- ¡Yugi Mutou, baja ahora mismo! ¡¡Esto es el colmo!! - Gritó su madre a todo pulmón, mostrando lo enojada que estaba. Pero su hijo no hacia caso por la música de P¡nk que tenía a todo volumen; Funhouse. - ¡¡Yugi!!
Mientras tanto el tricolor estaba en su cama con los ojos cerrados mientras movía su pierna cruzada al ritmo de la música. Vestía solamente con un pantalón de mezclilla y el torso descubierto dejando a la vista uno de sus tatuajes. Había escuchado los gritos de su madre, y siendo sincero el no tenía ánimos de bajar para un sermoneo, seguro lo retaría nuevamente por lo que había hecho hace unas horas. No le importaba, pero su flojera le impedía moverse de su cama.
La puerta se abrió siendo azotada por una mujer demasiado furiosa, casi se podía ver que su pelo lanzaba llamas de furia.
El frunció el ceño por el escandalo.- ¿No te enseñaron a tocar antes de entrar?
- ¡Te estoy gritando desde hace 3 minutos y tu no vienes!
- No me da la gana bajar, ¿puedes sermonearme más tarde? - Bufó acomodándose más en la cama.
Su madre sin importarle que, desconecto la clavija del estéreo apagando la música que tenía su hijo, Yugi sobresaltado se puso de pie con la intención de reclamarle pero se calló cuando su madre le dio una bofetada en la mejilla.
- ¡Yugi, el padre de tu ex acaba de hablarme! ¿Sabes que me reclamó? ¡Rapaste la cabeza de Anzu y le tatuaste la palabra "zorra" en la frente"! ¡¡Me tienes harta con tus espectáculos!!
- ¿Y que querías que hiciera? Sí ella fue la zorra que me engañó primero, obviamente iba a vengarme. - Se encogió de hombros, como una forma de restarle importancia tomándose la mejilla entre su mano sobándola.
- ¡¡Pero es una mujer!! sea lo que sea que haya hecho no tenías derecho de hacerle tal cosa. ¡¡Tu comportamiento es inaceptable!!
- ¿Mujer? - Bufó cruzándose de brazos.- Ella era una zorra disfrazada de dama, debería agradecerme le hice un favor al mundo así sabrán la clase de tipa que es.
- ¡Lo que fuese, estoy hasta la ma...!
- Madre, no digas groserías. - Apareció detrás de ella la hermana menor de Yugi; Rebeca. Una chica de 10 años, rubia y ojos azules. Todo lo contrario a su hermano, era noble, gentil, una flor.- Nii-san.
- Rebeca, ¿no deberías estar estudiando? - Preguntó su madre poniendo las manos en su cintura reprimiéndola.
- P-perdón m-mamá...
- Déjala en paz madre, si no puede estudiar son por tus gritos.
- ¡Por tu culpa grito!
- Relájate, te podrían salir canas. - Se burló el tricolor mientras le indicaba a su hermanita menor que se sentara a su lado. Su madre salió de ahí soltando humos por los oídos, Yugi río divertido. Le gustaba hacer esto.
- Nii-san ¿Por qué eres así? - Su hermanita se sentó a su lado mirándolo con tristeza.
- ¿Viniste por eso o porqué quieres distraerte de tus deberes? - Enarcó una ceja cruzándose de brazos, naturalmente su hermanita era toda una niña genio a su edad, por la presión que le hacía su madre sobre su hermana de ser la mejor y no "terminar" como su hermano mayor. A el no le importaba, aunque tuviera su carácter el quería lo mejor para su hermana.
Rebeca siempre lo buscaba en su habitación para jugar con el o platicar, todo con tal de distraerse de los deberes. Yugi aceptaba jugar con su hermana, con ella no podía dejar de ser ese niño mal que todos conocían.
ESTÁS LEYENDO
Mi pequeño problema.
Tajemnica / ThrillerYugi Mutou es un chico problemático debido a una dura vida que empezó a llevar a sus 13 años, su madre harta de su actitud decide contratar a un psicólogo; Yami Atemu, . Pero el problema es ¿Podrá con esta difícil tarea sin mantener otra relación q...