Bárbara POV.
Acabamos de salir del ultrasonido y Maximiliano y yo nos enteramos de que íbamos a tener otra princesa. De vuelta a casa al ver por la ventana vi que no nos dirigíamos hacia nuestra casa, y hoy Isabel no tenía entrenamientos de fútbol así que le pregunte a Maximiliano para dónde íbamos.
-Cielo, ¿dónde vamos?
-A la tienda de armas – lo dijo como si fuera lo más normal del mundo ir a la tienda de armas.
-¿Por qué?
-Porque ¿de qué otra forma voy a ahuyentar los pretendientes de nuestras hijas?
-¿No crees que estás exagerando?
-No, nuestras hijas van a ser monjas.
-Cariño, creo que Isabel y esta pequeñita van a conocer a su príncipe azul algún día y me van a dar muchos nietos – dije mientras frotaba mi estómago y me imaginaba a mis futuros nietos
-NO – está es la primera vez que veo a Maximiliano tan serio con algo, al decir no, gruño como un oso y de la nada me puse a llorar
-Perdóname Bárbara, no quise gruñir solo que no quiero pensar en eso todavía -dijo mientras tenía una mano limpiando mis lágrimas y la otra en el timón
-Esta bien- dije mientras me veía al espejo
-Rayos se me corrió el maquillaje, tontas hormonas- dije mientras me estaba limpiando el maquillaje.Al llegar a la casa llame a Cecilia para contarle las buenas noticias, se oía muy emocionada y dijo que Inés y ella iban a planear un baby shower para mi niña, que todavía no sé como voy a llamar. Después de hablar con Cecilia, llame a Inés y también se emociono y cuando le conté los planes de Cecilia me dijo que la iba a llamar para que comenzaran a planearlo.
Cecilia POV.
-¡Samuel!
-¿Siiii?
-¡Ven un segundo tengo que decirte algo importante!
-¿sí amor?
-¿Adivina quién va a tener un bebé?
-¡Queeeeeee! P-pero si te compre tampones el mes pasado
-E-espera t-tu p-piensas que yo estoy embarazada? - dije mientras estaba muerta de la risa
-Si y esto no es gracioso Cecilia dijimos que no íbamos a tener más hijos
-Samuel me ofende que digas eso porque si estuviese embarazada no voy a matar a NUESTRO bebe solo porque no fue planeado
-¿Cómo que si estuvieses embarazada? ¿No lo estas?
-No, no lo estoy es Bárbara y es una niña, pero hoy duermes en el sofá
-¿Por qué?- dijo Samuel con cara de perrito regañado
-Porque dijiste que no querías tener otro bebé, yo sé que lo hablamos ¿pero si yo hubiera estado embarazada me hubieras dejado sola porque no era planeado?- dije con lágrimas apuntó de salir
-No, claro que no Ceci, yo te amo pero es que tener dos hijos es ideal y apenas tienes tiempo para mí, siempre llegas cansada del hospital y con otro bebé ya ni me voltearías a ver- dijo Samuel con tristeza.Después de escuchar a Samuel decir eso fui a abrazarlo y le di un beso en la mejilla, luego Samuel me abrazo por un largo tiempo hasta que me escuchó bostezar y me cargo hasta nuestro cuarto y me recostó en la cama. Cuando apago las luces, sentí que Samuel me sostuvo entre sus brazos abrazándome como si su vida dependiera de ello, y lentamente escuchando los latidos de su corazón, me iba quedando dormida.
Inés POV.
-¡Pablooo!
-¿Siii?
-Ven un segundo por favor
-¿Qué pasa?
-Adivina quién está embarazada
-¡De verdad! – dijo Pablo muy emocionado levantándome del suelo y dándome giros alrededor de la sala
-¿Pablo qué h-haces?
-Ohh, lo siento Inés no quise lastimarte ni a este pequeño o pequeña- dijo mientras frotaba mi estómago
-¿De qué hablas Pablo? Yo no estoy embarazada- al decir esto Pablo frunció sus cejas y podía ver que estaba decepcionado.
-La que está embarazada es Bárbara y es una niña
-Ohh, que bien- dijo intentando sonreír pero falló
-¿Por qué estás triste?
-Porque quiero tener otro bebé Inés, Amanda está creciendo y me gustaría tener otro pequeño con quien jugar
-Pablo ya hablamos de esto, no quiero tener más hijos con Amanda es suficiente, si quieres alguien con quien jugar juega con Lucky.
-Inés esto no es gracioso quiero tener otro bebé, mira solo intentemos una vez y si no funciona no te vuelvo a molestar
-NO Pablo mi decisión es final, además ser escritora y cuidar de un bebé recién nacido es difícil; no voy a poder dormir
-Pero lo hiciste con Amanda
-Eso era diferente porque cuando ella nació mi carrera todavía no estaba en su cúspide, pero ahora sí
-Sabes que Inés discutir contigo es inútil, eres muy terca y vamos a tener otro bebé te guste o no- al decir eso me levanto y me llevó alzada al nuestro cuarto ignorando mis suplicas y patadas
-Por favor Inés- dijo con una cara que no me podía resistir
-Esta bien pero solo una vez y si no funciona no me vas a molestar, ¿correcto?
-Correcto- dijo con la sonrisa más grande que he visto
ESTÁS LEYENDO
Una familia numerosa
HumorAlberto Cabrera, un hombre solitario y exigente pensó que con sólo chasquear sus dedos conseguiría una esposa, pero no fue tan sencillo. Myndí Amaya: la única mujer dispuesta a cumplir los altos requerimientos de Alberto. Una química que crecerá s...