2: La habitación

10K 451 190
                                    

La tripulación se levantó como de costumbre y fueron a desayunar, Sanji hizo muchísima comida pero no sobró nada porque como de costumbre, Luffy, se comió todo.

-Bueno, hoy otra vez haremos el sorteo y ayer me tomé la molestia de alquilar unas habitaciones para pasar la noche. Bueno, pues esta vez se quedan... ¡Brook y Ussop! -dijo Nami
Los dos nombrados se desilusionaron y los demás todo lo contrario.

-He cogido dos habitaciones, una habitación tiene 4 camas y la otra 3, he conseguido una rebaja del 80% con el chico del hotel.

-(Lo que ha tenido que sufrir el pobre chico)-dijeron todos a lo bajo

-¡A callar! Bueno pues haremos un sorteo para la distribución de las dos habitaciones. Bien pues... en la primera habitación: Yo, Sanji, Chopper y Luffy. En la segunda: Zoro, Franky y Robin. ¡Disfrutad la tarde!

Cada uno fue por su lado y quedaron a una hora. Robin decidió mirar las mejores tiendas de aquella isla y compró un par de libros, sin embargo, no encontró un libro que llevaba bastante tiempo buscando y pensó que lo encontraría. Mientras, Zoro buscaba un bar para comprar sake pero se perdió y después de una hora, encontró uno. Y por último, Franky compró mucha cola (y eso que ayer había comprado) y se quedó toda la tarde en el bar que había quedado con Zoro y Robin por la noche.
Cuando llegó la hora acordada, Robin fue al bar donde se encontraba Franky.

-Hola Carpintero-san ¿Aún no ha llegado Zoro?

-Hola Robin, se ha SUUUUPER perdido.

-Tendré que ir a buscarlo, ahora vengo con él.

Robin dió una vuelta por la isla y lo encontró como de costumbre, perdido.

-Espadachín-san ¿no te habrás perdido no?

-No, estaba dando una vuelta mujer

-Bueno... si no necesitas mi ayuda... me voy, haber si encuentras el bar.

-Espera mujer, estoy un poco perdido.
Se fueron al bar los dos juntos y se acercaron a Franky. Zoro llevaba una bolsa llena de sake.

-¡Por fin! ¿Nos vamos al hotel?

-Claro -dijeron a la vez Zoro y Robin.

Llegaron al hotel y se fueron a la habitación número 12, era bastante amplia: tenía dos cuatros de baño, con dos habitaciones y una sala, el problema es que... solo había dos camas.

-Se supone que tiene tres camas

-Se habrán equivocado Espadachín-san

-Robin, te dejaría dormir en mi cama pero seguramente no entremos los dos, salvo que quieras dormir encima mía. -Y rió

-Gracias Carpintero-san pero dormiré con el Espadachín-san que me lo ha pedido.

Al escuchar eso, Zoro se asombró: él nunca había dicho eso, aún así, no protestó.

-Que tengais una SUUUPER noche. Me voy a mi habitación.

-Igualmente Franky-dijo Zoro.

Los dos se fueron a la habitación y Robin se puso en ropa interior, el peliverde estaba ruborizado, se quitó la ropa en sus narices y le dió igual... él no sabía si quedarse en ropa interior o dormir así, ante la duda se quedó con la mayor parte de la ropa puesta y se metió en la cama.

-Espadachín-san, ¿no vas a quitarte más ropa? Vas a tener calor

Zoro no podía estar más avergonzado, respondió un ligero "si" por decir algo y se quedó en ropa interior al igual que Robin y se metió en cama de nuevo. Ella se acercó a él y puso su cabeza en sus hombros y lo abrazó.

-Oí... Robin...¿que haces?

-¿Acaso no puedo?

-No...si... no se -estaba tan nervioso que no sabía que decir.

Acarició sus abdominales que estaban muy duros, a Zoro le recorrió un escalofrío, pero era algo bueno. Ella decició ir un poco más lanzada y se situó encima de él y acercó sus labios. Zoro empezó a ponerse muy nervioso y la besó. Ella correspondió ese beso, pero al acabar, se sacó de encima y se puso como antes, al lado de él.

-¿Me has besado Espadachín-san?

-Estabas provocándome...

-Yo no estaba haciendo nada

-¿Estás jugando conmigo mujer?

-Tu me has besado, yo no hize nada...

Zoro no podía estar en una situación más vergonzosa, no sabía que hacer o decir pero aquella mujer estaba jugando con él claramente. Pero él también podía jugar.

Robin se quedó dormida al poco rato por el cansancio. Zoro quiso tomar de nuevo su venganza: se acercó a ella y con delicadeza la acercó a su cuerpo, empezó a besarla por el cuello y luego le agarró los pechos con algo de fuerza. Ella despertó, Zoro rápidamente se apartó y esta vez él se hizo el dormido.

-Espadachín-san, ¿que estabas haciendo?

-Mujer, ¿por que me despiertas?

-¿Me has...?

-No hize nada, solo quiero dormir.

-No deberías jugar conmigo Espadachín-san

-Ni tu conmigo mujer.

Zoro sonrió, si quería jugar, eso harían.

Nuestro futuro (ZoRobin) (LuNa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora