No me digas te quiero, quiéreme.

Te quiero, solo eso.

Doy una vuelta en la cama sin poder dormir, me destapo y me vuelvo a tapar.
Joder, nadie se imaginaria que Jesús Oviedo se levantaría tan temprano pero lo he echo y hostia, no puedo conciliar el sueño.
Me decido por ir al salón, total, si no puedo dormir, veré la tele un rato.

Bajo lentamente las escaleras intentando no despertar a nadie pero una voz desde atrás me impide seguir.

-Jesús.-susurra la dulce voz de mi amiga.-¿Ocurre algo?

-No puedo dormir.-me acerco ella intentando no alzar la voz.-¿Y tú?

-Tampoco.-se muerde el labio nerviosa.-No quiero irme.

-Ni yo que os valláis.-susurro volviéndome hacia las escaleras.-¿Te vienes abajo?

La veo asentir sonriendo de lado y me sigue en silencio hasta el salón donde toma asiento en uno de los sofás.

-¿Quieres algo de comer?-pregunto hambriento y niega con la cabeza haciéndome encoger de hombros.-Pues yo sí, ahora vengo.

Voy hasta la cocina y agarro una bolsa de cruasanes de chocolate, si, yo y el dulce somos muy buenos amigos.

-Bueno.-se digna a hablar una vez me he sentado junto a ella.-Y ahora enserio,¿qué te pasa?

Me chupo los labios nervioso y me echó para atrás agotado.
Jamás pensaría que admitirá algo así a alguien y voy a hacerlo tragándome todo el orgullo que tengo.

-Tengo miedo.-susurro y la veo sonreír de medio lado.-¿Porque te ríes?

-No me he reído.-reprocha.-Solo he sonreído porque me gusta verte así.

-Oh, gracias.-digo irónico.-Yo también te quiero, eh.

-Jesús.-se ríe.-Me refiero a verte ser sincero, preocupado por no perder a tu chica.

Le sonrío un poco llevándome un cruasán a la boca y mira al suelo unos instantes.

-¿Tú crees que querrá volver este verano?-pregunta con miedo y asiento seguro.-Porque os voy a echar muchísimo de menos.

-Voy a hacer lo que sea para que quiera volver.-susurro.-Te lo prometo.

-Es una cabezota.-me recuerda como si no lo supiera y la veo sonreír después.-Pero te quiere.

-¿Enserio?-sonrío intentando ocultar lo mucho que me gusta oír eso.-Yo también le quiero.-admito y me agarra la mano.-No quiero perderla, Marta.

-No seas tonto.-se ríe.-Nunca la perderás.-me asegura.-La conozco y eso lo sé.

-Es ya demasiado importante para mí para permitirme perderla y no voy a hacerlo.-digo seguro.-La quiero.

-Pues eso díselo a ella.-me mira y asiento no muy seguro.-Haz que sepa que no sólo se lo dices, que lo sientes.

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Me peino nerviosa antes de tocar al timbre de la gran casa de los gemelos.
Cuanto varios segundos intentando calmarme pero al final le doy al timbre y minutos después Dani abre la puerta.

-Hola mi niña.-se apoya en el marco con una débil sonrisa.-¿Con qué te vas ya, eh?

-No porque quiera.-murmuro mirándolo a los ojos.-Te voy a echar mucho de menos.

-Yo también.-me tiende la mano y me atrae hacia él para abrazarme.-¿Estás mejor?

-Más calmada.-admito.-Se que me fui por una tontería pero no se reaccionar ante estas situaciones, Dani.-asiente acariciándome la espalda.-Soy nueva en esto.

-Te entiendo.-se separa para mirarme.-Y te voy a ayudar en todo lo que necesitas, ¿vale?

-¿Te he dicho lo mucho que puedo llegar a quererte?-canturreo algo más tranquila y él se ríe un poco, agarrándome la mano y haciéndome entrar en la casa.

-Anda, ves a hablar con mi hermano.-me dice.-Sí hay alguien que te quiere un poco más que yo es él.-sonríe.-Pero solo un poco, eh.

Le doy un suave beso en la mejilla y ando no muy segura hasta el salón,donde se oyen voces.

-Hola.-susurro llamando la atención de mi mejor amiga y de Jesús.

-Silvia.-lo veo sonreír y me muerdo el labio nerviosa.

-Yo mejor me voy.-se levanta Marta y nos guiña el ojo divertida.

-Bueno...-murmuro pero niega con la cabeza.

-No, quiero hablar yo.-susurra nervioso y asiento.-Contigo he aprendido que el amor es un puro juego de azar en el que apuestas todo y nada.-comienza y frunzo el ceño.-Apuestas tu amor a la banca, esperando a que alguien lo gane, y cuando ese alguien lo gana llega un momento en el que pierde y se queda sin nada.-suspira y trago saliva.-Piensas que nadie va a jugar mejor que el anterior y que nadie apostará por ti porque vales menos, pero lo que no sabes es que vales más que cualquier otro premio.-me sonríe y se acerca a mi.-Casi al final del juego, llega a alguien que aprecia lo que tiene y aunque haya tenido varias pérdidas ha sabido volver a recuperarte e incluso ha hecho que subas de valor.-me agarra las manos.-Pero en este juego de azar no siempre se gana y hay gente que a la primera jugada lo pierde todo y se cansa de volver a intentarlo.-agacho la cabeza.-A veces el amor es un juego de perder, pero para poder ganarlo, tienes que aprender de tus errores.-me dice.-Y eso es lo que he echo yo, y estoy haciendo.

-Jesús...-susurro pero me pone la mano en la boca.

-Quizás estábamos equivocados con toda esta chorrada del amor.-susurra y trago saliva.-Quiero decir, que me da igual que seas una de mis noches o noventa de mis días, que no me importa si me convienes o no, si eres un preciosidad o normal. Que lo más seguro es que al final lo más importante sean las caricias en el cuello durante un beso, y ese, ¿qué tal has dormido hoy?-bufa.-Ese, tengo ganas de verte, que me decías y que tantas veces me ha echo sonreír.-sonrío un poco.-Dibujar corazoncitos en cualquier esquina de un papel y pensar en las ganas que tengo de que me mires y sonrías.-me acaricia la mejilla.-Y que no te aguantes más y me calles con un beso. Ya lo sabes, siempre han dicho que los besos robados saben mejor.

-¿Qué es eso?-digo extrañada señalando hacia una pared, haciendo que se gire y aprovechar para acercarme a él, cosa que hace que cuando vuelva a girarse este pegado a mi, y que lo bese sin que se lo espere.
Noto como sonríe por encima de mis labios y me sigue el beso con ganas, rodeando mi cintura y atrayéndome lo más que puede a él.

-Si.-susurra haciéndome sentir el cosquilleo que ya lleva su nombre.-Te quiero, solo eso.

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Weno hola😚

Primero; ¿Alguien sabe hacer booktrailers?

Dos: ¿A qué le dais mg a mi foto con mi Dani? @siviasaez_

Tres: Os quiero chochos💗