Querido Justin...

Once

21 de diciembre del 2015

Querido Justin:
En la mañana mientras te duchabas tu celular sonó, lo tome y era un mensaje de texto.

Hoy es la fiesta de A CORP, a las 9 de la noche en el casino Trilenium.
-Chad J.

Guarde tu celular en donde estaba hace un minuto y baje a hacerte el desayuno, lo puse en un refractario, sabía que no desayunarias conmigo. Bajaste por las escaleras y tomaste el recipiente.

-Hoy llegaré tarde, tengo una cena de negocios.- tomaste un vaso y te serviste agua.

-Esta bien, cuidate mucho, yo te esperaré.- caminaste hacia la puerta.

-No gracias, llegaré muy tarde, nos vemos luego.- al menos hoy te despediste, toda la mañana una loca idea andaba por mi mente... Ir a la fiesta de A CORP.
Me encontraba en una lucha conmigo misma; ir o no ir, y si iba ¿que usaría?, quería darte una sorpresa.
Tome mi bolso, las llaves del auto y conduci hasta el centro comercial. Fui a todas y cada una de las tiendas buscando un vestido adecuado. Al regresar a la primera tienda a la que fui vi el vestido perfecto, color beige con encajé negro, ceñido al cuerpo. Entre a la tienda y una empleada se acercó a mi.

-¿En que puedo ayudarla?.- preguntó mientras sonreía amable.

-¿Me podría mostrar aquel vestido?.- señale el maniquí que tenía puesto el vestido.

-Por supuesto, ¿que talla?.- nunca había comprado vestidos así que supuse que la talla de un vestido era la misma a un top.

-Chica por favor.- la muchacha asintió y se fue a buscar el vestido, me espere por 5 minutos hasta que regreso con el vestido en las manos.

-Tiene suerte, esta de liquidación.- me entregó el vestido, yo sonrei y camine hacia los probadores, me deshice de mi ropa y me puse el vestido, era hermoso y me quedaba a la perfección.

Salí del probador ya vestida y fui a pagar el vestido, lo pusieron en una bolsa y me lo entregaron, zapatos tampoco tenia así que fui a una zapatería.

-Disculpe buscó unos zapatos para este vestido.- le mostré el vestido a la mujer, le di dije mi talla y regreso con unos zapatos de tacón de 15 centímetros, jamás había usado unos zapatos tan altos, eran mortales. Los compre no muy convencida. Estaba a punto de irme pero recordé que; no se peinarme ni maquillarme, tome el teléfono y llame a Victoria.

-Necesito que me ayudes.- le dije.

4 horas después, Victoria había terminado de maquillarme y peinarme, tenía el vestido puesto y los zapatos.

-Dios mío, Justin quedara con la boca abierta, te ves hermosa.- llevó sus dedos a su boca e hizo un sonido, reí.

-Los zapatos me dan miedo, puedo morir con ellos.- me sostenía de una silla para no caer.

-Es fácil, camina segura con pasos cortos, si no te sientes segura parecerás bambi Emma.- me mostró como, se veía muy fácil.

-Debo irme, muchas gracias, esperó y le guste a Justin.- hice una seña de suplica.

-Asi será, a el y a cualquier hombre le gustara.- me guiñó un ojo, salí de su casa y tome un taxi, le dije el lugar al que debía ir. Me dejó frente a un edificio muy elegante.
Iba a entrar pero había un guardia, me acerque confiada.

-Señora Bieber.- dije orgullosa, el hombre vio su lista y me dejó pasar, camine unos pasos, había una puerta que me separaba de aquella fiesta. Tome aire y entre, había muchas personas, vi a Justin a lo lejos y me acerque nerviosa.

-Pasos cortos o pareceré Bambi, pasos cortos Emma.- me dije a mi misma. Me acerque a Justin, estaba hablando con un grupo de personas.

