Types of Anime Boys (One-Shots Lemon)

Shota-chan (2)

Segunda parte.

  Esta noche quiero darte todo a ti
En la oscuridad
Hay mucho que quiero hacer
Y esta noche quiero ponerlo a tus pies. 
Porque chica, yo fui hecho para ti
 

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- ¿A quién más le ha tocado el número cinco?- Preguntó Ayumu agitando en el aire el trozo de papel con el número escrito, mientras se ponía de puntillas para destacar entre la gente al alzar la voz. (T/n) desplegó el papel que le habían asignado y con curiosidad, vio el número siete en él.- Eh, (T/n)-chan, ¿qué número te ha tocado?

- Siete.- respondió mostrándole el papel. Ayumu volvió a llamar con tono fuerte esperando a que alguien contestara por el siete y el cinco.

- A mi me ha tocado el siete.- Mencionó Tabara abriéndose paso entre sus demás compañeros que también buscaban a las parejas asignadas. (T/n) hizo un gran esfuerzo para que no se notase que buscaba casi con desesperación el rubio cabello de Shota detrás de la espalda de Tabara. Lo encontró con victoria y se regocijó con las mejillas rojas y los labios en una fina línea.

- A mi el cinco.- Shota levantó el papel que tenía entre sus manos y al encontrarse con los ojos de (T/n), apartó la mirada avergonzado.

Como era de esperarse, los delegados de la clase habían organizado un montón de actividades para hacer en el transcurso del paseo. La junta de profesores había planeado todo lo técnico: la distribución de habitaciones, los lugares que visitarían, y las horas de descanso, donde entraba la organización de los alumnos. Tenían alrededor de tres horas en cada descanso para hacer lo que gustasen. En la mañana, organizaron un pequeño partido de fútbol, donde se separaron en cuatro equipos. Pasado al mediodía, después del almuerzo, jugaron juegos de mesa. Ya por la tarde fue decisión libre de cada uno puesto que solo tenían media hora antes de estar listos para ir a una exposición natural que quedaba cerca del hotel. Era de noche y estaba empezando a hacer un frío cada vez más insoportable. Era la última noche que pasarían allí antes de volver en bus a la escuela al día siguiente. Y como todos habían insistido, utilizaron la oportunidad para realizar una prueba de valor.

El juego era simple: en parejas elegidas por un sistema de pares de papeles, se iban a adentrar en el bosque, dar vueltas siguiendo las instrucciones de un mapa y luego volver al punto de partida con un banderín que debían encontrar entre algunos arbustos. No tenía nada de especial, pero la gracia es que habían personas dentro esperando para dar unos bueno sustos. Esa era la particularidad que traía loca a (T/n). Le encantaba asustarse. Amaba la oscuridad, los gritos, lo perturbador y lo insano. Era un factor de ella que la hacía aún más rara si es que eso era posible. Y por eso mismo, era muy difícil que se llegara a asustar. Estaba convencida de que sus compañeros se habían asegurado de que todo fuese muy escalofriante y aterrador. Con esa sensación le bastaba. Si lograban sacarle un grito entonces ella moriría feliz. Se sentía ansiosa y emocionada, pero no esperaba que su amiga sacara un número distinto al de ella, y no se veía con las ganas de cambiarle el papel a nadie.

- Ir contigo a cosas de terror es mucho para mi corazón.- Le dijo Ayumu antes de que salieran de la habitación ya listas para el evento. No sabía como sentirse al respecto, porque después cuando supo que no iban a ser pareja soltó un suspiro de alivio. Se enfadó un poco con ella, pero le encontraba algo de razón.

Hasta el momento no había considerado el hecho de poder hacer la prueba de valor con Shota. Sería un poco problemático, porque estaría mucho más pendiente de él que de asustarse. Obviamente, ni siquiera un grito saldría de su boca. Conocía a Shota lo suficiente para saber que él saldría corriendo muerto del miedo antes de poner un pie dentro del bosque. Recordó que una vez de pequeño vieron una película de suspenso que dejó al rubio con los pelos de punta y con los brazos aferrados al torso de (T/n) mientras esta le acariciaba la frente y lo intentaba calmar. Tenía un pequeño presentimiento sobre el final de las cosas.