Pretty Harry - LARRY

Capitulo 6

Al salir del ascensor, cruzó el pasillo hasta el vestíbulo y se plantó ante el mostrador. Su secretaria le señaló hacia los sillones que estaban situados a la derecha y él se quedó de piedra al ver a Harry sentado allí. El muchacho parecía estar leyendo un periódico algo arrugado.

Louis lo miró pestañeando, sin poder creer lo que estaba viendo.

- ¡Genial!- Exclamó echando chispas por los ojos- ¡Aquí está la guinda del pastel!

Harry levantó la vista, como presintiendo que estaba siendo observado y sonrió al ver a Louis a pocos pasos de él, pero la sonrisa se le congeló en la cara al percatarse del brillo asesino de sus ojos.

- ¿Qué coño estás haciendo tú aquí?- bramó Louis avanzando hacia él.

El muchacho pareció encogerse en el sillón en el que estaba sentado. Bajó la mirada sorprendido y atemorizado por la reacción del hombre. No sabía qué era lo que había esperado que él le dijese cuando lo viera allí, pero nunca se imaginó que el hombre lo recibiese de aquella manera tan amenazante. ¿Acaso iba a golpearlo delante de la mujer del mostrador?

- S...siento m...mucho m...molestarle, señor Tomlinson- tartamudeó Harry sin atreverse a levantar ni la vista ni la voz- S...solo quería hablar con usted.

- ¡Te dije que te vería el domingo!- le gritó levantando el puño. Harry se encogió aún más- ¿Cómo me has encontrado? ¿Cómo has sabido que trabajo aquí?

Harry levantó el periódico y le mostró el titular y la foto de la primera página. Louis, se lo arrebató de un manotazo, arrojándolo a un lado y cogió al muchacho por la camiseta, alzándolo del sillón y levantándolo hasta quedar cara a cara con él.

- ¿Qué es lo que quieres de mí, puta?- siseó.

- Tengo un amigo que necesita ayuda- le explicó el muchacho sintiendo cómo sus ojos se humedecían.

- ¿Y has venido a pedirme dinero? ¿Intentas chantajearme?

- N...no es eso, se lo aseguro señor Tomlinson- le respondió Harry con los ojos abiertos por la sorpresa- Yo jamás haría algo así.

- Entonces ¿Qué es lo que quieres?- lo sacudió- ¡Respóndeme puta!

- ¡Louis Tomlinson!- gritó una voz tras él.- ¡Suelta a ese chico ahora mismo!

El aludido giró la cabeza sólo para encontrarse a su abuelo y a su futura novia detrás. Ambos habían bajado tras él: por lo visto la discusión que habían tenido arriba no había terminado sólo porque los habían interrumpido. El maldito perro de Eleanor aún seguía ladrando y Louis sintió la urgente necesidad de cerrarle el hocico de un puñetazo: tan alterado estaba. ¿Es que no podían dejarle vivir en paz?

Su abuelo se acercó a él y puso una mano firme en su hombro.