Types of Anime Boys (One-Shots Lemon)

Dandere-senpai (2)

Segunda parte.

"Si dices querer un buen momento
Bueno, entonces aquí estoy, aquí estoy,
Háblame, háblame, háblame
Dime qué hay en tu cabeza
Si lo quieres, ven y tómalo
Todo esto está aquí para ti
Dime, dime, dime,
Lo que intentas hacer."

•••

No estaba nerviosa, para nada. Cuando sus manos se tocaron en el posa brazos su corazón latió con fuerza pero no se permitió dejar que la emoción dominara su cuerpo y la hiciera sudar, sonrojarse y aguantar la respiración mientras desviaba la mirada donde estaba sentado él. Sus dedos se movieron y no dejaron que cambiará de posición, parecían unidos como un solo órgano. Como si siempre hubieran estado así de unidos.
Solo miró al frente con una pequeña sonrisa y un reconfortante calor en su pecho, la película no se detuvo como lo estaba haciendo el tiempo. Siguieron pasando imágenes, historias, ritmos y risas, pero para ella ya no tenía sentido, todo lo que la rodeaba iba a una lentitud muy grata.

Lo tomaba como un logro casi digno de poder morir feliz de solo saber el hecho de haberlo logrado. Lo había pensado un montón y el proceso fue mucho peor de lo que pensó.
Estuvo tan emocionada con la idea y a la vez tan nerviosa, que corrió a por la ayuda de Fuuto, pero como siempre, él de inmediato la rechazó con desinterés, como si no la hubiese escuchado.

- Ve tú, que no es mi novio, es el tuyo.- Y con una actitud lo bastante altanera para parecer de su naturalidad, siguió leyendo la revista deportiva que tenía entre sus manos. (T/n) frunció el ceño y con fuerza le pateó en el costado de las costillas, tirándolo del sillón y haciendo volar lejos la revista.

- Si, tienes razón, es mi novio y no el tuyo.- Y con la melena moviéndose al son de sus pasos, dejó su hogar con la cabeza en alto. Entró a la escuela más temprano, guardó sus cosas y se dedicó a ordenar sus pensamientos.
Centralizó sus prioridades en guardar la calma y no pedírselo de manera violenta.
Pensó en quizá mandarle una nota, pero lo descartó porque le pareció muy tímido e impropio de ella. Pensaría que estaba demasiado enamorada, en realidad lo estaba, pero no quería que él corriera lejos por creer que ella estaba muy involucrada.
Luego pensó en otras ocho maneras diferentes, pero, o eran muy clichés, o simplemente le parecían estúpidas.
Tomó la mejor decisión que pudo cuando tocó el timbre y escuchó como todos entraban en el aula a recibir el primer bloque educativo, casi con el cabeza entre las manos y tirándose de las mechas esperando más ideas, optó por retarlo a aceptar. Después de todo, ¿qué más tentador que un desafío?

- No.- Le respondió Dandere secamente la primera vez que lo intentó. Estaban Fuuto y algunos de sus amigos pasando el receso en el gimnasio, cada uno en su actividad, conversando o jugando con alguna pelota. Entró ella dando un portazo al correr la puerta de metal e interrumpió la tranquilidad de todos. Se puso frente a Dandere, quien sostenía una pelota de básquet en las manos y estaba dispuesta a dejarla a un lado para tomar uno de los aperitivos que descansaban en las piernas de Fuuto.
Le miró con una media sonrisa y con una posición de superioridad le declaró cada punto de su plan, y como último, le preguntó si se atrevía a aceptar tan ajetreado panorama.