Setenta y cuatro.

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- ¡Vamos! ¡levantad todos! - Dije entrando por todas las habitaciones y chillando por toda la casa.

- ¡Sandra! ¡Son las nueve de la mañana! - Gritó mi hermano.

- ¡Vamos Manuel! Hay que recoger todo, preparar la mesa, ah, también viene la familia de Calum a comer y.. Y hay que hacer la comida y recoger todo, ah eso ya lo dije..

- Subnormal, tranquilizate, no viene el presidente de los estados unidos ¿sabes?- Dijo Samu entrando al baño antes que yo.

- Que te jodan, Samuel. - di un golpe en la puerta.

- Te quiero, Sandra. - Dijo saliendo.

[...]

La casa ya está recogida, la mesa está preparada y la comida está lista. Calum y sus padres están apunto de entrar por la puerta y mi madre.. estará al llegar.

Literalmente estoy temblando, ahora mismo estoy en las nubes.

Estamos todos esperando a que mi madre cruce esa puerta de un momento a otro, pero ese momento no llega y ya empiezo a desesperarme.

- ¿Y si no viene? - Pregunto.

- Si que vendrá Sandra, no pienses en negativo. - Dijo Calum acariciándome la espalda.

Sonó el timbre en ese momento y todos nos miramos sin decir nada, nadie articula palabra hasta que mi tía se acerca a abrir la puerta.

- ¡Hola! - Oigo su dulce voz. ¡vaya, Mallorca está genial!

- Bienvenida Lucía, estamos encantados de que hayas vuelto.

Puedo notar como sonríe, opto por levantarme y acercarme hasta la puerta de la cocina.

- Cariño.. - Dijo mi madre acercándose a abrazarme.

- Mamá. - Suspiré. - No me puedo creer que seas tú.

- Sí, soy yo y no os volveré a dejar, lo prometo. - Dijo a lo que yo asentí sorprendiendo. - Estás guapísima, eres igual que yo cuando tenía tú edad.

- Acabas de echarte flores a ti misma sin quererlo. - Dije riendo y secándome las lágrimas.

- Hermanita, creo que es hora de que me dejes un rato.

Me separé y me volví a sentar al lado de Calum que me miraba sonriente.

Terminamos de presertar a la familia de Calum y porfin decidimos ponernos a comer.

- ¿Y papá? - Pregunta Manuel.

- Veréis.. - Suspira. - Las cosas con vuestro padre no han ido muy bien, hace tres años yo le hablé sobre volver a España ya que os echaba de menos pero él nunca quiso, me he cansado de estar retenida y no podía aguantar más allí.

- ¿Entonces estarás aquí ya pasa siempre? - Dije sonriendo.

- Sí, y quiero dar las gracias a vuestra tía por cuidaros tan bien después de todo lo que habéis pasado.

- Bueno, yo también les he cuidado.. - Dijo Samu.

- Desde luego. - Dijo mi madre sonriendo. - Por cierto.. ¡qué mayor estás!

- Lo sé, ya me estoy desarrollando. - Volvió a decir.

- Excepto la parte de tus neuronas, que no avanza. - Dije riendome de él.

- Que graciosa eres, Sandra. Ja,ja.

- Por cierto.. Me pareces buen chico para mi hija. - Dijo mirándo a Calum. - Se nota que la quieres y que la cuidas.

- Siempre lo haré.

- Tenéis un hijo estupendo. - Dijo mi madre mirándo a los padres de Calum con lágrimas en los ojos.

- ¿Pasa algo? - Pregunté.

- No, esque.. es.. solo que hace tiempo que no os veo y recuerdo lo que me dolió dejaros, erais mi vida y bueno, lo sois. Os quiero muchísimo y quiero que lo sepáis, sé que estuvo fatal lo que hice pero no quiero que me tengais rencor por ello.

- Lucía. - Dijo la madre de Calum. - Ellos no te tienen rencor, para nada. Saben que les quieres y porque hiciste lo que tenías que hacer en su momento, eres un ejemplo para ellos y te admiran.

- ¿Podemos dejar el rollo sentimental ya? - Dijo Samu. - ¿Calum te apetece una de Play?

- Si, por favor.

Salieron de la habitación y mientras los demás tomaban el postre ayudé a mi madre a colocar la ropa de las maletas.

- Esta habitación no la hemos tocado desde.. bueno ya sabes.

- ¿Seguro que quieres que duerma aquí?

- ¡Claro, mamá!

- Te he echado de menos mi renacuaja.

- Mamá.. no me llames más así. ¡Sabes que lo odiaba!

- Lo siento, lo siento..

- ¡Te tengo que ir informando de todo! ¡y te tengo que presentar a todos mis amigos!

- ¿Te gusta mucho, no?

- ¿Eh?

- Calum, te gusta mucho.

- Más que eso, esque siempre ha estado conmigo.

- ¡Oye! No quiero ser abuela todavía eh.

- Tranquila, no lo serás.

- Todavia... no habéis..?

- Mamá, ¡cállate! - Dije riendo.

La verdad es que Calum y yo.. no. No quiero centrarme en eso de momento.

Mi madre necesita descansar asíque la dejo sola en la habitación y me voy con los chicos.

- Calum, ríndete, no podrás hacer nada contra Manue y Samu. - Dije riendome al ver que le estaban machacando.

- ¡Ts! Les voy a ganar.

- Me voy a mi habitación. - Dije saliendo.

- Sandra. - Me llama Calum.

- ¿Si?

- ¿Estás bien?

- Sí, claro que lo estoy.

- Bueno chicos yo me voy con mi chica. - Dijo Calum abandonando la partida.

Sonreí.

- Venga cuenta. - Insistió cuando entramos en mi habitación.

- Siento que a mi madre le pasa algo que no me quiere contar..

- ¿Algo como qué?

- Algo que ha pasado allí, o algo.. no sé, sobre mi padre..

- Si no te lo ha contado será por algo, acaba de llegar y lo que menos quiere es deprimiros con problemas, tiempo al tiempo.

- Espero que me lo cuente.

- Y lo hará, pero cuando estés preparada, de momento céntrate en estar con
ella.. ¡Hace muchísimo que no la ves!

- Te quiero, Calum.

- Y yo a ti, enana.

Miénteme si no me amas -Calum Heaslip.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora