Capítulo 24: El descubrimiento (Parte 2)

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Desagrado no durmió muy bien esa noche. No sabía si mantener el secreto, echárselos en cara a ellos dos, o no contar nada... Es que el hecho de que Placer y Amor salieran era algo muy grande, algo más que como un simple secreto. Era una relación amorosa, que duró bastante tiempo.

A la mañana siguiente, Desagrado salió de su cuarto, y vio a Placer y Amor charlando tranquilamente con Alegría y Temor... "¿Cómo pueden estar tan tranquilos?" Se preguntó Desagrado. "Ocultan algo demasiado grande, ¿Cómo pueden dormir en paz?"

Los demás también salieron de sus habitaciones.

-Desagrado, ¿Estás bien?- Le preguntó Furia.

-¿Eh? ¡Ah! Si, lo estoy, ¿Por qué?- Dijo Desagrado.

-No se... Tal vez porque estás muy quieta mirando hacia allá...

-Ah, no, no es nada, solo pensaba un poco.

"Sí, creo que ya se lo que haré" Se dijo ella.

Durante todo el día, los estuvo mirando, a veces muy fijo, a veces con el rabillo del ojo. Quería descubrirlos. Gracias a esto, estuvo muy despistada. No manejó muy bien la Consola, y Riley hizo algunas cosas fuera de lo normal:

-¡Desagrado!-Dijo Alegría- ¡No puedes hacerle decir algo así a Riley!

-¡Ay no!- Temor empezó a manejar en el lugar de Desagrado- ¡Ella se enojó con Riley!

-Uy... Lo siento mucho chicos- Dijo Desagrado.

-Desagrado, hiciste que Riley dijera que odia las chicas muy maquilladas, ¡No puedes decir una mentira así! ¡Y menos en frente de Helen!- La retó Alegría.

-Lo sé, y lo lamento mucho.

- ¡NO!- Gritó Temor.

-¿Qué pasó?- Dijo Alegría.

-¡Hicimos llorar a Helen! ¡Ahora seguro les dirá a las demás!

-¡No!- Tristeza empezó a manejar la Consola junto con Temor. Riley se sentó y empezó a lagrimear.

Desagrado se fue al rincón de lectura, se sentó en una silla, acomodó su lazo del pelo y apoyó su codo en la mesa.

-Desagrado, hablo en serio, ¿Estás bien?- Le preguntó Furia.

-Sí, lo estoy, ya deja de preguntármelo.

-¡Es que me preocupas!

-¿Tú? ¿Preocuparte?

-Es que estás... Demasiado despistada, demasiado desconcentrada... Como si te estuvieras concentrando en algo, no en cualquier cosa, sino, en algo muy delicado y grande...

Desagrado se sorprendió, y se ruborizó. Furia la estaba descubriendo. No quería que Furia supiera que estaba mirando a Amor y Placer.

-¿Estás insinuando que yo estoy haciendo algo malo, y que por eso estoy así?

-¿Qué? ¡No! Solo decía...

Desagrado lo fulminó con la mirada. El entendió que ella estaba demasiado irritada. Se fue, un poco molesto.

Ella dio un gran suspiro de alivio. Y siguió observando a Placer y Amor, que por cierto, estaban hablando muy sonrientes, uno al lado del otro, en la Consola.

Y los siguió mirando fijamente a ambos. Un acto bastante acosador, a decir verdad. Pero nadie se dio cuenta. Por fortuna de ella. Pero, claro, las sospechas siempre están:

Intensamente: Una nueva etapa, un nuevo desafíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora