Capítulo dedicado a @maribuuu1803 y @micheliithas01
Alina.
Muchas veces escuché como los chicos se calentaban con una chica y luego tenían que tomar una ducha fría para calmarse, siempre pensé que sólo a ellos les ocurría, hoy me di cuenta que a nosotras también o por lo menos a mí.
La temperatura en mi cuerpo ascendió varios grados, la situación se salió de control, no sé si pueda mirar a los ojos a Leo de ahora en adelante, estoy muy apenada, como disfruté sobre él y dejé ver un lado de mí que ni siquiera yo sabía que tenía, aún me tiemblan las rodillas, el calor que emanaba su cuerpo me descolocó, el contacto tan íntimo que sentía, un raro baile que monté en sus piernas, diablos, diablos, diablos.
El agua fría impacta contra mi cuerpo, no sé por cuanto tiempo he estado aquí, pero mi piel empieza a erizarse así que salgo de la ducha cubriendome con una toalla.
No quiero estar en esta casa ahora, todo me recuerda a él, la cocina, el fregadero, el comedor, la sala, el sofá, bendito sofá.
Me visto con un pantalón verde oliva y una camiseta de manga corta blanca, el invierno llega a su fin pero las noches aun permanecen frías, calzo unas zapatillas negras y paso una bufanda animal print de cebra por mi cuello.
Seco mi cabello y lo ato en una coleta baja, está corto así que no es mucho lo que puedo hacer con él.
Guardo los libros que tengo que repasar para mañana en mi bolso y salgo rumbo al club.El club no ha abierto, las chicas practican su rutina para hoy y los chicos empiezan a organizar las mesas, los saludo a todos y subo al apartamento de mi madre a verla.
Ella está sentada en su cama con algunos papeles alrededor leyendo unos documentos cuando llego, está en pijama, su cabello atado en un gran moño desordenado, sin maquillaje puedo apreciar algunas arrugas en su rostro y el cansancio se ve en sus ojeras, me duele verla así.
Ella no nota mi presencia hasta que hablo.
-Hola, mami -dejo el bolso a un lado y me acerco a ella.
-Cariño, no pensé verte tan temprano -saluda con una gran sonrisa y veo como parpadea rápidamente para ocultar... ¿lágrimas?
-Estaba aburrida en casa y quise venir a verte antes de trabajar -nos abrazamos y puedo ver más de cerca sus ojos enrojecidos- ¿Qué tienes, mamá?
-Nada, linda, sólo veía unas facturas y el estado de mis cuentas -oculta los papeles en una carpeta y los guarda- ¿Cómo te fue hoy?
-Ma, no evadas mi pregunta, puedo ver tus ojos, ¿acaso hay problemas económicos? -le pregunto y trato de echar un vistazo a esos dichosos papeles.
-Oh, no, estamos de maravilla, sabes que las ventas han aumentado, y las fiestas privadas nos dejan mucho dinero, es sólo que, veía tus fotos de niña -busca entre la pila de papeles y me muestra un álbum de fotos- ahora has crecido y me da nostalgia recordar aquellos tiempos, vamos a verlas.
Me lleva hasta el sillón y me enseña las fotos, hay unas de cuando era bebé, una en el jardín de niños con Isaac, una donde Andrew me lleva sobre sus hombros en mi cumpleaños número 5, otra con las bailarinas del club, todas ellas ya se fueron pero las recuerdo con cariño, una en mi fiesta de 15 al lado de todos, con Carl y Stefi, hay un montón de fotos, no puedo creer como las ha conservado por tanto tiempo.
Seguimos viendo las fotos, nos reímos de los cambios de todos, como Joe ha perdido la mayoría de su cabello hasta que una foto llama mi atención.
Estamos Nick y yo en mi fiesta de 15, me detengo a observarla, él se ve apuesto, con sus 25 años encima, ambos sonreímos a la cámara, o más bien reímos, recuerdo que antes de que tomaran esa foto me susurro que estaba hermosa, se distinguen mis mejillas sonrojadas y el agarre que tiene en mi cintura, estaba radiante ese día, con un hermoso vestido y él con una camisa de mangas largas aunque recogida en sus codos y pantalón clásico, mi madre lo obligó a vestirse así, pues él odiaba esa ropa, prefería los vaqueros y camisetas, ahora entiendo porque me gustaba tanto, él era guapísimo, maduro, y me hacía sentir como la única chica para él.
-Ambos se ven hermosos, no puedo creer lo que te hizo -dice mi madre despertandome de mi ensimismamiento.
-Yo tampoco lo puedo creer, aunque estábamos algo ebrios y ahora que lo pienso nunca le dimos la oportunidad de defenderse -le respondo a mi madre recordando ese día, estaba asustada y todos se le fueron a golpes.
-Alina, si no es porque te vas de ahí, quien sabe que hubiera pasado, y el alcohol no justifica sus actos, no lo defiendas ahora, además él tenía otra novia y nunca más hemos sabido de él.
Omito todo lo que dice mi madre.
-¿Qué crees que habrá sido de él, mamá? -le pregunto.
-No tengo idea, cariño, nunca nos contó de su familia, solo que huyó de casa y buscaba empleo -contesta- ah y su nombre, Nick Lanham.
Me quedó pensando en los momentos buenos a su lado.
-Me llevaré esta foto -le digo a mi madre mientras la saco del álbum pero mi madre me detiene.
-No creo que sea bueno que te la lleves, ¿por qué no la tiramos?, es mejor, hay que olvidar el pasado.
-Me la quiero llevar -termino de sacarla y busco mi bolso para guardarla.
-¿Olvidas lo que te hizo? -dice mi madre en un tono seco.
Me giro para enfrentarla.
-No lo olvido, mamá, pero tampoco olvido los buenos momentos que pasamos juntos, mira nuestras risas, era feliz, y antes de ser mi novio o lo que sea que eramos, fue mi amigo, mi compañero, mi maestro -suelto todas esas palabras sin pensar, ¿Qué problema hay con que me lleve la foto? Es un simple recuerdo, no voy a llorar sobre ella todas las noches o a buscarlo por todo el mundo.
-Eso lo entiendo, pero él te metió al alcohol y casi abusa de ti -exclama levantando la voz.
-Eso lo sé, pero es una simple foto, quiero conservarla, conmigo, fue mi primer amor y sí, cometimos errores pero él se fue, los años han pasado -explico antes de guardar la foto en mi bolso.
-Está bien, es solo que me preocupo por ti, mi Lina -se acerca y extiende sus brazos hacia mí.
La abrazo y entierro mi cara en su cuello.
-No discutamos más, llévate la foto y sabes que estoy aquí para lo que necesites, mi niña -susurra frotando mi espalda.
-Te quiero tanto, mami.
-Y yo a ti mi futura doctora.Después de eso ella se va a arreglar y yo bajo al bar a preparar todo y hacer mis tareas antes de que lleguen los clientes.
Leo tiene 25, la edad de Nick en aquellos tiempos, que diferentes son, aunque muy guapos debo admitir.
Ahora Nick debe tener 30, ¿Estará igual de guapo? ¿Qué será de tu vida, Nick? ¿Dónde estarás ahora?
¿Sirviendo en una barra al igual que yo? Esto fue lo que me enseñaste y debo decir que fuiste un gran maestro.Hola, fusionistas!
Espero que sigan disfrutando de la novela, sé que me tardo en publicar pero estoy en finales y buscando empleo aunque ya conseguí, empiezo la próxima semana, pero no se preocupen, no los olvidaré, publicaré más seguido.Ya somos 500 y algo más (poquito pero no importa), gracias por eso y espero aumentar, compartan esta historia, mientras tanto, gracias por todo, por los votos y esos comentarios.
Besos.
Didi.
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FUSIÓN
RomansaSu hogar fue un club nocturno, su familia strippers, su madre una de las prostitutas más conocidas de la ciudad, creció viendo sexo en lugar de caricaturas, es una completa virgen en un mundo lleno de vicios. Ella es la excepción. Él es el hijo del...