Intensamente: Una nueva etapa, un nuevo desafío

Capítulo 8: Granos... ¡NOOOO!

Durante los días que siguieron, a Riley le molestaba una grasa que tenía en la nariz y en la frente.

-¡Qué asco! ¡Otra vez!-Solía decir Desagrado, y subia una palanca de la consola, haciendo que Riley se lave la cara por tercera vez en el día.

Un día Riley durmió la siesta, como siempre. Cuando despertó, fue al baño y ahí...

-¡Ahhhhhhh!- El grito de Desagrado despertó a todos, haciendolos correr a la consola.

-¿Qué pasó?- Preguntó Alegría preocupada.

-¡UN GRANO! ¡En la frente!

A todos se les cambió la cara.

-¿Para eso nos despertaste?- Preguntó Furia.

-¡Ustedes no saben! Un grano es LO PEOR DEL MUNDO.

-¿Quéee? ¿Un grano? ¡Nooooo!- Temor tambien manejó la consola.

-¡Ay no! ¡Un grano no! ¡Nos veremos horribles! ¿Qué dirá Leo?-Amor se desesperó también.

-Ay, que exagerados que son, chicos, no creo que sea para tanto...-Alegría mira la Pantalla-Ay no...

El grano que tenía Riley en la frente eran de esos suficientemente enterrados y que duelen al tocarlos. Estaba rojo, y era un asco verlo.

-¡Ya sé! ¡Agua con jabón blanco seca la piel y los granos!-Dijo Tristeza- ¡Prueba con eso!

-Ok-Dijo Desagrado. Presionó varios botones, haciendo que Riley se lave con agua y jabón blanco de glicerina esta vez.

-El grano se ve un poco menos rojo- Dijo Desagrado. Todos suspiraron de alivio.

-¿Pero por que nos tocó los granos a nosotros? Entre tantas personas en el mundo, ¡A Riley!- Amor estaba desesperada.

-Bueno, un grano es lo normal, a muchas les pasa...

-Si claro, a tooodas nuestras amigas tienen granos.-Dijo Desagrado sarcástica.

-¿Y si le decimos a mamá?-Preguntó Tristeza.

-Buena idea- Dijo Temor.

De repente, Riley fue hacia mamá. Que estaba en la cocina.

-Buenas tardes Riley... Ay no... ¿Es un grano?

-Sí, y quiero sacármelo.

-¿Duele?-Mamá le toca el grano.

-Sí.

-Ok, no se puede hacer nada al respecto, pero si se puede prevenir que te salgan más.

-¿Cómo?-Riley tenía un brillo en sus ojos.

-Voy a la tienda. No abras a nadie, ¿Ok?-Mamá le da un beso a Riley y sale de casa.

-¿Qué será eso que dice mamá?-Dijo Alegría.

-No se, pero espero que sea algo bueno- Dijo Amor.

Luego de un rato, mamá vuelve a casa con una bolsita pequeña.

-Toma- Le dijo a Riley dándole un pote con líquido- En un astringente. Cada vez que tengas grasa en la piel, te la pones y ya no la tienes más.

-¡Genial!- Dijo Riley.

-Y también toma esto- Le da un dentífrico- Ya encontré la cura para tu grano. Ahora vs al baño, y te pones esto encima del grano. Te lo va a mejorar, o sea, lo vas a hacer desaparecer.

-Gracias, mamá- Riley le da un abrazo a su mamá y se va corriendo al baño.

Al día siguiente, Riley fue al baño asustada. Pero cuando se vio al espejo...

-¡Oigan, el grano desapareció! ¡Y no hay más grasa!-Desagrado estaba muy aliviada.

-¡Ay qué alivio!- Alegría hizo que Riley sonriera.

-Gracias Tristeza. Gracias a tu idea, Riley se ve hermosa otra vez- Le dijo Amor a Tristeza.

-Gracias- Dijo Tristeza. Y agregó:- Es que las mamás saben mucho de estas cosas.

-Tienes toda la razón- Dijo Desagrado.