Capítulo 5: "El cuaderno"

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"octubre 12= Me siento mal. Y no mejoré. Sentía como si fuese otra personas, no era yo, tenía impulsos nada buenos, y pensamientos que hasta a mí me asustan, si fuese la protagonista de una película... la película llegaría a su fin. La única manera era sacar la angustia acumulada, el sufrimiento, y el dolor. Y no sé cómo hacer eso"

"octubre 16: mi vida depende de un hilo... veo que yo sola lo estoy cortando."

"diciembre 2: la vida no es fácil. Nadie dijo que lo sería, ya lo sé, pero a mí tampoco nadie me dijo como seguir con la vida cuando es difícil"

- Director, tendría que prestar atención, Tania me entregó algo muy personal porque quiere que la ayude. –dejando el cuaderno sobre las piernas del director.

- No trabajamos individual o particularmente. Trabajamos en grupo, la chica está en el grupo D, asique encárgate del grupo D y listo. – devolviéndole el cuaderno

- Hay cosas de las que sí se puede ocupar personalmente ¿no?

- ¿de qué hablas?

- ¿me permite? :

"Marzo 19: Me sentí defraudada. Pensaba que me ayudarían, pero creo que esto va empeorando. No le importo a nadie. Lo comprobé cuando Lucila y el director se burlaban de nosotros, y encima trataban de hacerlo en la oficina, como si nosotros no existiéramos. Tengo mucha impotencia, y no la puedo manejar, necesito volver a descargarme, porque sé que estoy mal, pero también sé que nadie quiere que esté bien. ¿Quiero ayuda? No, porque sé que la necesito, aunque en este lugar solo se ayudan entre el personal"

Le leí esto para que tengan conciencia, asique ¡si no me ayuda a ayudar a Tania, esto puede salir en los medios, y su cargo quedará en nada!

- ¿Por qué hay que hacer tanto lío?... después de todos, estamos para ayudar...

- Así me gusta. Ahora escuche:

"Marzo 20: Mis manos no pueden parar de moverse, yo no puedo parar de caminar. Tengo ansiedad y ganas de que Tania vuelva, en este momento soy un monstruo, una bestia ciega que busca desahogarse. Pasaron dos horas. Encontré una tijera y gasas, están en mi poder, y no se controlar a la bestia. Lo hice, ya mis vendas cubres mi muñeca izquierda, me siento aliviada. Tania volvió, pero está triste, se siente sola, y no quiero hacerlo más"

¿Cómo dejó que suceda? – Gritando, Valeria claramente quiere de verdad que Tania se recupere – ahora asegúrese de que la niña reciba más atención. Sólo tiene catorce años, y usted mismo escuchó lo que escribe.

- ¡bueno! ¿pero qué pensas? No es mi culpa, hay mucha gente con problemas acá, no es ella sola.

- ¡ya lo sé! Y va a haber alguien más con problemas... dos mejor dicho. Si no colabora, Lucila va a tener problemas. Y usted... cuídese, porque no quiero que se olvide que también puede tener problemas con su esposa e hijos – cerrando la puerta de una manera muy fuerte.

- ¡que pendeja de mierda! Ojalá se muera, la puta que me pario. Lo único que me faltaba, que Tania sea una protegida – agarrándose la cabeza.


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