Ochenta y uno.

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Me vestí lo más rápido que pude y esta vez fui corriendo yo sola hacia el instituto, mi madre ya se piensa que soy un agente privado o algo, todos los días me pregunta que porque siempre estoy hablando por teléfono, con el ordenador, corriendo de un lado para otro... en fin, cosas de madres.

Aunque me gustaría ser algo de eso de mayor, ser como Becket o cosa así. Solo me entendereis las que teneis un vicio a Castle, pero bueno sigo que me entretengo.

Esperé en la entrada a Teresa y me paré delante de ella.

- Tengo que hablar contigo.

- Mira. - Dijo ella. - No es de tu interés a quien hable y a quien no, me has fallado.

- ¿Yo te he fallado? - Reí con ironía. - Tú eres la que nos has engañado a todos.

- No sé para que contaste nada de eso a Alfonso.

- ¿Qué pretendías? ¿Seguir jugando con él?

- ¡No! - Gritó. - Pero es mi novio y le cuento lo que quiero.

- Tu ex-novio. - La corregí.

Puso mala cara y siguió hacia adelante dándome un golpe en el hombro. Vi como todos los miembros del instituto ponían el oído intentando averiguar que es lo que sucedía.
Y tenía que aparecer ahora el causante de esta problemática historia...

- Que hay bonita. - Dijo colocándose el pelo.

- Puedes perderte. - Pasé de él.

- Me he enterado de lo de Teresa...

- ¿Cómo?

- Ella mismo me llamó ayer muy enfadada y quejándose por todo. - Sonrió.

- Arg, los dos sois odiosos.

Me fui dejándole atrás y oyendo como se reía sin parar.

- ¿Qué tal ha ido? - Preguntó Samu cuando entré en clase.

- Digamos que no muy bien.... - Puse mala cara.

- ¿Te ha dicho algo?

- Ella no. - Dije. - Pero Wesley si.

- ¿A qué esperas? - Dijo Victor.

- Me ha dicho que ayer habló con Teresa por teléfono y eso... que ella le llamó.

- ¿Si? Ay... pensé que no era tan falsa.

- ¿Y Alfonso? - Pregunté.

- Le llamé antes. - Dijo Calum. - Pero no cogió... supongo que hoy no vendrá.

- Esta tarde vamos a verle. - Dijo Guille.

Todos asentimos y nos sentamos en la silla cuando entró la profesora.

[...]

- ¡Chicos! - Escuchamos una voz por detrás y nos dimos todos la vuelta.

- ¿Andrea?

- ¡No os vais a creer lo que acabo de ver!

Todos nos quedamos con la cara interrogante, hasta que Andrea comenzó a contar lo que acaba de ver en la entrada del instituto.

- Estábamos todos saliendo hasta que todos frenaron de golpe, eran Teresa y Wesley. ¡Se estaban besando! - Dijo poniéndose la mano en la boca. - No lo cuento para causar mas problemas, pero solo quería que lo supierais cuanto antes.

- Está bien Andrea. - Dijo Calum. - Gracias.

Ella sonrió.

- ¡Te queremos! - Dijo Guille.

Se puso colorada y en ese momento me acordé de lo mucho que estaba colada por Guille, ya me ocuparé de eso.

Fuimos lo más rápido posible hasta la casa de Alfonso y su persiana seguía bajada. Cuando pasamos a su habitación un Alfonso con los ojos rojos, ojeras y triste se levantó de la cama.

- ¿Cómo estás? - Dije dándole un abrazo.

- Bien. - Contestó. - Ayer estuve pensando y es mejor que me olvide de ella la verdad, aunque me cueste. Y espero que me ayudeis.

- Ni lo dudes, para eso estamos. - Dijo Samu.

- ¿Ha pasado algo interesante en el instituto hoy?

- La verdad es que... - Empecé a decir.

- Teresa y Wesley se han besado. - Soltó Juanma.

- ¡¿Qué?! - Respondió Alfonso.

- Ups...

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¡Aquí un capítulo nuevo! Espero que os guste amores💖😘

He estado en Italia!!!! Todo precioso❤️

Miénteme si no me amas -Calum Heaslip.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora