Capítulo 21

1.7K 169 18
                                    

—Lo vi detrás de unos árboles —respondí—, parece que estuvo observándonos, porque cuando me atrapó mirando en su dirección, se volteó muy rápido y minutos después ya no estaba. Creo que últimamente estoy restándole importancia a muchas cosas... —murmuré la última parte, mientras caía sobre mis hombros la culpa de que Faith no esté con nosotros.

—Basta, Justin —me reprendió Luke—; nadie habría podido prever lo que pasó. Echarte toda la responsabilidad a ti solo no hará que la traigamos de vuelta. Además, los únicos culpables aquí son Jessie y aquellos inútiles que se la llevaron.

—Quería mantenerla a salvo.

—Por si no te das cuenta, yo también, y me siento mal por esto al igual que tú —me dijo él un poco ofendido—. La vamos a buscar y en menos de lo que crees, estaremos los tres viendo una película. La esperanza es lo último que se pierde, Justin. —Dando un ligero apretón en mi hombro derecho, trató de sonreírme.

—¿Cuál es el siguiente paso? —pregunté, una vez que las palabras de Luke lograron ayudarme un poco; lo necesario para no perder la cabeza antes de tiempo.

—Rayos, hombre, ¿qué no ves CSI? —Frunció el ceño en mi dirección—. Hay que averiguar quién es este tipo. ¿Vienes? —Con un asentimiento, caminé a su lado mientras nos dirigíamos a la oficina de uno de los amigos de su padre.

Punto de vista de Faith.

—Lamento haberme tardado, cielo. —Escuchar aquella voz causó que diera un respingo, no pensé que volvería a verlo, y que estuviera frente a mí no ayudaba a mis nervios—. Primero tenía que ponerme presentable para ti.

Quería decirle dos o tres cosas, pero la mordaza hacía imposible la tarea de soltar, por lo menos, un «Púdrete». Hacer que creyera que estábamos casados y «engañarme» con otras mujeres, mantenerme en contra de mi voluntad en una casa con él, perseguirme, y luego secuestrarme... De verdad, ¿qué pasaba por la cabeza de este sujeto?

—¿Ves esta casa? —Extendió los brazos y dio una lenta vuelta sobre sus pies—. La conseguí para nosotros. Pensé que la otra no te gustaba y por eso hice que unos amigos buscaran otra de tu agrado...

Está loco, ¿cuándo podré escapar? O mejor dicho, ¿cómo?

—Créeme, los otros pisos son mejores y ya están arreglados para que una pareja pueda habitarlos. Lo que son esto y el exterior son unos pequeños detalles, pensé que te gustaría decorarlos; ya sabes, las mujeres tienen buen ojo para estas cosas. Y, dime... ¿Qué piensas?

Es horrible. No viviré otro día más contigo, la policía vendrá y te encerrarán de nuevo.

—Qué tonto. —Dio un pequeño golpe en su frente con la palma de la mano—. No puedes hablar si eso está en tu boca... —Se acercó a mí, quitando el trozo de tela que impedía la salida de mis palabras; estaba demasiado ajustada, me sentí bien cuando ya no la tenía—. Ahora sí, cariño...

—Van a encontrarme y te arrepentirás de todo lo que has causado... —espeté en cuanto tuve la oportunidad.

Por lo visto, lo que dije no le agradó demasiado, ya que sus manos se cerraron con fuerza y formaron un par de puños. Creí que me golpearía, cuando cerró los ojos y respiró con profundidad.

—¿Quiénes? —preguntó con dureza—. ¿El bocón debilucho o el bipolar asesino? —rió con amargura—. No van a encontrarnos, ni hoy ni nunca. ¡Así que acostúmbrate! —vociferó, haciendo que quisiera encogerme en el asiento. Sus ojos irradiaban puro enojo, en cambio los míos tenían una chispa de temor—. De hecho, ni siquiera sabes si estamos en el país o no.

Tragically© {#2 The Bipolar Series}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora