NEWT
Si tengo que ser sincero, diría que me estoy divirtiendo más de lo que creía. Los amigos de Thomas me cayeron muy bien, en especial Ben y Sonya, la fiesta no está tan mal como en mis años de adolescente y todo va a la perfección.
A la una de la mañana parecía que la celebración acababa de comenzar, algunas personas bailaban, otras bebían, y otras bailaban bebiendo.
Esta no es mi tipo de gente, la que sale todos los fines de semana, se reencuentran con sus amigos y hacen cosas ilegales. Aunque por algún motivo una parte de mí insiste en confiar en Thomas y que me haya invitado aquí fue una sorpresa por lo que deduzco que probablemente consiga divertirme.
Más tarde, los amigos de Tommy y yo fuimos a la pista de baile luego de conocernos más. Cuando pasaban las canciones favoritas de la gente, saltabamos, cantábamos y gritabanos hasta que no poder más. Estuvimos un buen rato en ese estado de euforia hasta que decidimos sentarnos en algún rincón del salón para tomar aire fuera de la multitud, cerca de un gran ventanal que daba una visión a un bonito jardín lleno de flores y una fuente de agua, pero nos quedamos adentro.
Sin darnos cuenta como, comenzamos a hablar de cualquier tema que se nos cruzaba por la mente. Algunos, como Teresa y Brenda, comenzaban a decir incoherencias gracias a la cantidad de alcohol corriendo por sus venas y otros, que no estaban ebrios pero tampoco en sus cinco sentidos, por así decirlo, le seguimos la corriente buscando algo de diversión como lara pasar el rato.
Llega un momento de la madrugada que veo todo casi nebuloso y confuso, siento ganas de reir sin ninguna explicación y noto mi cuerpo más liviano, como si no fuera yo la persona dentro de mi cuerpo. Y como si fuera poco, todos estamos en la misma situación. Jamás me había sentido así... ebrio. O supongo que lo estaba.
Volvemos al centro de baile con menos amigos de Thomas; Brenda y Harriet abandonaron la fiesta ya que Harriet decide llevar a Brenda a su casa; Teresa se negaba a irse así que quedábamos Ben, Teresa, Sonya, Tommy, y yo.
No recuerdo con exactitud cuando comenzó a agradarme este tipo de música ya que me muevo con el ritmo de ella tan frenéticamente que me sorprendo de mí mismo. Bailamos hasta que el reloj marcó las 4 y volvimos al rincón.
Ellos hablaban y hablaban pero yo no podía entender casi nada. Mi cabeza no me permitía prestar atención en la charla, me perdía cada diez palabras. Ninguno de nosotros estaba sobrio, eso estaba más claro que el agua y, entre la conversación, comenzamos a hacer un juego de "retos" que antiguamente ellos jugaban en las fiestas que hacían cuando estaban en la secundaria. El juego no era tan dificil de entender luego de verlo:
Para empezar, si aceptabas el juego, ya no podías rechazar ningún reto siguiente. El juego de retos consistía en que una persona, (yo, en este caso, que me eligieron por ser el "nuevo en el grupo") elije a otra, (Sonya) para que le diga que reto debe hacer: besar al Dj, algo no muy excesivo ya que ella había comentado que era muy guapo y le hubiese gustado hacerlo. Ella accedió rápidamente, así que en frente de todos, le plantó un corto pero intenso beso en los labios. Por suerte, no se oyeron quejas de aquel hombre.
Todos comenzamos a reirnos y a aplaudirla enérgicamente.
Nadie nos notaba ya que el lugar era enorme y la música retumbaba por todos lados, haciendo casi imposible comunicarse con palabras.Luego, Teresa eligió a Ben y lo retó a beber 10 vasos pequeños de vodka. Al principio, como cualquiera, se resignó a hacerlo. Pero luego de haberlo llamado "gallina", Ben tomó varias botellas de aquella bebida, llenó los vasitos y comenzó a tomar el contenido de ellos de una manera exorbitante mientras nosotros contábamos cada vaso ya bebido. Logró llegar al décimo y lo vitoreamos por cumplir su reto.
Y, como había botellas sin abrir, nos dimos el gusto de tomar una cada uno. Cada vez me sentía más mareado y todo daba vueltas a mi alrededor, pero no me importaba, me estaba divirtiendo al máximo y me sentía más vivo que nunca.
El juego continuaba y Ben reto a Teresa a contar algo vergonzoso, o eso creí entender. El alcohol me afectó bastante.
Pero entré en razón cuando Teresa eligió el reto para Thomas, el último que quedaba.
- Muy bien, muy bien, shhh, ¡Callense! - a veces me da lástima-.Como Thomas es el... ¿último verdad? Sí, el reto será un poco más... especial.
- ¿Qué...? ¿desde cuándo somos tan pocos?- dice Tommy realmente confundido, lo que provoca una carcajada por parte de todos. Se me viene a la mente el recuerdo de Thomas de NO tomar alcohol y suelto una risa.
- Quiero decir que, Thomas, te reto a...
No sabía si mis oidos estaban mal, si estaba soñando, o si todo era sólo efecto del alcohol, pero esa oración retumbó dentro de mí durante mucho tiempo.
-... Thomas, te reto a besar a Newt.