un lado a otro, mientras yo intentaba enfocar nuestros ojos.
-¡Mirame! -dije aún mas furiosa que antes.
Los demás se exaltaron por mi ansiedad y entraron a la casa dandonos privacidad a mi y a Justin.
-¡Justin! -grite tomando su cabeza entre mis manos y enfocando sus ojos con los míos.
-¡Que! -dijo mirandome y alzando la voz.
-Relajate, por favor. -dije mirandolo con ojos tiernos.
El asintió lentamente con la mirada baja.
-¿Por que te comportas así? -dije intentando dialogar con el.
-No soporte que te tocara, que estuviera cerca tuyo y que hablará así de ti. -dijo con su dedo pulgar limpiando su ojo derecho.
Intente levantar su rostro y que me dijera que sucedia, estaba ahí por el, y si en algún momento debía irme, debe ser con el, de lo contrario no iría a ningun lado.
-¿Que pasa, Justin? -dije enfocando rostro con el mio. Su mano derecha cubría sus ojos mientras suspiraba desesperadamente mientras era notablemente que estaba llorando. Odio verlo así.
-Ella se fue... Me la quitaron. -dije entre jadeos tristes y sollozantes.
-¿De quien hablas? -dije desesperandome un poco, Justin no tenia respuestas y si me las daba eran pobres, no me servian, necesitaba saber que pasaba.
Justin solo retiro la mano de sus ojos, se acerco a mi con los brazos tendidos y me abrazo. Sentí sus lagrimas caer y derramarse por mi hombro, sus sollozos eran dolorosos.
-Justin, necesito que... -intente decir, pero Justin estaba sobre mi devorando mis labios, como si su vida dependiera de ello.
Se alejo de mi por la falta de aire, y con sus ojos aún con lagrimas brotando, tomo mi rostro entre sus manos. Yo puse mis palmas sobre sus manos que estaban sobre mis mejillas y lo mire fijamente, esos ojos hermosos que miraba antes habían cambiado, veía unos ojos llenos de dolor, lastima y destrucción.
-¡Por favor, dime que nunca me dejaras! ¡Dime que nunca te iras... Prometelo! -dijo desesperadamente, tanto que llegó a asustarme un poco haciendo que un escalofrío me recorriera por completo.
-S-si... Te lo prometo. -dije con la voz más sincera que podía regalarle en ese momento, en el que el miedo se apoderaba de mi.
Bajo la mirada hacia sus pies sin remover sus manos de mi rostro, asintió lentamente antes de volver a mirarme a los ojos. Levantó la mirada hacia mis ojos, miro mis ojos con tanta pureza, pero después volvió a derramar lagrimas que se escurrian por sus mejillas.
-Justin, ¿que pasa? -dije rodandolo de nuevo con mis brazos, su rostro se refugiaba en mi hombro mientras sollozaba y jadeaba de dolor.
-Te amo... Te amo demasiado. -susurro casi inadible en mi oído.
-Yo también te amo demasiado, Justin. -susurre en su oído.