Capítulo 28

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Los chicos se quedaron conmigo en el hospital toda la tarde, hasta las 19, cuando todos se fueron, excepto Jimmy, quien dijo que no le importaba faltar a clases.

Estábamos él y yo en la habitación de mi mamá, esperando que se despertara, hasta que de un momento a otro, Jimmy me mueve repetidamente el hombro, para que la mirase abrir sus ojos.

Ella abrió lentamente sus ojos, y rápidamente, miró a su al rededor, confundida; nos miró, y frunció más el ceño, dando a conocer lo totalmente confundida que estaba. Se talló los ojos, y me miró nuevamente.

— ¿Skyler? — preguntó con voz ronca.

— ¿Quién más, Amy? — pregunté, sin moverme de mi asiento. Hace tiempo que no hablaba con ella, totalmente sobria.

— Skyler, estás aquí. Yo... lo siento, por todo, en serio... — dijo, rápidamente.

— ¿Porqué te disculpas? — le interrumpí.

— Por... causarte tantos problemas, por ahuyentarte, por todo, Skyler... Perdóname, yo... Te juro que no volveré a tomar o algo. — dijo, incorporándose.

— Já. — reí sarcástica. — Eso ni tú te lo crees. Lo volverás a hacer una y otra vez, y volverás a decirme eso, una y otra vez. — le dije, cruzando las piernas.

— ¿Porqué eres así conmigo? Sabes que aún no supero la muerte de tu padre, me sigue doliendo.

— ¿Encima preguntas porqué soy así contigo? Ya la superaste hace tiempo, ni siquiera piensas en él cuando te tomas todo un bar, Amy. — hice una pausa. — Tú te dañaste. — se hizo un largo silencio en la sala, luego de unos minutos, se decidió a hablar.

— Pensé que iba a morir... — dijo, mirando un punto fijo de la habitación. Levantó la cabeza rápidamente, con lágrimas en sus ojos. — ¿Tú donaste? — preguntó con esperanza, y una pequeña sonrisa.

— Sí.

Se sorbió unos mocos, y luego, bajó la mirada, nuevamente. — ¿Porqué lo hiciste?

— A pesar de todo lo que hagas, eres mi madre... Antes de todo esto eras una excelente madre... Tampoco iba a festejar tu muerte, si en un caso, se presentara, Amy.

En realidad, sí era verdad. Podría hacer cualquier cosa, pero antes de todo esto, era la mejor mamá, supongo que todo esto le afectó demasiado... Pero me tenía a mí, ¿Porqué no superarlo juntas? Porque, aunque haya sido la mejor madre del mundo, siempre fue egoísta... O simplemente, no quería que me afectara tanto... Pero eso fue lo peor que pudo hacer, ya a lo último que estuve con ella, ya ni le interesaba si yo respiraba o no, por lo que, la imité yéndome, y dándome igual de su existencia. Para mí, estaba muerta, y para los demás también... Menos para los chicos, ellos sabían que aún le quería, y parece ser cierto ya que, aquí estoy.

— Te quiero devuelta, Skyler. — dijo, entre sollozos.

— Ya déjate de teatro, por favor. — dije, levantándome. Odio ver a alguien llorar, no sé cómo consolar, o simplemente, me da risa, pero con ella, me pongo nostálgica, y eso es otra cosa que odio. — Veré al doctor, le diré que te despertaste. — dije, tomando a Jimmy de la mano, haciéndolo levantar.

— ¿No crees que haz sido un poco dura con ella? — preguntó éste, una vez estábamos afuera.

— ¿Cuando no he sido dura con alguien? — le pregunté devuelta.

— Pero, es tu mamá, Sky... — dijo, mirándome con sus iris azules.

— Pero, no me importa. — dije, apartándome de él, caminando en busca del doctor.

Caminé hasta encontrar al doctor, con Jimmy detrás de mí. Encontré al doctor, me acerqué, y le toqué el hombro, haciéndolo voltear.

— Ya despertó.

— Bueno, ahora, pasará por lo mismo que tú, sólo que ella estará aquí por 2 semanas más, en observación. — dijo, dándose la vuelta.

Sin más, me fuí de ahí. Estábamos caminando, pero le dije a Jimmy que se adelantara, y se fuera el primero a la habitación, ya que yo tenía que ir al baño.

Estaba en camino al baño, pero me detuve en seco, rápidamente, cuando me pareció ver a Andy... Andy Black, el chico raro de la universidad que me habló la otra vez. «Bueno, no era raro, sólo... a todos les digo así.» No supe si era él o no, ya que, estaba de espalda, con una chaqueta negra puesta, y no pude ver sus tatuajes, para cerciorarme, pero por parte de su cabeza, se parecía; tenía la misma forma y tenía la cabeza rapada en el mismo lugar.

«Raro»

Seguí mi camino, y entré al baño. Ahí, me lavé el rostro, nuevamente, y me lo sequé. Salí, y me conduje a la habitación, nuevamente.

Entré y me encontré con Jimmy, sujetándole el "plato" a mi mamá, para que vomitara. «Qué tierno... Y asqueroso.» Y en un momento, se me vino a la mente Syn, lo atento que es. «Fuck, no.» Moví rápidamente mi cabeza de un lado a otro, esfumando ese pensamiento que se aproximaba.

— Jimmy, ya nos vamos. — dije, una vez mi mamá "terminó" de hacer eso. Éste se levantó, y dejó el "plato" en la mesita de noche, que estaba a un lado de la cama, le brindó una sonrisa a Amy, y luego se puso a mi lado. — Volveremos mañana. Adiós. — dije, cortante.

— ¡Adiós, señora Amy! — dijo Jimmy, moviendo su mano, en forma de despedida.

— Adiós, ¡Cuídense! — dijo, Amy, antes de que yo cerrara la puerta.

Caminamos por el pasillo, y nuevamente, ví a ese chico parecido a Andy.

— Hey, ¿Ese no es Andy Black? El de la universidad, el que te habló. — dijo Jimmy.

— No sé, hace unos minutos lo ví, y también pensé lo mismo. — dije, mirando a el chico.

— ¿Y porqué no te fijas? — me dijo.

— ¡Qué huevo! ¿Porqué no te fijas tú?

— Me da pereza.

— Pues, a mí también. — dije, empezando a caminar, con Jimmy siguiéndome.

Salimos del hospital, y miré la hora: 22:26. También revisé mi celular: "21 Mensajes de WhatsApp" "8 llamadas perdidas". Abrí los mensajes de WhatsApp, y 8 eran de Syn 3 de Zacky, 3 de Johnny, 5 de Gerard, 2 de Hannah. Abrí las llamadas y 5 eran de Syn, 2 de Gerard, y 1 de Hannah.

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xx.



Jet Black Heart (Synyster Gates)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora