Reiníciame [BTS Yaoi]

Capítulo 72: Día 1 (6)

[Taehyung]

¿Es posible morir de nervios? Si lo es, de seguro que a mí me está pasando en este instante. Hablo en serio, no paro de temblar. Solo imaginarme a Hobi rechazándome y mirándome con asco hace que quiera salir corriendo... ¡Pero no! Ya me he decidido. Además, también se lo he dicho a Jin, y si ahora me echo atrás probablemente me regañaría o... no sé. El caso es que tengo que hacerlo.

Abro la puerta apresuradamente justo antes de recordar que es de mala educación no llamar antes, por lo que vuelvo a cerrarla. Doy dos toques, espero unos segundos, y ahora sí que la abro, aunque más cautelosamente, para encontrarme con la mirada recelosa de Hobi al otro lado.

- ¿Qué haces Tae? – Abrió la puerta del todo y me echó un vistazo de arriba abajo, hasta reparar en mi bolsa. Entré antes de que pudiera decir nada y cerré de nuevo la puerta a mis espaldas.

- Espera aquí – me miró con cara de "a qué otro sitio voy a ir" y yo añadí apresuradamente – Quiero decir... no te gires hasta que yo te lo diga.

- ¿Es esto un juego? Porque no me estoy enterando de nada.

- Aish... t-tú solo haz lo que he dicho. Cierra los ojos y ponte de cara a la puerta.

- ¿Ahora también tengo que taparme los ojos?

- ¡Hobi! – me quejé.

- Vale, vale, ya voy – terminó diciendo entre risas mientras seguía mis indicaciones.

Cuando estuvo de espaldas y con las manos cubriendo sus ojos, saqué rápidamente la prenda del interior de la bolsa y me la puse sobre la ropa que ya traía puesta. Era una especie de sudadera blanca ultragrande. Me llegaba casi por las rodillas, y como llevaba pantalones cortos debajo, al ponérmela parecía que iba tan solo vestido con ella. En la capucha había una carita dibujada, con los ojos muy abiertos y dos dientes parecidos a los de Jungkook. ¡Nadie podría resistirse a un dibujo tan adorable!

Agarré a Hobi de la mano y lo arrastré hacia la cama.

- No mires todavía – Avisé mientras le guiaba por la habitación. Sin querer hice que se tropezara con la maleta de Yoongi, que estaba en el suelo. Olvidé que no podía ver y esquivarla.- ¡Perdón, culpa mía!

- Ya, ya sé que es culpa tuya... - susurró de mala gana, recomponiéndose del susto. ¡Exagerado! Ni siquiera se había llegado a caer.

- No abras los ojos, ¿eh?

- Que no, que no... - le senté sobre la cama y me coloqué con las piernas cruzadas en el suelo frente a él. Subí mi capucha, cubriendo mi cara con ella y mostrando el adorable dibujo, y solté sus manos.- Ya está.

- ¿Ya puedo abrirlos?

- S-sí...

"¡Oh no! ¡No no no! ¡No puedo hacerlo! Mejor voy a fingir que todo era una broma y que fue idea de Jimin...o... ¡No sé, quiero irme!"

- ¿Tae?

- ...

- Taehyung, ¿se puede saber qué haces? – No podía responder. No podía moverme. Solo tenía la mirada fija en mis manos, las cuales no dejaban de temblar.- ¿y por qué llevas puesto est...

Noté como acercaba su mano para bajarme la capucha y por acto reflejo me aparté, agachando aún más la cabeza. No podía mirarle a la cara, no ahora.

- Dé-déjame la capucha...

- Está bien... pero explícame que pas...

- Hobi – tragué saliva– hay algo qu-que... quería decirte...- Esperé unos segundos, intentando ordenar mis ideas antes de proseguir.- Y-yo...

"¿Ahora que venía?"

Me había quedado completamente en blanco. Después de haber ensayado este momento tantas veces frente a un espejo, ahora que tenía que hacerlo las palabras no querían salir. ¡Menudo desastre! Apreté las manos y volví a tragar saliva. Quería mirarle y a la vez no podía hacerlo. ¿Por qué todo era tan difícil?

- ¿Tu qué, pequeño? ¿Pasó algo?

- Pa...pasa que... pu-pues que t-tú me...sustas...di-digo, gustas. – Levanté la vista y me quité la capucha, mirándole por primera vez a los ojos. Estaba atónito, con los ojos muy abiertos como si hubiera visto un fantasma; bueno, como si hubiera visto un fantasma no, porque si Hobi viese a un fantasma saldría corriendo hasta la otra punta del país como mínimo, no abriría los ojos. Me mordí el labio inferior con nerviosismo y aparté la mirada a un lado.- Me gustas mucho, Hobi.

Y antes de que pudiera responder, me puse en pie y rápidamente deposité un pequeño beso en sus labios, igual que había visto muchas veces en las películas. Fue solo un roce, pero en mi tripa se sintió como un terremoto. Volví a bajar mi capucha, tapando por completo mi rostro, el cual de seguro que estaba rojo a más no poder, y permanecí de pie. Pasaron casi dos minutos antes de que mi amigo respondiera y yo lo único que sentía eran nervios. Nervios, nervios y ganas de volver a darle un beso. Pero sobre todo nervios. ¡Ah! Y miedo. Muchísimo miedo a su respuesta.

- Tae...- levanté la vista sin quitarme la capucha, lo suficiente para ver bajo esta. Ahora él me miraba más firme, más serio.- ¿Qué has dicho?

"¡Alerta roja! Todo ha salido mal. ¡Retirada!"

- Eh... nada. N-no he dicho nada. Mejor me voy, luego... luego te veo.

Me giré apresuradamente con intención de marcharme de ese cuarto lo más rápido posible, pero antes de que pudiera dar un paso, me agarró de la muñeca y tiró hacia sí mismo, provocando que cayese sobre la cama. No tardó en colocarse sobre mí, impidiéndome huir. ¡No no no! Yo ahora quería salir corriendo. Ni siquiera pensaba llorar... solo salir.

- Tae...- me tapé aún más con la sudadera sujetando el extremo de la capucha con mis manos. – Taehyung, mírame... -Escuché un suspiro de su parte y sentí como me la quitaba bruscamente.- Ahora hazme caso tú a mí.

Noté como el labio inferior me comenzaba a temblar. Se había enfadado. Me odiaba. A duras penas asentí, demasiado asustado como para apartar la vista. Se veía tan serio...

- Repite lo que has dicho antes.

- N-no era nada...

- Repítelo – Insistió con más severidad.

- Era una... tontería...- susurré con apenas un hilo de voz.

"No llores Taehyung. No llores"

Hoseok acentuó el agarre en mis muñecas y acercó aún más su rostro al mío, provocándome unos nervios que jamás pensé que sentiría. Estaba con una mezcla tan grande de sentimientos y emociones en ese momento que ni siquiera podría nombrarlos todos.

- Taehyung – No hizo falta que terminase la orden; solo con el tono que usó supe que debía responderle. Cerré los ojos y giré el rostro, temeroso de las consecuencias de mis siguientes palabras.

- Dije que... me gustas.

Y para mi completa sorpresa, lo que vino a continuación jamás lo hubiera imaginado. No fueron palabras de odio o desagrado, no fue un rechazo, no me consoló o intentó animar, no que va, nada de eso.

Lo siguiente fue un beso.

Hobi me besó.

____________________________________________________________________________________

¡Mil años de espera y al fin llega Vhope! Aish, amé tanto escribir este capítulo. Ahora mismo son las dos y media de la mañana y estoy muerta de sueño, pero aún así lo amé. De verdad que me encanta escribir cosas bonitas <3 (Cursi empedernida always)

¡Espero muchísimo que os haya gustado! 

Nos leemos ^^