Querido Justin...

Catorce

MARATÓN 1/4
24 de diciembre del 2015

Querido Justin:
Desperté y vi que aún seguías en la cama, pero de igual forma despierto, normalmente te habría dado los buenos días pero no lo hice, me levante de la cama y fui al baño a hacer mis necesidades, me di prisa para dejarte el baño disponible.

Abrí la puerta y estabas ahí frente a mi, mirándome, me hice a un lado y camine para salir de la habitación.
Llegue al piso de abajo y me senté en el sofá, encendí la televisión. Sólo había películas de navidad, especiales de navidad, todo era de navidad.

Escuche tus pasos detrás de mi, gire un poco para verte, te detuviste en seco frente a la mesa, miraste a todos los lados. Y después a mi.

-Emma.- dijiste en voz baja, totalmente pasiva.

-¿Qué quieres?.- respondí en seco, debo admitirlo se sintió bien devolverte una de muchas, tu cara de asombro no desaparecía.

-¿No desayunaras?.- te acercaste más a mi.

-Almorzare más tarde con Victoria, quedamos en pasar la mañana juntas ¿Por qué, hay algún problema?.- me puse frente a ti y me cruze de brazos.

-No, puedes hacer lo que quieras, sólo me pareció extraño no ver el desayuno, tengo hambre.- rascaste tu cabeza nervioso.

-Cada maldito día el desayuno esta en la mesa, cada mañana sin falta, ¿Para que? Para que tu me digas lo mal que sabe, no terminarlo o peor aún, ni siquiera comertelo. ¿Para que seguir desperdiciando comida?.- trate de decirlo lo más calmada posible, pero dude de eso.

Debido al enojo no pude darme cuenta si lo dije en tono pasivo o agresivo, por tu rígida expresión supongo que no fue nada dulce.

-Entiendo, no pasa nada, comeré algo en la calle, ya me voy cariño.- te acercaste a mi para besarme y me quite, dejando aquel beso que tanto soñé en el aire.

-Al igual que el desayuno, rechazaste muchos besos de mi parte.- dije sin mirarte, camine por un lado tuyo dispuesta a subir por las escaleras.

-¿Tampoco quieres besarme?.- levantaste tus manos un poco, me gire para quedar frente a frente.

-Tu no quisiste mis besos ¿Por que yo he de querer ahora los tuyos?.- en mi mente Turn Down For What sonó a todo volumen.

Tu cara era sería, pero con cierto semblante de tristeza. Asentiste un poco.

-Te llamaré más al rato para avisarte cuando ya este con mi madre, ¿Sigue en pie pasar esta noche juntos?.- tomaste tu maletín.

-Navidad es navidad Justin, no importa que tan molesta o decepcionada este de ti o tu de mi, te veo en la noche.- subí por las escaleras. Escuche tu auto alejarse de la casa.

Era difícil tratarte así, con indiferencia, con frialdad, una parte de mi se sentía culpable y la peor persona del mundo entero.

La otra parte me gritaba a gritos que eso y más te merecías, que esto no era nada comparado con lo que tu me has hecho tanto tiempo.

Tome los regalos, y los subí al auto, conduci hasta una pequeña tienda y pedí que los envolvieran, quede de pasar por ellos a las 5 p.m

Llame a mi madre y quede de llegar a su casa después de las 5.

Regresé a casa, hice mi rutina, mire el reloj, 3:21 pm. Era hora de arreglarme, abrí mi armario y busque varias opciones, decidí ponerme un vestido rojo ahumado, con medias negras y zapatos negros y un abrí del mismo color.
Me mire en el espejo, mi última navidad.