Inés POV.
Al ver a los buenos especímenes no podía articular una sola palabra.
-Mucho gusto, mira nos presento: Alejandro, el padre de Santiago, Tomás, el padre de Nicolás y yo soy Mateo, Daniel es mi hijo- dijo un hombre de cabello negro y ojos cafés.
-Mucho gusto mi nombre es Inés, esta es mi hija Amanda y ellas son Isabel y Emma.
-Ya que estamos aquí, quieres ir a cenar con nosotros? – dijo Mateo
-Me encantaría pero no puedo – dije
-¿Por qué no? – dijo Mateo frunciendo el ceño
-Porque no puedo dejar solas a mis amigas
-Invítalas – esta vez fue Alejandro el que habló
-Si son tan bonitas como tú entonces quiero conocerlas – dijo Tomás
-Gracias – dije un poco sonrojada. Llamé a Cecilia a decirle que tenia una sorpresa para ella y para Bárbara, tuve que convencerla mucho porque al parecer Samuel, Maximiliano y Pablo también tenían una sorpresa y no fue agradable. Al fin dijo que si y a los pocos momentos estaban aquí. En el momento en que Alejandro vio a Cecilia supe que lo tenia comiendo de la palma de la mano, al igual que Bárbara con Tomás, ella también lo tenia comiendo de la palma de su mano.
-Mucho gusto, soy Cecilia, Ella es mi hija Emma y el es mi hijo Tyler.
-Yo soy Bárbara, ella es mi hija Isabel y pues esta pequeñita se va a llamar Luciana – dijo frotándose la pancita.
Durante la cena se formaron futuras parejas o al menos en mis sueños, Emma estaba sentada junto a Santiago, Isabel junto a Nicolás y Amanda junto a Daniel, y los hombres no nos quitaron la mirada durante toda la cena, Alejandro con Cecilia, Tomás con Bárbara y Mateo conmigo. Al terminar la cena los hombres nos invitaron a la playa con ellos mañana y antes de que yo pudiera decir algo Cecilia dijo que si. Nos fuimos hacia nuestro cuarto y al entrar caímos muertas en nuestras camas.
-¿Qué les pareció mi sorpresa? – dije en tono alegre.
-No se Inés, creo que es muy pronto para salir con otros hombres – dijo Cecilia con un tono depresivo.
-Ceci tiene razón Inés, es muy pronto para otra relación hoy nos enteramos de su engaño, además no creo que estoy lista para superar a Maximiliano – dijo Bárbara frotándose su pancita.
-No les estoy diciendo que empiecen una nueva relación, solo es una salida con unos amigos – dije.
-Pero – Cecilia comenzó a hablar pero fue interrumpida por Emma.
-Mami, tengo sueño- dijo frotándose los ojos con sus pequeñas manos.
-Ponte la piyama, lávate los dientes y duérmete hija – dijo mientras le acariciaba la cabeza.
-Cuando termine te acuestas conmigo, porfis – dijo poniendo su cara de perrito regañado.
-Claro que si, después de acostar a tu hermano – al decir eso Bárbara y yo mandamos a nuestras hijas a ponernos las piyamas y a lavarse los dientes, al parecer todas nuestras hijas se pusieron consentidas porque todas querían acurrucarse con nosotras, creo que extrañan a sus padres. Luego de un largo día nos dormimos junto a nuestras hijas abrazándolas fuerte como si fueran a desaparecer.
Samuel POV.
24 horas, 1.440 minutos y no se cuantos segundos, sin MI Cecilia, la extraño mucho. Me gustaría que estuviera aquí para abrazarla, decirle cuanto la amo y llenarla de besos, nunca me había sentido así antes es como si te quitaran tu fuente de oxígeno, pero también extraño a MIS hijos. Extraño la suave voz de MI Emma, la risa de MI Tyler y los besos y caricias de MI esposa, no puedo dejar de pensar en MI familia y cuando vi la foto que hizo que MI Ceci se fuera de mi lado me partió el corazón que creyera que yo fuera capaz de traicionarla de esa forma. Para mi no hay otra mujer y MI Ceci es la única que me hace feliz. Me quede dormido abrazando a mi almohada como si fuera MI esposa y pensando en los buenos momentos que pase con MI familia, voy a ir por ti Ceci y nadie te va a volver a separar de mi.
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Una familia numerosa
HumorAlberto Cabrera, un hombre solitario y exigente pensó que con sólo chasquear sus dedos conseguiría una esposa, pero no fue tan sencillo. Myndí Amaya: la única mujer dispuesta a cumplir los altos requerimientos de Alberto. Una química que crecerá s...