"¿La dama salvadora va a besar al príncipe salvado?" preguntó Kier. "O mejor, ¿el príncipe salvado va a besar a la estúpidamente atractiva dama?"
Ina puso su bolsa en la mesa de Kier, buscando algo desesperadamente. No contestó.
"En serio, estúpidamente atractiva dama. Necesito su ayuda."
"Esperame. No sé si tengo los ingredientes para desparalizarte."
"Eso puede esperar. Quizás hasta quieras mantenerme paralizado si no hacemos algo con respecto a mi nombre. Mis ojos son los más lindos del reino, en caso de que no lo hayas notado."
Ina dejó de buscar en su bolsa para ver a Kier. Sus ojos brillaban verde. Ella no lo había notado.
"Valientes y guapas damas han viajado largas distancias para ganarse estos ojos, ¿sabes? Soy un príncipe en peligro muy codiciado."
"Lo siento." Ina se apuró para poner ambas manos a los lados del rostro de Kier. "Lo siento. No vi-"
"Susúrreme al oido, dama. Deme palabras cargadas con miel de amor improbable a primera vista y miéntame al decir que viviremos juntos y felices para siempre."
Kier... o era Kyer? El Mago trató de enfocarse en Ina, pero sus vista estaba nublada.
Ina lo besó. El Mago cerró sus ojos. Los susurros en su cabeza disminuyeron, pero no se fueron. La Druida terminó su beso y se alejó lentamente del Mago. Kier abrió sus ojos, pero seguían brillando.
"Kier, ¿qué está pasando?" Ina sintió su esperanza siendo robada por la desesperación.
"Hay susurros en mi cabeza convirtiéndome en el villano." El Mago respiraba agitadamente. Ina sentía el pecho de Kier moverse contra el suyo. "Ya hay un villano. No puede haber dos. ¿Es mi hermano el héroe? ¿Debería haber una 'i' en vez de una 'y'? No lo recuerdo. Lo Verde me está diciendo que pudo haber hecho algo cuando la dama roja me capturó. La otra dama roja. No tú. Creo que tu eres la dama escarlata porque suena no malvado. Tú eres buena. Así que dime si es una 'i' o una 'y'."
De alguna forma, todo eso tenía sentido para Ina. Y eso la reconfortó. Tanto que sonrió al moverse para poner sus labios cerca al oído de Kier. Abrazó su cuello. Quería que todo su cuerpo estuviera en contacto con el suyo.
"Es una 'i', bufón," le susurró. "La dama escarlata vino a salvar al príncipe Kier con una i. 'Y' no hubiera salvado a Irel. Tú sí. Lo verde es la oscuridad, y la oscuridad trata de corromper a nuestro héroe."
"Soy el príncipe," dijo Kier. "No soy el héroe."
"No me importa," susurró Ina. Apretó aún más a Kier en sus brazos. "Me gustan las 'i's. No las 'y's."
La Druida presionó sus labios contra los del Mago de nuevo. Rindió su conciencia por completo al beso ya que sintió la respiración de Kier alentarse.
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Palabras y Hierbas 6
FantasiAl concluir sus tratos con los Dragones, Kier e Ina regresan a su bosque, y la cuestión de qué hacer con Irel debe ser resuelta. Ninguno quiere apresurar el tema, pues Mago y Druida quieren cosas distintas. No obstante, la llegada de la madre de Ina...