Capítulo 8 "A los 18 años..." Parte 2 Sasuke

612 61 0
                                    

"[Uchiha Sasuke] - [Uzumaki Naruto]".

El tiempo se detiene. No respiro. Mi corazón deja de latir en mi pecho, y mis piernas se sienten débiles. Voy a caer. No. Estoy cayendo. Una mano se posa en mi hombro sobresaltándome de muerte. Me siento atrapado e indefenso por segunda vez en mi vida. Mi corazón comienza a latir a todo ritmo, y sin pensarlo dos veces agarro al agresor, aplicando una llave que aprendí en mis clases de agente con Kabuto y Orochimaru. Y aunque Orochimaru terminó con cadena perpetua por fraudes, sobornos y asesinatos, y con Kabuto como su cómplice, tengo que admitir que fue un buen maestro.

Después de un tiempo vuelvo a enfocar mi visión, y mi ritmo cardiaco junto con mi respiración se estabilizan. Mi agresor -o mi víctima, dependiendo de como se mire la situación- resulta ser mi nuevo compañero de habitación -o mi antiguo compañero de clases-. Lo suelto y me alejo un par de pasos, mientras Naruto se recupera de mi llave.

—Han pasado tres años desde que nos vimos, y me atacas apenas me ves. Sabía que no te caía muy bien cuando era un niño —dice frotando su hombro, con una mueca de dolor en su cara y tristeza en sus ojos —, pero no pensé que me odiaras aún después de la última vez que nos vimos.

—¿Por qué estás acá? Pensé que estudiarías en la universidad ciencias políticas, o algo así—. Lo miro. Todos nos miran, pero los ignoro, mientras espero la respuesta de Naruto.

No volví a pasar por la estación después de esa vez que lo vi. Temía que si lo encontraba otra vez, me volvería blando, y esperaría que él se acercara a mi, para hablar conmigo. Para ser mi amigo.

—¿Que opinas si mejor entramos a mi cuarto para seguir hablando? —. Dice con una mueca y en voz baja.

—Querrás decir nuestro cuarto —. Reprimo una sonrisa por su cara de incredulidad. —Parece que seremos compañeros de habitación desde ahora.

Su cabeza gira tan rápido que hace que duela mi cuello de solo mirarlo. "Ya no podré escapar de él tan fácilmente. Probablemente me acosará con preguntas cada vez que pueda. Puede que incluso derribe alguna de mis paredes internas". Una sonrisa comienza a aparecer en sus labios, pero rápidamente la cubre con su mano. Esa sonrisa solo confirma mis presentimientos. Él se convertiría en una molestia, pero increíblemente, eso no me molesta tanto como pensaba que lo haría. Algo dentro de mi comienza a sentirse caliente.

Aún mirándolo, doy un paso hacia la habitación y entro, dejando la puerta abierta tras de mi. El ruido en el exterior comienza en el mismo segundo que la puerta se cierra con un clic.

—Ahora que lo pienso, en la primaria también estabas antes que yo en la lista —. Dice con una sonrisa nostálgica en su rostro.

—Sí. Puede que sea porque nuestros apellidos comienzan con la misma letra —. No puedo evitar decir con amargura. Estoy siendo un idiota, pero Naruto me pone nervioso. Desde esa única ocasión en la primaria, cada vez que me habla o se acerca a mi, hace que algo dentro de mi sea incómodo, y me revuelve por dentro.

Me acerco al ropero, y busco un cambio de ropa. Se nos había ordenado ducharnos y acostarnos, ya que las luces se apagan en dos horas, y las duchas en una, no quiero desperdiciar mi tiempo, y más aún quiero alejarme de Naruto antes de que comience con sus veinte preguntas, para las que no tengo el tiempo ni la paciencia. Siento sus ojos clavados en la parte de atrás de mi cabeza, pero cuando me volteo parece más perdido en sus pensamientos, que estar consciente de lo que hace. Aprovecho su divagación para salir y cierro la puerta con mucho cuidado, para no exaltarlo.

Las duchas están llenas de gente y me ducho rápidamente. Mientras me visto escucho mi nombre desde el pasillo. Esa molesta voz hace que un rubor indeseado se derrame en mis mejillas. Salgo por la puerta en el momento en que Naruto pasa por afuera. Lo agarro de la camisa y golpeo su cabeza con mi puño.

—¡No grites mi nombre por todo el lugar! —. Digo, avergonzado de muerte.

—Lo siento, lo siento —. Dice Naruto, frotando su cabeza y sonriendo. Se ve tan feliz e idiota como siempre, pero algo dentro de mi se sacude. Es como si se hubiese encendido una llama en mi interior, haciendo que me sienta cálido, algo que hace mucho tiempo no pasaba.


NaruSasu - Toda Una Vida, Alma GemelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora