Solo un poco de mí

Dentro de mis sueños

Buenos días, sé que debería decir ''Buenas tardes'' por la hora, pero cuando digo ''Buenos días'' me refiero a que deseo que todos tengan un buen día en general, no limitándome por un horario. Hoy compartiré con ustedes un sueño que tuve hace poco, y al mismo tiempo algo que siempre he querido hacer que está relacionado con el sueño. El sueño comienza así, lo primero que recuerdo es a mi viéndome desde una altura media, como si fuera una especie de película o documental grabado desde un lugar un poco lejano y medianamente alto, en la escena estaba yo caminando hacia adelante, con una mochila de campaña en la espalda, un caño en la mano y ninguna preocupación, total libertad y felicidad. El lugar por donde caminaba era una especie de sendero, una ancha calle pavimentada, rodeada de álamos verdes y brillantes, un poco de humedad en el ambiente, pero con un sol cálido cubierto por la sombra de los relucientes álamos, era sin duda alguna un paisaje hermoso, tranquilo y libre. Aquel sueño me hizo recordar mis ganas por ir a mochilear en algún verano cercano, de verdad quiero hacerlo, debe ser una experiencia inolvidable y placentera, tan solo imagina lo siguiente: Tú con un par de buenos amigos, dinero suficiente para comprar comida, para pagar algún pasaje, comprar uno que otro recuerdo y unos 60 gramos de buena yerba para el camino. De tan solo pensarlo me dan ganas de salir a mochilear mañana mismo, espero y ese día llegue pronto. Con mis amigos tenemos pensado mochilear hasta Bariloche, o algún otro lugar que tenga muchos lugares verdes y mucha naturaleza en el camino, así valdría la pena toda la yerba que andaremos trayendo, después de todo la yerba hace todo más divertido y hermoso, imagina ver todos esos lugares nuevos completamente drogado, solo escuchando esa naturaleza tranquila, ver ese paisaje colorido y llamativo, un verdadero placer de la vida a mi parecer. Continuando con el sueño, luego de esa escena se empieza a escuchar una melodía, un bombo y caja, luego unas cuantas voces, ya comenzaba el recital, un recital totalmente gratuito, con un público esplendido, claro, de quién más estaría hablando, de nadie más que de aquellos árboles que nos observaban con atención, escuchaban cada frase, cada rima que nuestras cuerdas vocales expulsaban con poder y simpleza, todo un espectáculo para nuestra querida naturaleza. Luego de estar un rato cantando con mis amigos nació el silencio, aquel silencio solo duro un par de segundos, no era más que una corta introducción la cual dio paso al viento, una ligera brisa que hizo mover las ramas de los álamos, luego de eso vino el sonido del viento rozando las hojas, era como si el viento y los árboles nos estuvieran aplaudiendo por el espléndido recital que le regalamos en ese momento. Es impresionante como a veces la naturaleza te premia con cosas tan simples y sencillas, pero que a su vez llenan de una manera inimaginable tu corazón, espero que aquel sueño se haga realidad, sería bastante agradable sentir como la naturaleza te aplaude por cantar lo que sientes cada momento.

Tenía ganas de contarles mi sueño, recuerden si sueñan algo que les guste, busquen ese sueño, conviértanlo en realidad, que no quede en solo un simple sueño más que se suma a los miles de sueños sin cumplir. Ve por ese sueño, con esfuerzo y voluntad lo alcanzaras. Que nada te limite, solo tú puedes decidir tus propios límites.

Me despido por hoy, espero y tengan una linda tarde, nos estamos leyendo.