No Quiero Perderte [ Golxy ] ✅

Capitulo 3

-Bueno... ¿Cómo que ya deberías de comer tus tacos, no crees?- dijo el pelirrojo aún acariciando el cabello rubio del oso.

-Mhm... Si...-el rubio entre abrió sus ojos, pues los había cerrado cuando el zorro comenzó a acariciar nuevamente su cabeza. Levantó la vista para poder mirar al pelirrojo.-¿Los comerías conmigo?

-Bueno... Con gusto lo haría Goldie, pero...-el zorro se quedó mirando la carita de súplica que había puesto el oso. La verdad a el no le gustaban para nada los tacos, de echo los odiaba, pero no podía decirle que no a esa tierna carita.-... ¿Qué estamos esperando?-dijo el pelirrojo con una sonrisa.- Quien coma más, gana.

-¿Y qué gana?- Preguntó el rubio con una leve sonrisa.

-Mmm... El perdedor será el esclavo del ganador por dos días.-dijo el zorro tratando de separarse disimuladamente del oso, ya que estaban muy (demasiado) cerca y eso le incomodaba un poco.

-Vale, pero te advierto que los tacos son mi comida favorita, así que posiblemente te gane.-dijo el oso con una sonrisa y separándose de el.

-Eso lo veremos.-el zorro miro de reojo el plato de tacos.-¿Empezamos?

El rubio asintió con la cabeza y miro el plato de tacos también.
Foxy puso el plato de tacos en medio de los dos, sosteniéndolo con una mano. Se quedó mirando los tacos por algunos segundos, la verdad le daba asco verlos, pues no le gustaban para nada.
Golden comenzó a comer los tacos con las dos manos(?), al parecer tenía demasiada hambre.

-Oye... Eso es trampa.-Dijo el pelirrojo haciendo pucheros, por lo que el oso río al ver su carita.

-Esta bien... Los comeré con una mano.-dijo el oso con la boca llena y sonriendo leve.-

-¿Sabes qué? Tengo una mejor idea.-dijo Foxy sentándose en el pasto y dejando el plato de tacos frente a él.-Siéntate.

Golden alzó una ceja e hizo caso a lo que el zorro le dijo sentándose enfrente del plato de tacos.

-Así será más fácil.-dijo el zorro tomando tacos con sus dos manos (Foxy tiene sus dos manos, el garfio solo es un accesorio :v).

El rubio no dijo nada más y comenzó a comer los tacos rápidamente. El zorro al verlo comer tan rápido bajo un poco sus orejas y empezó igual a comer rápidamente aunque no podía evitar hacer una mueca de disgusto cada vez que le daba una mordida a un taco.

Al final, por increíble que parezca, Foxy ganó.

-Ahora tengo que ser tu esclavo... Por dos días...-dijo el oso mirando al suelo con las orejas un poco bajas.

-Pero no te pongas triste, no te pediré cosas pesadas, solo...-Foxy lo tomo de la mano.-ven conmigo.

El oso asintió con la cabeza y un pequeño rubor apareció en sus mejillas. Siguió al zorro hasta su cuarto y, al llegar, lo soltó de la mano.

-Foxy... ¿Qué hacemos en tu habitación...?-dijo algo nervioso al ver que cerró la puerta.

Foxy no dijo nada, solo se acercó a su armario y sacó un ramo de flores, después se las entregó al oso.

-¿S-son para m-...?

-Quiero que se las lleves a Chica.-dijo Foxy, antes de que Golden acabará de hablar.

Golden bajo un poco sus orejas, pues pensaba que esas flores eran para el, y se puso muy triste al escuchar que eran para Chica. Trató de contener algunas lagrimitas y sonrío.- Está bien... Pero, ¿Porque no se las llevas tu?-

-Porque esas flores traen una nota dentro, y en esa nota le pido que salga conmigo esta noche... Por fin he decidido a pedirle que sea mi novia.-

"Novia". Esa palabra retumbaba en la cabeza del oso una y otra vez. Estuvo a punto de dejar caer las flores, pues algo dentro de él se rompió. Sin embargo, tomó las flores firmemente y le mostró una gran sonrisa.- Estoy seguro de que le encantará la sorpresa.

-Eso espero...-el zorro sonrío igual y luego le revolvió el pelo al oso.- Eres el mejor amigo que podría tener.

El oso no dijo nada más y salió casi corriendo de la habitación del zorro. Cuando ya estuvo lo bastante lejos, las lágrimas no tardaron en salir.

Pasó un buen rato llorando hasta que logró calmarse, fue a lavarse la cara al baño y luego se dirigió a la habitación de Chica. Llego a una puerta amarilla y la toco un par de veces. De esta salió la diminuta chica(?) rubia y con ojos morados.

-¿Goldie?-preguntó la pequeña rubia.-¿Qué haces aquí? Pensé que estabas escondido con Foxy.

-Bueno... Lo estaba, pero al parecer mi hermano ya se calmo.

-Bien... ¿Y porque traes ese ramo? ¿Es para mí?

-Si, es para ti... -se lo entregó en las pequeñas y delicadas manos de la rubia.- Son de parte de Foxy... -dijo desviando la mirada y agachando un poco las orejas.

Chica lo miro por unos segundos, luego reviso minuciosamente el ramo, sacando la nota y leyéndola. Suspiro.

-Goldie... Yo sé que quieres mucho a Foxy... ¿Verdad?- el oso asintió con la cabeza.- por eso no quiero quitártelo, además de que no me gusta, me gusta alguien más...- Guardo la nota en el ramo.- ire con Foxy por la noche, pero solo para decirle que no quiero nada con el.

-Pero... Lastimaras sus sentimientos...-dijo el oso, triste. Se sentía muy mal de que él no aceptará sus sentimientos. Pero tampoco quería verlo deprimido.

-Golden... Cuando le diga que no, estará muy deprimido y esa será tu oportunidad para que se de cuenta que al único que quiere es a ti.

-... No creo que eso pase...

-Vamos Goldie, si no funciona, yo voy a ayudarte hasta que estén juntos.

-Prefiero hacerlo por mí cuenta...

-Bien... Entonces... Ya tengo que cambiarme...

-Adiós, Chica.-se despidió el oso y se fue a su habitación.

Al pasar por la habitación de el zorro, escucho que él estaba hablando con otra persona... Pero era algo extraño, nunca había escuchado esa voz. No era ni Freddy ni Bonnie. Tampoco ninguno de los Toys.

-Estoy seguro que ella te rechazará- dijo la voz misteriosa.

-Agh, cállate Charlie, estoy completamente seguro de que va a aceptar mis sentimientos.-dijo el pelirrojo, un poco enfadado.

El oso parpadeo un par de veces. ¿Quién es ese tal Charlie? ¿Un amigo de Foxy?. Golden se acercó a la puerta a punto de abrirla, pero escucho que él zorro se acercaba y salió corriendo a su habitación.

"¿Charlie? ¿Quién es el? ¿Será algún amigo? No... No lo creo... Si fuera amigo de Foxy él me lo hubiera dicho..."