Iridescent [Bucky Barnes]

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Arrastraba sus pies por el pasillo de Saint Jude con mucho dolor en sus músculos. Aunque Howard Stark había prometido un ambiente relajado y sin peligros, no había dicho nada sobre cuanta energía necesitaba y tampoco había pensado en cuanto dolería su cuerpo luego de eso.

Evitó un par de compañeras y subió directo a su habitación, no tenía ganas de hablar con ninguna de ellas. Dejó su chaqueta sobre la silla con movimientos suaves e intentó estirarse a un lado de la cama. Sus huesos sonaron y sus músculos se relajaron brevemente. Tomó las cosas que necesitaba antes de dirigirse al baño.

La ducha tibia la ayudó a poner sus ideas en orden, analizando brevemente sus posibilidades y los distintos lugares a los que podía huir. Carter le había dicho que los visitara durante la semana con su plan ya trazado, para darle el dinero y la documentación para irse de allí.

Debía seguir en contacto con ella y con Shield, en caso de ser necesaria su ayuda una vez más, o en caso de que ella necesitara seguir viajando. No le había parecido tan malo aceptarlo después de todo, si tenía suerte, no la necesitarían más, por lo que podría seguir huyendo gracias a ellos.

Salió de la ducha sintiéndose mucho más relajada, pero no menos triste. Tomó las cosas que había llevado y volvió a su habitación. Una brisa fresca le llegó a la piel recién lavada y la hizo levantar la cabeza, centrándose en la ventana que estaba abierta. Miró el cristal un poco curiosa, no podía recordar si la había cerrado anteriormente, por lo que ahora no sabía si había sido ella.

Cerró sus manos en puños mientras sentía la puerta tras ella cerrarse lentamente, y una suave risa surgía desde el interior del pecho de la castaña.

Melody giró sobre sus talones, conteniendo sus palabras y cualquier pensamiento mientras ella cerraba la puerta con exagerada lentitud. Sabía que su rostro mostraba toda la ira y el dolor de aquellos días, y no pensaba ocultarlo.

Una vez la puerta se cerró, la castaña se cruzó de brazos con una sonrisa soncarrona. Tenía una ceja en alto, parecía preparada para preguntar algo que sólo la molestaría más, pero pronto centró sus ojos verdes en los collares que colgaban de su pecho.

Melody fingió no notarlo, intentó no demostrar ningún sentimiento por el collar, sino Catherine sabría que significaba algo para ella, y sólo complicaría más la situación. Ladeó la cabeza esperando alguna reacción de parte de su hermana, pero ella sonrió aún más.

—Hace tanto tiempo no te veía —habló alejándose de la puerta. Inconscientemente la pelirroja retrocedió, pero su hermana sólo avanzó hasta sentarse en la esquina de su cama.

—Sabía que pronto terminaría mi momento de paz —murmuró caminando lentamente hacia el armario ubicado a un lado. No tenía nada que buscar, pero simuló encontrar algo de interés una vez que abrió uno de los cajones, pero luego lo cerró sin hacer nada más. Se giró y miró a su hermana observando todas sus pertenencias.