- ¿Conocieron al galán que esta dirigiendo la iglesia? - hablo Karol mientras manejaba - ayer en la tarde lo vi y esta para pecar, literalmente.- Es un sacerdote, Karol - la regaño Vanessa desde el asiento trasero - no puedes referirte a el así, le debes respeto.
- Él no me esta escuchando, Vanessa, ademas no cometo ningún pecado si lo admiro de lejos.
- Aun no es sacerdote oficial - hable - le falta un año, este es su año de prueba, su año final.
- ¿Cómo lo sabes?
- Ayer estuve en la iglesia y él lo estaba comentando con Carmen.
- Dios, entonces puede desistir.
- ¡Karol!
- Esta bien, Vanessa - se encogió de hombros - ademas estoy con Roger. – fijo su vista en la carretera.
- ¿Oficialmente? - Vanessa se sorprendió.
- No, solo esporádico - Karol toco mi hombro - supe que Enrique también esta de vuelta.
- Si, ayer salimos a cenar, llego a la iglesia, es todo un abogado.
- Esta tan lindo como lo recordaba. - suspiro Vanessa.
- Nunca supe que te gustaba. - la mire sorprendida.
- Es solo que no quise demostrarlo, pero de todas maneras el gusta de ti. – tomo su teléfono de nuevo.
- Eso es mentira - dije restandole importancia - el solo es amable conmigo.
- ¡Recuerdo que a ti si te gustaba! - sonrió Karol doblando la esquina para llegar al colegio.
- Me gustaba, ahora ya no, mis prioridades han cambiado.
- Bien, señoritas - Karol se estaciono donde siempre - hemos llegado, a torturarnos en clases. – bajamos del carro riendo como de costumbre y caminamos directamente al salón de clases, la jornada estuvo sin inconveniente, aunque si con muchos deberes y talleres.
- Hoy tengo que salir con mis padres - Karol hablo mientras miraba su teléfono - lo había olvidado por completo, debo marcharme ya.
- Yo tengo que llevar a mi sobrino al pediatra, nos vemos mañana. - Vanessa se despidió de ambas con un beso y se dirigió hacia el estacionamiento de buses.
- Nos vemos mañana, Karol. - le di un beso y empece a caminar arreglando mis auriculares para escuchar música.
- Muñeca - sentí una mano sobre mi antebrazo -¿porque tan sola?
- Roger - hable bruscamente soltándome de el - no vuelvas a tocarme.
- Deja la brusquedad, solo quiero acompañarte.
- ¿Deja de seguirme? - saque mis auriculares para poder encararlo.
- Te vi salir y no quise perderte así que aquí estoy. – hablo con tono de galantería y poses de seductor.
- No tuviste que haberte molestado, puedes volver al colegio, yo me puedo ir sola perfectamente.
- Deberías sentirte feliz de que estoy aquí contigo. – alzo la voz.
- ¿Feliz? - reí - ¡por Dios! Ni que fueras tan importante, Roger.
- No me provoques - su mano tomo mi brazo de nuevo - no quieras pasarte de lista, chiquita. - me aferro con mas fuerza atrayéndome hacia el.
- Me estas haciendo daño, le debes respeto a mi amiga, deja de molestarme ¿cuantas veces debo decirte que no me interesas?
- ¿Tu amiga? Ni ella mismo se guarda respeto.
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ME ENAMORÉ DE TI
Подростковая литератураEl amor y la vida siempre nos ponen en situaciones complicadas que casi nunca entendemos, pero dicen por ahí que el corazón jamás se equivoca, ¿será cierto? En un pequeño pueblo se desatara una historia de amor no convencional entre una pareja que...