-Hola mi amor.- dije mientras le tocaba el hombro, el volteo pero al estar frente a mi me di cuenta que tomaba a una mujer de la cintura, tenía el mismo vestido que yo, las personas que estaban ahí nos miraban, ella era altísima, voluptuosa y morena. El mismo vestido, diferente cuerpo, me sentía muy apenada.

-¿Quien es ella?.- preguntó la morena con su chillona voz.

-Yo soy su...- me interrumpiste tomandome del brazo y me llevaste lejos de ahí, gracias a los zapatos no podia seguirte el paso. - Justin espera no puedo caminar.

-¿Quien mierda te manda a ponerte esos zapatos?.- te detuviste en seco. Mi brazo dolía.

-Justin...- me interrumpiste de nuevo con otro apretón.

-¿Por qué mierda estas aquí Emma?.- levantaste tus manos.

-Queria darte una sorpresa Justin, por eso estoy aquí.- baje mi cabeza. Tomaste tu cabello y lo estiraste.

-¿Vestida así?.- me señalaste de pies a cabeza.

-La mujer de aya esta vestida igual y para ti no es molestia.- alce mi voz un poco, me tomaste de nuevo del brazo y me pusiste frente a ti dandote la espalda.

-Solo mirala Emma, ella es modelo, ella sabe usar ese tipo de zapatos, tiene el cuerpo para usar ese tipo de vestidos y tu Emma ¡te ves ridícula por Dios!.-

-Justin hice esto por ti, no me trates así.- te alejaste un poco, camine unos pasos hacia ti pero mi pie se dobló y caí al suelo, arrastrando toda una mesa conmigo, toda la comida y bebidas que estaban sobre mi. Las personas reían y aún más las que platicaban anteriormente contigo, nunca había sentido tanta humillación en mi vida entera.

Un mesero me ayudó a levantarme.

-Señorita, dejeme ayudarla.- me dio una toalla y me limpie un poco con ella.

-Pagare por esto no se preocupe.- dije conteniendo las lágrimas.

Me quite los zapatos rápido y me tomaste de nuevo del brazo.

-Vamonos Emma.- salimos rápido, subí al auto y evite mirarte, por vergüenza no hable.
Todo el camino fue en total silencio, ninguno habló, mas tu molestia era evidente.

Llegamos a casa, subí a la habitación y tu ibas detrás de mi. Cerraste la puerta, me sentía como niña apunto de ser castigada.

-¿En que estabas pensando Emma? Ahora soy el hazme reír de toda la empresa, por esto no te llevó a reuniones, para evitar desastres como estos.- te acercaste a mi, con tus dedos golpeaste mi cabeza. -Usa la cabeza Emma, por Dios.

-Per...doname, debo ir a limpiarme.- mi voz entre cortada era más que obvia, entre a otra habitación, me derrumbe en el suelo y llore.

Agradecí al cielo por haber aguantado las lágrimas mientras estaba frente a ti.

Te podré permitir muchas cosas Justin pero Jamás, te aseguró que jamás me verás llorar por ti.

Me deshice de mi vestido sucio y la ropa interior, entre al baño de aquella habitación y me duché, quite toda mancha de comida, las toma que el agua no quita la humillación.

Perdoname Justin, por haberte arruinado la noche, por avergonzarte, por ni saber usar zapatos altos, por no medir las consecuencias, por haberte querido dar una sorpresa.
Perdoname por querer hacerte feliz.

Emma

Dos capítulos en un día!!!! Yo se que mes molesta la actitud estupida de Justin y la excesiva idiotez de Emma, pero esto no siempre será así, los personajes irán evolucionado. Por eso este muy al pendientes de la actitud de Emma y Justin. Esta semana no escribiré amores:'( hasta el Viernes, espero y entiendan, las amo*-------*

10 MG y 10 comentarios de aquí al viernes, si se puede más, que mejor. HAY APROXIMADAMENTE 40 LECTURAS POR CAPITULO Y SOLO 10 COMENTAN :( NO ES JUSTO...
BESOS*

InkSweet